La Verguenza Española

La vergüenza española

Del mismo modo que nos emocionamos al ver una película con triste final, o nos alegramos del triunfo de nuestro equipo de futbol y lo vivimos como algo propio, o por otro lado nos estremecemos ante una escena de terror, se puede llegar a sentir vergüenza por un hecho ajeno. Y es que nuestra condición de animales sociales nos permite, en ocasiones, entender e identificar sentimientos y emociones de los demás poniéndonos en su lugar.

Se siente vergüenza ante un hecho que nos causa indignación por una falta cometida, o por alguna acción deshonrosa y humillante. También se habla de vergüenza cuando se experimenta timidez ante determinadas situaciones, como por ejemplo actuar o hablar en público.

En el caso de la vergüenza ajena, la experimentamos cuando alguien hace o dice algo que a nuestro juicio es poco noble, humillante o cruel.

Puede ser que un ciudadano de uno de los países implicados en la II Guerra Mundial sienta vergüenza ajena por el papel que desempeño su país o por los líderes que los representaban debido a las atrocidades que se cometieron. O bien cualquier individuo que sienta indignación como ser humano al ver las escenas de miseria que ocurren a diario en África.

En el caso de la vergüenza ajena española, el avergonzado no entiende ni identifica sentimientos y emociones en los demás poniéndose en su lugar sino que proyecta en ellos su miedo al ridículo, a la burla pública y al que dirán. Y es tal ese miedo a lo que puedan pensar los demás que cuando es otra persona la que realiza el acto en cuestión, siente una vergüenza como si fuera propia

La vergüenza española es el temor a la crítica y a la exclusión social, alejada de las grandes causas como el hambre en África o la guerra, y más relacionada con las manías y miedos sociales de un pueblo o cultura determinada como la hispana.

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