La Franja Amarilla

Nos encontramos en una sociedad donde ninguno de nosotros somos realistas en la forma en la cual vivimos. En verdad mirando alrededor no queda sino reconocer las grandes fallas que tenemos en la sociedad como colombianos.

Es cierto, Colombia ha mejorado en muchos aspectos, como en materia de seguridad, empleo, educación, etc. Y somos optimistas al pensar que somos: cada día más los buenos, un pueblo echado para adelante, patriotas, pero no podemos tapar el sol con un dedo, tenemos el problema de ser ciudadanos y no tener la capacidad para ayudar a solucionar problemas de una forma adecuada. Por ejemplo en protestas, actualmente lo hacemos de una forma violenta y equivocada, como sucedió hace algunos días en la estación de trasmilenio en Bogotá, aunque las razones de la protesta son válidas, la forma de proceder para buscar soluciones no lo es ya que se afectaron propiedades y personas inocentes. Lo anterior, no se puede ver como un triunfo pues no se pueden exigir derechos pasando por encima de los derechos de los demás.

Son evidentes los problemas de inseguridad, violencia, desigualdad, falta de educación, desempleo, intolerancia, racismo y otros problemas más, luego que los actores principales de esta violencia se desviaron de sus ideologías, por ejemplo, las guerrillas en Colombia se crearon más o menos hace 50 años con una ideología firme, una ideología de igualdad para el pueblo, una ideología de protección, pasamos a convertirnos en fichas que simplemente se amedrentan con armas, las cuales en algún momento se le otorgaron a nuestro país como una de sus riquezas. Un hecho real de ello ocurrió en el municipio de Puerto Boyacá, trabajadores de la zona cuentan que personas que no estuvieran de acuerdo con pensamientos y actividades ilícitas y por ende no colaboraran para que se realizaran, eran asesinados.

Grupos armados ilegales de Colombia se dieron cuenta que por medio de esta lucha supuestamente revolucionaria y de libertad para el pueblo, con la oligarquía y aristocracia colombiana, encontrarían una mejor opción, más lucrativa. Pasaron de luchar por el pueblo para convertirse en acaparadores de territorios los cuales obligaron a los campesinos a ser despojados de sus propiedades y expulsados a la zona urbana sin dinero y con sus familias desprotegidas.

Se desató un gran caos de desempleo, convirtiéndonos en escuelas de mercenarios, narcotraficantes, secuestradores, asesinos al servicio de los supuestos PATRONES jefes de carteles y mandos de fuerzas ilegales.

Otro de los problemas evidentes se presentan en la ciudad de Maicao, departamento de la Guajira, donde la ola de violencia se ha incrementado notoriamente ya que podemos ver que a diario se presentan muertes violentas de aquellos sicarios, los cuales la mayoría pertenecen al interior del país y vienen a refugiarse en este municipio, después de hacer sus fechorías en otros lugares y para así poder tener un poder, siguen delinquiendo en esta región la cual esta desprotegida por las autoridades competentes que solo se encargan de estar hostigando a los contrabandistas de víveres, los cuales no representan mayor peligro para comunidad.

Por otra parte tenemos otro factor de peligro para la comunidad la cual es el contrabando de combustible, los cuales son llamados la caravana de la muerte. Como su sobre nombre lo indica estos van con la muerte al lado por que por sus actos de imprudencia e ignorancia transportan de manera inadecuada dicho producto. Siendo así un peligro en las carreteras ya que son vehículos en pésimas condiciones mecánicas. Las autoridades no han tomado las medidas respectivas a este problema ya que en su mayoría hacen parte de los dueños de dichas caravanas o se dejan comprar.

Por otra parte las fuerzas militares de Colombia también han perdido su ideal y su enfoque para la cual fueron creados, y se dieron cuenta que la guerra se volvió un negocio en donde todos quieren ganar dinero, sacar su tajada, todo está contaminado por la avaricia y la ilegitimidad, eso sumándose a que las fuerzas militares y de policía cayeron en el juego de la corrupción.

Si miramos el contexto económico y productivo uno de los problemas a nivel nacional que se puede evidenciar primero, es la desigualdad donde los países más ricos del mundo nos explotan en materia económica obligando a que aquellos que buscaban un mejoramiento económico lo hicieran por medios corruptos.

...