Hormonas Sexuales Masculinas

HORMONAS SEXUALES MASCULINAS

Los factores iniciadores se desconocen, pero al llegar a la pubertad ciertas células neurosecretoras hipotalámicas incrementan la secreción hormonal liberadoras de gonadotropinas. Esta hormona a su vez estimula a las células gonadatropicas en el lóbulo anterior de la hipófisis a aumentar la secreción de dos gonadotropinas. La hormona luteinizante y la hormona foliculoestimulante.

La luteinizante estimula a las células de Leydig, localizadas entre los túbulos semiínferos, a secretar la hormona testosterona. Esta hormona esteroidea se sintetiza en los testículos a partir del colesterol1 en los testículos y es el principal andrógeno. Al ser liposoluble, difunde fácilmente fuera de las células de Leydig hacia el líquido intersticial2 y luego a la sangre. Por un mecanismo de retroalimentación negativa, la testosterona inhibe la secreción de la luteinizante por las células gonadatropicas del lóbulo anterior de la hipófisis y la secreción de la hormona liberadora de gonadotropina por parte de las células neurosecretoras hipotalámicas en algunas células diana, como las de los genitales externos y la próstata, la enzima alfa reductasa convierte la testosterona en otro andrógeno llamado dihidrotestosterona.

La foliculoestimulante actúa en forma indirecta estimulando la espermatogénesis. La foliculoestimulante y la testosterona actúan en forma sinérgica sobre las células de Sartori estimulando la secreción de la proteína ligadora de andrógenos (ABP) hacia la luz de los túbulos seminíferos y hacia el líquido intersticial alrededor de la célula espermatogénesis. La ABP se une a la testosterona, manteniendo su concentración elevada. La testosterona estimula los pasos finales de la espermatogénesis dentro de los túbulos seminíferos. Una vez que se alcanza el grado de espermatogénesis requerido para cumplir las funciones reproductoras del hombre, las células de Sartori liberan inhibían, una hormona proteica llamada así por su función inhibidora sobre la secreción de foliculoestimulante por parte de la adenoohipofisis. Si la espermatogénesis ocurre en forma muy lenta se liberan menos inhibían, lo que permite la secreción de más cantidad de foliculoestimulante y en consecuente el incremento en la taza de espermatogénesis.

La testosterona y la dihidrotestosterona se unen al mismo receptor androgénico, que se encuentra en el núcleo de las células diana. El complejo hormona- rector regula la expresión genética, permitiendo la expresión de algunos genes e impidiendo de la otra debido a estos cambios, los andrógenos producen distintos efectos:

• Desarrollo prenatal: antes del nacimiento, la testosterona estimula el patrón de desarrollo masculino de los conductos del aparato reproductor y el descenso de los testículos. La dihidrotestosterona estimula el desarrollo de los genitales externos. La testosterona también se convierte en estrógenos (hormonas fertilizantes) en el cerebro, lo cual puede desempeñar un papel en el desarrollo de ciertas regiones del cerebro en los hombres.

• Desarrollo de los caracteres sexuales: en la pubertad3, la testosterona y la dihidrotestosterona son responsables del desarrollo y de crecimiento de los órganos sexuales masculinos y del desarrollo de los caracteres sexuales secundarios masculinos. Estos incluyen al crecimiento muscular y esquelético que resulta en una espalda ancha y una cintura angosta: crecimiento de vello púbico, axilar, facial y pectoral (dentro de los limites aportados por la herencia): engrosamiento de piel, aumento de la secreción sebácea: crecimiento de la laringe y la voz más gruesa.

• Desarrollo de la función sexual: los andrógenos contribuyen al comportamiento sexual masculino y la espermatogénesis así como también a la libido (impulso sexual) tanto en el hombre como en la mujer. Recuerde la corteza suprarrenal es la principal fuente de andrógenos en la mujer.

• Estimulación del anabolismo: los andrógenos son hormonas anabólicas: es decir, que estimula la síntesis proteica esto se evidencia en la mayor masa muscular y ósea que se observa en los hombres con respecto a la mujer.

Un sistema de retroalimentación

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