Madurez Lectoescritora 2

Introducción:

La labor psicopedagógica, dada su amplitud, requiere de las herramientas metodológicas básicas e imprescindibles para cumplir con su compromiso de intervenir, colaborar y reeducar las dificultades de aprendizaje detectadas en los estudiantes.

Contar con un sustento teórico, además de estrategias concretas para intervenir en forma efectiva en el nivel educativo, se ha transformado en una necesidad fundamental, ya que los grandes problemas de aprendizaje se concentran, en gran medida, en tres áreas básicas: la lectura ,escritura y el cálculo. Para ellas, se requiere de un dominio conceptual y teórico que proporcione las bases y una intervención psicopedagógica, acorde a las necesidades educativas individuales de los estudiantes.

Es así, como en este informe se desarrolla el tema de los problemas de aprendizaje en lectura, escritura y además cálculo, con el fin de entregar una herramienta real con la cual el psicopedagogo pueda contar, para enfrentarse con éxito a la ardua labor que tendrá en sus diversas tareas, tales como: prevenir, educar y/o reeducar a niños que presenten algún déficit.

Muchas veces los problemas en estas áreas desbordan la labor docente, por no contar con los conocimientos necesarios, ni las herramientas fundamentales para apoyar a los estudiantes en sus distintos ritmos de aprendizaje , y por supuesto, sus necesidades educativas especiales. Por esto, el conocimiento y manejo adecuado de estrategias y técnicas que permiten el tratamiento oportuno de las dificultades en la lecto-escritura y el cálculo, estará favoreciendo el redimiento global del estudiante, y con ello, afectando positivamente su autoestima.

A nivel Sensorio-Motor

Una de las teorías sobre el desarrollo de la lectura o escritura mas difundidas desde los años 20 y 30, fue la perspectiva perceptivo –motriz, que enfatiza que la única condición específica y relevante que subyace este aprendizaje, es la capacidad del individuo para reconocer visualmente símbolos gráficos, para reproducirlos en la escritura y para asociarlos a sonidos, pero esta teoría ha sido sometida a diversos estudios y se ha encontrado que niños que han presentado dificultades en la lectura y escritura tienen conservado su proceso madurativo .

En la teoría perceptivo-motriz, la discriminación visual se da desde el punto de vista sensorial; este aspecto tuvo gran auge alrededor de los años 60, hace referencia a que el niño debería poseer habilidades de percepción visual en el reconocimiento de tamaño, forma, color y posición relativa de los objetos, para lograr una adquisición de la lectura y escritura, es claro que desde lo sensorial, debe existir un proceso madurativo ocular para que desarrolle la habilidad del reconocimiento gráfico; pero se han encontrado estudios donde el tamaño, forma, color e ilusiones ópticas, no constituyen un efecto significativo en el rendimiento lector.

Otro aspecto importante en la teoría perceptivo motriz, es que el niño debe poseer una destreza visomotora, para copiar y reproducir formas visuales con la habilidad para realizar coordinaciones motoras finas y que reflejen la maduración normal en las distintas etapas que caracteriza a cada niño. Un test utilizado para esto ha sido el de Bender, el cual ha proporcionado las bases para la evaluación de lectura: este consiste en la copia de figuras humanas y geométricas; pero estudios realizados sobre el rendimiento del test para la habilidad lectora, han mostrado que no tiene un verdadero valor predictivo sobre las dificultades en la lectura y que este se relaciona mas con los aspectos caligráficos de la escritura.

Pero, si bien es cierto, la psicomotricidad y la sensopercepción son la base para el desarrollo de ciertas habilidades que favorecen la lectura y escritura, no se puede pensar en que esta sea la única causa de muchas de las alteraciones, pues existen limitaciones en esta teoría perceptivo-motriz.

A nivel Cognitivo-Lingüístico

Dentro de los factores cognitivos mas relacionados con la lectura y escritura están la inteligencia general y las habilidades mentales específicas, como la atención y la memoria, pero también tienen un papel importante los aspectos culturales especialmente cuando estos afectan el conocimiento. Esto se relaciona con que muchos niños que tienen una misma edad cronológica, no necesariamente tienen la misma edad mental, pues el medio influye a la hora de la adquisición de conocimientos.

En general, desde estos sistemas perceptivo-motores se enfatiza en la importancia de los procesos visomotores como requisito para la formación de conceptos y del pensamiento abstracto y para los aprendizajes escolares; en particular se resalta la importancia de esos procesos, tal y como son medidos por los tests disponibles (Bender 1938, Benton, 1963; Frosting, 1964; Koppitz, 1981,entre otros). Marianne Frosting trabajó arduamente en el diagnóstico y tratamiento de los problemas de percepción visual, explorando ocho aspectos:

1.- Coordinación Ojo Mano: Mide la habilidad para dibujar líneas rectas o curvas con precisión de acuerdo a los límites visuales.

2.- Posición en el espacio: Considera la habilidad para iguar dos figuras de acuerdo a rasgos comunes.

3.- Copia: Implica la habilidad para reconocer los rasgos de un diseño y repetirlo a partir de un modelo.

4.- Figura Fondo: Mide la habilidad para ver figuras especificas cuando están ocultas en un fondo confuso y complejo.

5.- Relaciones Espaciales: Se refiere a la habilidad para reproducir patrones presentados visualmente.

6.- Cierre Visual: Mide la habilidad para reconocer una figura estimulo que ha sido dibujada de manera incompleta.

7.- Velocidad Visomotora: Implica la rapidez con la que un niño puede trazar Signos establecidos asociados a diferentes diseños.

8.- Constancia de Forma: Mide la habilidad de reconocer figuras geométricas que se presentan en diferente tamaño, posición o sombreado

A nivel de Psicomotricidad:

Los trastornos del desarrollo psicomotor son muy difíciles de definir. Reflejan siempre alteraciones en las que se ven afectados varios aspectos del desarrollo del niño; de ahí la importancia de intervenir cuanto antes, pues el trastorno puede ir repercutiendo negativamente en otras áreas del niño, agravando y comprometiendo el desarrollo del mismo.

Podemos decir que, de modo general, los trastornos psicomotrices están muy ligados al mundo afectivo de la persona; de ahí, que en la valoración se deba contemplar la globalidad del individuo.

Como finalidad del tratamiento, se buscará que el niño consiga un mayor dominio sobre su propio cuerpo y, por tanto que logre más autonomía;

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