La Lectura

En nuestra sociedad la lectura es un acto menos práctico, resulta difícil que las personas tomen un periódico o libro y lo lean correctamente, Un problema que debe ser tratado con profundidad y enorme perseverancia, puesto que, resulta complicado cambiar los malos hábitos que se sostiene al leer. Sería más fácil si dicho tema fuese tratado desde la educación primaria con gran paciencia y material adecuado, acorde a la edad del lector, sin presionar ni obligar al alumno para que ame la lectura, puesto que, la pasión lectora no nace sola, requiere de perseverancia y avance progresivo acompañado indispensablemente de hábitos que deben ser adquiridos naturalmente por el lector.

A más de llenarnos de conocimientos intelectuales, la lectura nos ayuda a crecer como personas, incrementando nuestros valores emocionales y dejándonos grandes mensajes de vida. Si hemos leído un libro con gran concentración y deleite podremos sentirnos gozosos por la gran cantidad de beneficios que hemos recibido. El encuentro con una lectura debe ser agradable, no incomodo ni forzoso, la lectura no se puede forzar de ninguna manera, si se lee forzadamente ninguna idea es absorbida por el lector y el acto de leer pasaría a ser un desperdicio de tiempo, puesto que no se alcanzara ningún objetivo planteado en el principio. La lectura se debe desarrollar de manera natural con voluntad e interés. Se requiere que el lector se adentre en lo que lee y que cada palabra sea entendida, sin dejar cabida a confusiones o dudas, de este modo el interés en el texto aumentará. Es increíble ver como la lectura influye en nuestro diario vivir, es notable la diferencia entre un buen lector y un mal lector; el primero es más, se puede sentir bien consigo mismo, con su entorno, con el mundo, puesto que su formación es grandiosa y a cada instante puede hablar de un tema diferente, opinar, expresarse y vivir feliz, cosa que a un mal lector le resulta difícil, al encontrarse falto de conocimientos y valores éticos indispensables para desenvolverse en el mundo.

El estudiante universitario, con mayor razón; al encontrarse dentro de un entorno que exige componentes con amplios conocimientos en el ámbito práctico y teórico, requiere de inteligencia, tanto de pensamiento, como de palabra, virtudes que se adquieren al leer. El estudiante universitario que no es capaz de adentrarse en el éxtasis de la verdadera lectura, no puede desenvolverse dentro de su carrera y defender sus intereses y pensamientos. Nuestra sociedad se encuentra en constante cambio y requiere que todas las personas que la conforman sepan a profundidad los temas que a diario se trata, en diferentes ámbitos para de esta manera sentirse capaces y confiados al expresar su punto de vista, sin caer en engaños y conservando gran seguridad al desenvolver un determinado tema.

El acto de leer engrandece el espíritu de quien lo realiza, un texto bien leído fomenta grandes valores

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