LA PRESCRIPCION ADQUISITIVA

Es sabido que el tiempo en la vida sirve para sanar heridas, como por ejemplo, la muerte de un ser querido. De igual forma, en el Derecho, el tiempo funciona como un medio sanador que permite la pérdida o la adquisición de derechos. En ese sentido, Alas, De Buen y Ramos han señalado "en el Derecho el concepto del tiempo se enlaza con el de las variaciones de los fenómenos jurídicos, con el de la forma de sus cambios; y que al hablar del influjo del tiempo en las relaciones del Derecho no se hace referencia al influjo del tiempo puro, abstraídos de los fenómenos, considerado como algo sustantivo, sino al tiempo medida de duración o expresión del cambio de los hechos o estados con eficacia jurídica". Entre las instituciones del Derecho que utilizan al tiempo como medio sanador de relaciones jurídicas se encuentra la prescripción adquisitiva.

Como se advertirá en el itinerario de la presente investigación, el fundamento esencial de la usucapión o prescripción adquisitiva, es la necesidad de proteger y estimular la producción y el trabajo. Quien durante largos años ha cultivado un inmueble, incorporando riqueza a la comunidad, debe ser protegido por la ley, afianzado en su derecho, estimulado en su trabajo. Esta solución es un tanto más justa si se piensa que frente a él está un propietario negligente, que ha abandonado sus bienes y quien se desinteresa de ellos no merece la protección legal.

Pero si se analiza la propiedad como el derecho real más completo e importante, se comprende que es el poder jurídico que permite usar, disfrutar, disponer y reivindicar de bien a su propietario.

En el artículo 2 de la Constitución, la propiedad está garantizada como un "derecho de toda persona". Es necesario, por lo tanto, analizar la propiedad en sus aspectos jurídicos y, más concretamente, como derecho fundamental de las personas.

Es por eso, que es de vital importancia reformar en ciertos acápites esta Institución positivisada en nuestro Código Civil peruano, pues por medio de ésta, delincuentes, traficantes de terrenos e invasores, después de haber posesionado de manera ilícita un bien, puede convertirse en propietario del mismo, vulnerando el hecho de que un hombre se esfuerza y trabaja para ser propietario, de que la condición de propietario le permite satisfacer sus necesidades y las de su familia, y finalmente, la razón más importante es porque le permite ahorrar para su edad madura y transmitir a sus sucesores aquello que acumuló durante su vida.

En el decurso de esta modesta monografía se tratará de analizar los orígenes de la prescripción adquisitiva en el Derecho Romano, para pasar luego a analizar sus características y requisitos exigidos por el Código Civil, sin dejar de atender los criterios por los que se debe reformar la Prescripción Adquisitiva.

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