ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

Movimiento


Enviado por   •  12 de Febrero de 2014  •  1.838 Palabras (8 Páginas)  •  171 Visitas

Página 1 de 8

ncíclica que defendió a los trabajadores El 15 de mayo de 1891, el Papa León XIII lanzaba una encíclica con el nombre de “Rerum Novarum”. Ante la terrible explotación laboral de los obreros, la Iglesia no podía quedarse parada. Su respuesta fue un documento en donde explicaba cómo estaba la situación obrera, y defendiendo la justicia y a los trabajadores. La solución que daba, pasaba por que el Estado, la Iglesia, el trabajador y el empresario tenían que trabajar juntos. “La Carta Magna del Trabajo” tuvo una gran influencia

Una encíclica es una carta que dirige el Papa a obispos o fieles en donde expone la doctrina de la Iglesia en puntos concretos. Y una de las más importantes de la Historia es la que comienza con las palabras Rerum Novarum, lanzada por el Papa León XIII el 15 de mayo de 1891. ¿Dónde reside su importancia?

Antes de nada, situémonos en la época. Estamos en plena Revolución Industrial, lo que supuso un cambio brutal en la sociedad, sobre todo para los trabajadores. La cuestión obrera fue un drama muy doloroso debido a que la tecnología relegó al trabajador a la categoría de máquina. El más fuerte ganaba, a costa siempre del débil. Al final la clase trabajadora sufrió una explotación muy grande y claro, terminó protestando y creando malestar social.

La Iglesia no podía hacer oídos sordos ante unos derechos humanos que estaban siendo pisoteados. Al principio, su postura ante este problema se limitó sobre todo a las ayudas caritativas. Pero el Papa León XIII decidió mojarse con la encíclica Rerum novarum. Ya no se trataba sólo de caridad, sino de justicia. “Es inhumano abusar de los hombres, como si fueran cosas, para sacar provecho de ellos”, dice.

Este texto describe en 42 puntos en qué condiciones vivían los sufridos trabajadores, defiende el derecho a la propiedad privada y rebate las, para ellos falsas, teorías del socialismo (recordemos: sólo existe la clase trabajadora, un gobierno basado en la igualdad absoluta...).

¿Cuál es el remedio que propone el Papa? Dice que la Iglesia, el Estado, el empresario y el trabajador tienen que trabajar juntos. La Iglesia debe interesarse por los aspectos religiosos y morales; el Estado tiene que intervenir para que haya Justicia; y los trabajadores y empresarios deben organizar asociaciones que les protejan (sindicatos). Y todo esto lo expone la Encíclica con mucho detalle. Han dicho que es el mejor documento escrito sobre el tema.

Ir directo al índice

Secuelas

El actual Papa también se ha preocupado por la situación laboral Si algo está claro en la Encíclica Rerum Novarum es que la remuneración que el trabajador reciba tiene que ser suficiente para mantener una vida de razonable confort. Si la necesidad o el miedo le hacen aceptar malas condiciones, entonces es víctima de una injusticia. Era la primera vez que la Iglesia exponía con precisión la realidad obrera. Un siglo más tarde, en 1991, Juan Pablo II firmó la Encíclica Centesimus annus, en donde se explica la situación laboral tanto de los 100 años anteriores como de la actual. Otros documentos del actual Papa que tratan el tema social son Sollicitudo Rei Socialis, de 1987, y Laborem Exercens, de 1981.

El Papa que firmó la Rerum Novarum, León XIII, se distinguió por su profunda preocupación social que le llevó, por ejemplo, a crear un banco para ayudar a los pobres. En 1878 sucedió a Pío IX en la cátedra de Pedro, con 69 años de edad. Tenía que guiar a la Iglesia en su entrada en el siglo XX. Ha llegado a ser conocido como el primer Papa de las encíclicas y el Papa de los obreros. León XIII abrió las puertas del Archivo Vaticano -de acceso muy restringido durante siglos- a favor de la investigación histórica.

Ir directo al índice

La carta magna del trabajo A finales del siglo XIX, los obreros tenían que aguantar jornadas de 18 horas de trabajo intenso, salarios de hambre y miseria y unas condiciones inhumanas de vivienda. También era común la explotación a niños y mujeres en las fábricas. Esta situación tenía que cambiar. Comenzaron las revueltas obreras y las huelgas. La Iglesia se puso de parte del trabajador con la “Rerum Novarum”.

1. EN QUÉ CONSISTE EL REFORMISMO.

Sus orígenes, sus ideólogos, sus postulados, sus críticos: Hace poco más de 100 años que surgió el reformismo. Eduard Bernstein, quien fue uno de sus principales ideólogos, aseveró que una “tenaz lucha prolongada, avanzando lentamente de posición en posición”[1], llevaría al socialismo, por lo que éste sería consecuencia de la evolución, no de la revolución; se alcanzaría luego de una serie de pequeños éxitos, idea que atribuyó a Marx y Engels, de manera indebida.

Por esto, a Bernstein se le considera también el padre del revisionismo, nombre que él mismo dio a su método de “revisar” o “reinterpretar” a los autores citados para, según su pretensión, poner de manifiesto lo que en verdad quisieron decir, eludiendo el debate ideológico de frente, respecto al socialismo científico y la teoría de la revolución, y por esto mismo, Lenin denunció al revisionismo como una forma nueva a la que recurría la burguesía para atacar al marxismo, ahora desde dentro, luego que fuera derrotada en su lucha ideológica franca.[2] De este modo, el reformismo y el revisionismo, sin ser sinónimos, nacieron juntos, como hermanos siameses.

Otros ideólogos del reformismo fueron Conrad Schmidt, Otto Bauer, Rudolf Hilferding, Mijail Tugan-Baranovski, Carlos Kautsky y Ferdinand Lassalle. Bernstein publicó su principal trabajo en 1899, Las premisas del socialismo y las tareas de la socialdemocracia, año en que surge la Segunda Internacional en que prevalecieron las tesis reformistas. Hasta nuestros días, la Internacional Socialista, que aglutina a los partidos socialdemócratas del mundo, reivindica aquella

...

Descargar como (para miembros actualizados) txt (12 Kb)
Leer 7 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com