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Marco Conceptual


Enviado por   •  2 de Septiembre de 2014  •  1.405 Palabras (6 Páginas)  •  417 Visitas

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MARCO CONCEPTUAL:

La ética como disciplina de la filosofía es la aplicación de la razón a la conducta, exige

reflexionar y juzgar individualmente sobre el deber de cada momento y circunstancia

concreta. Es la reflexión de lo que se debe hacer porque está bien, por tanto es la valoración

para tomar una decisión libre y actuar en sentido del bien universal.

Esta reflexión es intransferible, pues en la ética cada hombre se obliga por su condición

humana al bien propio y al de sus semejantes.

La reflexión ética en un sentido estricto alude al bien como fin último de todos los hombres,

para preservar la vida, la integridad y la libertad del ser humano. Estudia al hombre en la

concreción y responsabilidad de sus actos. La conciencia ética debidamente formada es el

fundamento del deber ser como ideal de la conducta, que significa el comportamiento ético.

La ética como ciencia aplicada se sustenta en los principios universales del bien, válidos

en cualquier circunstancia de tiempo y de lugar.

El objeto material de la ética es el acto humano, es decir el acto realizado consciente y

libremente. Su objeto formal es la rectitud moral; de esta manera la ética persigue con el

acto el fin bueno. Para que un acto sea considerado como bueno o moral debe de

realizarse conforme a la naturaleza humana, por lo tanto la ética estudia la moralidad de

los actos humanos.

El acto humano se concibe como el ejercicio de las facultades del razonamiento, la libertad

y la voluntad, lo que implica la realización de un acto responsablemente. En él lo

más esencial es la intencionalidad, es decir el hombre como dueño de su voluntad y su

libertad se conduce con conocimiento y responsabilidad, el actuar así lo hace comportarse

como persona. De esta manera los actos humanos que sanciona la ética y la moral

están determinados por el conocimiento, la voluntad, la aceptación y la responsabilidad.

Los seres humanos durante todos los tiempos se han regido por las exigencias, principios

y valores que sustentan el comportamiento humano en forma individual o colectiva.

La ética hace referencia a estas exigencias a través del ejercicio de la libertad y de la

responsabilidad de los actos realizados, por ello se le llama acto humano, porque fue

razonado; éste compromete porque involucra la voluntad y libertad para decidir, esta característica

es en sí misma exclusiva del ser humano.

La moral considerada como regla de conducta es el conjunto de comportamientos y normas

que algunos suelen aceptar como válidos, porque son los deberes y obligaciones

para con la sociedad. La palabra moral etimológicamente tiene que ver con las costumbres

y con las disposiciones sociales, que pueden ser esencialmente malas o inmorales

por muy válidas y aceptadas que éstas se presenten.

La moral debe guiar la conducta humana en los comportamientos cotidianos de acuerdo

a los principios y valores de un grupo determinado. Apela a las propias convicciones del

individuo y se relaciona directamente con el quehacer humano haciendo referencia al

bien y al mal. Marca las directrices que dentro del grupo son aceptadas como buenas,

por consiguiente, se puede decir que la moral es la regla de las costumbres dirigidas o

encaminadas hacia el bien de las personas.

La conciencia moral u órgano axiológico de lo ético va más allá de la mera complacencia

o convicción personal, en tanto que juzga el bien o el mal de lo hecho y a la bondad

o maldad de quien lo hace, porque el hombre siempre elige un bien pero en ocasiones

no elige bien.

El bien del hombre consiste en orientar su conducta hacía el perfeccionamiento como

persona, el cual requiere de la moral para normar su actuación dentro del grupo, ya que

de ella emanan las directrices que le permitirán actuar hacia el bien común, proporcionándole

paz, armonía y tranquilidad de conciencia para vivir dentro de la sociedad. Así

resulta que la moral no es restricción, limitación o prohibición, sino más bien afirmación,

elevación, expansión y plenificación.

A la persona humana se le reconoce por su actuación consciente expresada en los múltiples

actos de su vida, todos condicionados por los valores que en ética se derivan del

principio del respeto igual y recíproco a la dignidad humana. Considerando que la dignidad

es el carácter de lo que tiene de valor la persona en sí y por sí; es el valor peculiar

que todo hombre tiene como persona en tanto que es racional, perfectible, inviolable,

único, autónomo y sensible por lo

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