Hidroterapia

Introducción

Desde hace mucho tiempo los humanos han utilizado el agua para alivio de sus enfermedades y males. Desde los filósofos griegos como Hipócrates que recomendaba utilizar agua fría para el alivio de la melancolía y tristeza, Celo para la locura provocada por la tristeza, el filósofo Areteo para el frenesí y el sincope.

Al paso de los años esto fue descartado y olvidado como cura para los males, y no fue hasta el siglo XVIII y XIX cuando volvió a considerarse al agua como objeto de estudio y se puso en práctica de nuevo su aplicación.

Los resultados obtenidos fueron satisfactorios y para finales del siglo XIX la hidroterapia ya era una disciplina con bases en la medicina de esos tiempos.

El mecanismo de acción del agua en el sistema nervioso se basaba en la temperatura del agua, el tiempo que estaba el agua en el cuerpo, el sitio donde se aplicaba y el modo en que se hacía. Se decía que los efectos que producía el agua cuando se usaba constantemente podrían cambiar o modificar el temperamento del paciente, la composición de la sangre así como la digestión y la absorción de los nutrientes ingeridos.

Los baños sorpresa fueron los más usados para los pacientes con problemas mentales más severos, los baños tibios o de alberca eran utilizados para sedar a los pacientes.

En el año de 1848 en México solo se sumergía a los pacientes en agua fría y no fue hasta el año de 1889 cuando se implementaron técnicas más avanzadas .

La hidroterapia en México solo se recomendaba para enfermedades mentales como la hipocondría, la melancolía, epilepsia, la clorosis y parálisis.

Los resultados de la hidroterapia para pacientes con enfermedades mentales dependían del individuo y de la reacción a estos estímulos.

Dicho esto y teniendo las bases de la hidroterapia procederé adentrándome más en esta tratamiento ya que como podemos apreciar no es tan conocido pero tiene bases para considerarlo y retomarlo a mayor profundidad en esta nueva era de cambios en la sociedad mexicana.

Desarrollo

En el año 1848, le hidroterapia estaba limitada a sumergir al enfermo mental en agua fría. En Europa la hidroterapia se hizo famosa por las obras escritas por los doctores Fleury, Seoutetten y Claridge y a partir de ese año se empezaron a investigar y a experimentar nuevas técnicas usando el agua en diferentes formas para tratar distintas enfermedades mentales.

En 1869, en el hospital militar de san Lucas se instalaron las primeras regaderas para baños de Bellevue que ya se implementaban en el viejo continente. Para el año de 1873 en este mismo hospital se acondicionaron las duchas para usar la técnica de Fleury, que consistía en regaderas con chorros de agua disparados tanto vertical como horizontalmente ascendentes y descendentes.

Así mismo en el Hospital de dementes de la ciudad de México se reemplazaron los antiguos baños por un sistema más moderno.

Se puso en marcha un proyecto de edificación en el Manicomio General de la Castañeda, y se adaptó la hidroterapia con todos los nuevos avances tecnológicos de ese tiempo y las condiciones legales que el gobierno exigía.

LA HIDROTERAPIA Y SU APLICACIÓN

La hipocondría o el mal humor

Los médicos de aquella época consideraban a la hipocondría como una neurosis cerebral. La persona que padecía esta enfermedad vivía sufriendo por una sensación imaginaria de dolores principalmente en el abdomen, hígado, colon y en el estómago.

El tratamiento era moral y físico. Consistía en proporcionar al enfermo aire puro, vistas de paisajes hermosos y una sociedad con personas alegres que cambiaran su forma de vivir e influyeran en su estado de ánimo.

La hidroterapia en estos pacientes consistía en dos baños a la semana; los demás días dos baños diarios de asiento durante media hora, sudor con sabana húmeda por dos horas y por último un baño con agua fría por tres minutos. Se recomendaba beber agua en abundancia y concluir con el tratamiento en las noches con sudor en sabana húmeda.

La histeria

Los síntomas de la neurosis histérica eran: sensación de sofocación, sensación de desmayo; insensibilidad, torcedura o dolor de alguna parte del cuerpo; expresiones incoherentes, risa, llanto o carcajadas.

A esta enfermedad se le trataba con dos baños a la semana; los demás días dos baños diarios de asiento durante

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