Hidrografía y Recursos Hidráulicos de Venezuela

La información que se presenta a continuación fue tomada del Atlas de la República Bolivariana de Venezuela, edición 2.014.pdf Adobe Reader Pág. 78-.

HIDROGRAFÍA Y RECURSOS HIDRÁULICOS

El ciclo del agua en la tierra

La Tierra y la atmósfera que la envuelve contienen grandes cantidades de agua. Alrededor del 97% del agua que hay en la Tierra es salada, el resto, el 3%, en forma de hielo. Sólo un 0,7% del agua de la Tierra es dulce, y se encuentra en forma de lagos, ríos, acuíferos y vapor.

La circulación y conservación de agua en la Tierra se llama ciclo hidrológico, o ciclo del agua. El agua existe en la Tierra en tres estados: sólido (hielo, nieve), líquido y gas (vapor de agua). Océanos, ríos, nubes y lluvia: el agua de la superficie se evapora, el agua de las nubes precipita, la lluvia se filtra por la tierra. Sin embargo, la cantidad total de agua en el planeta no cambia.

Una gran parte del agua que llega a la superficie, vuelve a la atmósfera en forma de vapor, directamente por evaporación o, a través de las plantas por transpiración.

La evaporación es el resultado del proceso físico, por el cual el agua cambia de estado líquido a gaseoso, retornando, directamente a la atmósfera en forma de vapor. También el agua en estado sólido-nieve, hielo, etc. puede pasar directamente a vapor y el fenómeno se llama sublimación.

La evaporación es un cambio de estado y precisa una fuente de energía que proporcione a las moléculas de agua, la suficiente para efectuarlo. De forma directa o indirecta, esta energía procede de las radiaciones solares.

La cantidad de agua que se escapa al posible uso por el hombre, dada la dificultad de medir por separado a ambos términos, frecuentemente se conoce bajo el nombre de evapotranspiración.

La influencia de estos fenómenos sobre el ciclo hidrológico, es evidentemente importante, si se considera que en muchos lugares del mundo, el 70% de la precipitación que llega a la superficie es devuelta a la atmósfera por evapotranspiración, en un porcentaje alcanza del 90%.

Desde el punto de vista hidrológico, la evapotranspiración entra, dentro del balance hídrico, en el considerando de pérdidas.

Las moléculas de agua están en continuo movimiento. Cuando llegan a la superficie se calientan por efecto de la radiación solar, aumenta su temperatura y en consecuencia su velocidad, creciendo por tanto, su energía cinética, hasta que algunas consiguen liberarse de la atracción de las moléculas adyacentes, y atravesar la interfase líquido-gas, convirtiéndose en vapor. Ahora bien, la capa de aire inmediata a la  superficie se satura pronto y ocurre simultáneamente a la evaporación el proceso inverso, por el que las moléculas se condensan y vuelven al estado líquido. La diferencia entre la cantidad de moléculas que vuelven a él, marca el carácter global del fenómeno. Si es positiva se está produciendo evaporación. Si es negativa condensación.

Cuando el agua, en estado líquido o sólido llega a la superficie de la tierra se dice que ha precipitado. El vapor de agua contenido en la masa de aire, a consecuencia de los cambios de presión y temperatura y de movimiento de estas masas, ayudados, en ocasiones, por minúsculos núcleos de condensación y material sólido en suspensión, se reúnen en gotas de agua o cristales de hielo y caen venciendo la resistencia que se le oponen hasta llegar a la superficie terrestre.

 El territorio venezolano se encuentra geográficamente en la zona tropical del planeta. La zona tropical está comprendida entre el Trópico de Cáncer ubicado en el paralelo 23º 27’ al norte del ecuador y el Trópico de Capricornio en el paralelo 23º 27’ al sur del ecuador. En esta franja territorial donde el ecuador es la línea central, el régimen del viento predominante en las regiones oceánicas tropicales se conoce como vientos alisios; particularmente, en los océanos Atlántico y Pacífico circulan de este a oeste, tienen su origen en las zonas subtropicales del norte y del sur con trayectoria hacia una franja cercana al ecuador, aproximadamente entre los 10º N y 10º S, identificada como Zona de Convergencia Intertropical. Este fenómeno atmosférico es recurrente en la zona tropical y se caracteriza, entre otras manifestaciones, por el ascenso y desarrollo de extensas nubes que propician copiosas precipitaciones, sobre todo en la región vecina a la línea ecuatorial.

El territorio continental de Venezuela está situado en la porción norte de la zona tropical en la franja 0º 38’ N y 12º 12’ N, esto significa que la mayor parte de su territorio está situado en la Zona de Convergencia Intertropical y está expuesta a los fenómenos atmosféricos citados, razón por la cual, en el territorio más próximo al ecuador -representado por el sur de Venezuela- es donde ocurren las mayores precipitaciones de agua en un ciclo anual. Además de las condiciones climáticas regidas por un conjunto de fenómenos meteorológicos que caracterizan el estado de la atmósfera en una región determinada, en Venezuela existen otros factores que intervienen en el proceso de distribución de la cantidad de lluvia en la parte terrestre; entre estos, las características orográficas del país especialmente la altitud y la posición de las vertientes montañosas de cara al este (barlovento) o al oeste (sotavento), así como la cobertura vegetal, la pendiente de la superficie y las condiciones de permeabilidad y humedad del suelo.

Escurrimiento de las aguas superficiales

En el territorio nacional escurre superficialmente en un año promedio más de un billón cien mil millones de metros cúbicos de agua, producto de los aportes de las lluvias caídas en las cuencas hidrográficas; de este gran total, un poco más de setecientos mil millones de metros cúbicos anuales se generan por lluvias caídas dentro del territorio venezolano, el resto corresponde a los aportes provenientes de cursos de agua que desembocan en el río Orinoco, en la frontera de los estados Apure y Amazonas, así como en el río Catatumbo, afluente del Lago de Maracaibo y en el río Paraguachón y otros cursos menores de agua que desembocan en el Golfo de Venezuela, todos ellos con fuentes en territorio colombiano.

Las aguas que escurren a través de las cuencas hidrográficas del país, son vertidas en el Océano Atlántico, en el Mar Caribe o en el Lago de Maracaibo y Golfo de Venezuela. Hay una excepción con las aguas que drenan al Lago de Valencia porque se trata de una cuenca endorreica y como tal, es el cuerpo de agua receptor final. El aporte total nacional de escorrentía superficial que se genera en una extensión del espacio terrestre venezolano de 916.445 kilómetros cuadrados es, en promedio, de 700.140 millones de metros cúbicos anuales. En estas cifras de escorrentía superficial se excluyen los aportes directos de las lluvias en las zonas periódicamente inundables del estado Apure, del Delta del Orinoco y en los cuerpos de agua. La distribución de los volúmenes de agua según los cuerpos receptores o vertientes es la siguiente:

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