LOS DOCENTES MEXICANOS

LOS DOCENTES MEXICANOS

• Todo tiene que ser evaluado; no solo los aprendizajes sino también los docentes, programas y proyectos.

• La mayoría de los docentes evalúan al alumnado sistemáticamente, es decir, mediante exámenes.

• De igual forma los funcionarios burocráticos han sido objeto de procesos y dispositivos de observación, inspección y supervisión sistemática.

• En cuanto al problema se pretende evaluar la calidad de la educación.

• En primer lugar se analizan algunas orientaciones de los docentes respecto a la evaluación como componente de su trabajo en el aula.

• Se consideran sus opiniones en cuanto a las estrategias procedimientos para evaluar su trabajo.

• Se debaten sus posiciones frente a la temática de la igualdad como valor social y su relación entre evaluación.

• A través de la historia podemos ver que la utilización del examen fue una herramienta sistemática utilizada en las escuelas que surgen con el estado capitalista.

• Esto se debe a dos razones: el apropiación del conocimiento es graduado; es decir hay ciertas cosas que hay que aprender primero y otras después. De acuerdo a esto se debe la aplicación de exámenes para controlar la progresión de aprendizajes. Otro fundamento es que las escuelas difunden documentos públicamente reconocidos que certifican el conocimiento.

• La evaluación lleva tiempo y el tiempo es escaso para realizar correcciones a exámenes, además hay que tener en cuenta que por su carácter arbitrario (acreditación) lleva a ciertas implicaciones conflictivas con sus familias.

• Falta de interés para realizar actividades de corrección.

• Otra problemática mas es que los docentes al evaluar necesitan dominar ciertos conocimientos, con los cuales no cuentan.

• Por otra parte el docente también es un objeto a evaluar por sus superiores jerárquicos.

• Esta evaluación hacia los docentes, también los clasifica dentro de una estructura ocupacional del sistema educativo y de esta forma definir el salario, la carrera etc.

• Los mismos docentes deberían hacer uso de su autonomía profesional para establecer patrones de valoración de su desempeño.

• Se establecen diferenciaciones salariales a fin de premiar a los mejores docentes, en cuanto a criterios de calidad del trabajo profesional.

• Se tiene una concepción del título académico como capital cultural garantizado por el estado.

• Las evaluaciones no valen en sí mismas sino que tienen un sentido instrumental y una utilidad político-técnica.

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