ORGANIZADORES GRUPALES. SINTESIS

ORGANIZADORES GRUPALES

SINTESIS

ALUMNA:  MARINA SALVATIERRA

PROFESORA: MARCELA CAPELLI

COORDINADORA: LORENA LUCERO

CO-COORDINADORA: CLAUDIA CASTILLO

CONSTRUYENDO ALTERNATIVAS SEDE RAMOS MEJIA

AÑO 2021

ORGANIZADORES GRUPALES

Llamamos organizadores grupales a las estructuras latentes que gobiernan a los pequeños grupos en función de las cuales se despliegan las escenas manifiestas. Se trata de formaciones dramáticas, en sentido teatral, que dan sustento a las distintas situaciones que se viven dentro de los grupos.

Para poder intervenir en situaciones grupales el psicólogo social deberá tener en cuenta escenas que organizan desde adentro a los grupos y que tienen que ver con el mundo interno de los sujetos que lo conforman y también las situaciones externas que podrían estar organizando la situación grupal desde afuera. A los primeros, los que organizan desde adentro, se los llama organizadores internos y a los segundos, organizadores externos.

ORGANIZADORES EXTERNOS

Los organizadores externos pueden ser: modelos ideológico culturales (culturas imperiales con modelos de dominación y/o marginación o culturas fraternas con modelos de reciprocidad y/o solidaridad), escenarios sociales contextuales, políticos (actuales o históricos), institucionales, organizacionales, los mitos (el paraíso, el pecado original, el diluvio universal, el mesías, el fin del mundo, cruce de los Andes, la mano de Dios, etc.), ritos y prácticas tanto universales como locales (ritos de iniciación, de transición, iniciáticos, el locro del 25, el asado entre amigos, el futbol de los domingos, etc.) , las ideologías, cosmovisiones y los paradigmas reinantes.

Los Organizadores Externos pueden expresarse en las situaciones grupales por escenificación, contraposición o desconfirmacion, es decir, siendo ignorado completamente. La contraposición y la desconfirmacion se dan exclusivamente con los escenarios contextuales actuales.

ORGANIZADORES INTERNOS

Los Organizadores Internos han sido objeto de desarrollo de numerosos investigadores del campo grupal, entre ellos, Pichón Riviere, Wilfred Bion y Didier Anzieu.

ORGANIZADORES GRUPALES INTERNOS SEGÚN ENRIQUE PICHON RIVIERE

LA MUTUA REPRESENTACION INTERNA

La MRI es la internalización reciproca del otro. Lo que se internaliza no es solo la imagen del otro, sino el sistema total en el que ese otro se incluye y la relación que mantiene conmigo.

La internalización es fantaseada. Nunca internalizamos la realidad del otro, sino que por mecanismos de proyección y transferenciales, internalizamos al otro desde nuestras fantasías. (En este sentido cuando mayor es el ajuste que existe entre la imagen real del otro y Nuestra internalización de él, mayor es el índice de salud mental. El grado de deformación de la realidad es indirectamente proporcional al índice de salud mental)

Por qué la MRI es para Pichón organizador interno del grupo. Porque es a partir de esta MRI, de la inclusión del otro en mi mundo interno, la internalización del grupo como sistema del cual formo parte, que se genera el sentimiento de pertenencia, lo que habilita para la realización de la tarea de manera conjunta con los otros. Es la MRI la que también sostiene los procesos de asunción y adjudicación de roles que determinan los modos de funcionamiento grupal. La MRI organiza las relaciones dentro del grupo.

Los sujetos van a los grupos por una necesidad que es interna, el objetivo ultimo es la satisfacción de esa necesidad, para lograrlo se establece la tarea como aquellas acciones que debemos implementar para el logro del objetivo.

Esta tarea, al plantearse desde lo grupal, permite la emergencia de la MRI, en la que el otro es internalizado e incluido en mi mundo interno a partir de poder verlo como inscripto y necesario para la satisfacción de mi necesidad.

Anzieu es uno de los primeros en hablar de un imaginario grupal. Con el termino de imaginario grupal Anzieu designa las construcciones grupales producto de la puesta en común de las imágenes interiores y de las angustias de los participantes, de la escenificación de las fantasías. Incluye la producción de rituales, mitos e ideas. Todo grupo, desde la perspectiva psicoanalítica, requiere la creación de un imaginario para constituirse como tal.

Cuando las personas se agrupan, con distintos objetivos, aparecen sentimientos, deseos, miedos y angustias, emociones que facilitan u obstruyen la realización de la tarea manifiesta. La hipótesis de Anzieu es que entre el grupo y la realidad, entre el grupo y él mismo, entre el grupo y el individuo, existe, además de la relación establecida por la interacción de las llamadas fuerzas reales, una relación imaginaria que explica distintos fenómenos y procesos, no determinados por los objetivos manifiestos de la actividad grupal.

René Kaës, otro autor pertenceciente a la Escuela Francesa de psicoanálisis, planteó la hipótesis de que existe un aparato psíquico grupal, tal como existe un aparato psíquico individual, más exactamente, una colección de individuos se convierte en grupo cuando sus aparatos psíquicos individuales construyen un aparato psíquico común. Y entre las características de este aparato psíquico grupal hay lo que llamaron un Yo-piel de grupo que se construye y que va a permitir distinguir lo que está dentro del grupo y lo que está afuera.

Todo grupo tiene, de acuerdo a Anzieu, esta envoltura gracias a la cual los individuos se mantienen juntos. Dicha envoltura es como una membrana que presenta dos caras. Una mira hacia la realidad externa, física y social, y hacia los otros grupos, teniendo en cuenta las reglas, normas, rituales, prácticas e ideas que los organizan. Esta cara externa funciona como barrera protectora y regula los intercambios con el exterior. A través de su cara interna, la envoltura grupal permite el establecimiento de un estado psíquico transindividual que propone llamar un Sí-mismo de grupo. El grupo tiene así, un Sí-mismo propio. Este Sí-mismo es imaginario, es el continente en el interior del cual va a activarse una circulación fantasmática e identificatoria entre las personas. Es él el que hace que el grupo viva. Las observaciones demuestran que la situación de un grupo es vivida por la mayoría o por todos sus miembros, esencialmente al principio, a nivel de las representaciones imaginarias más arcaicas. Estas representaciones pueden obstaculizar o facilitar el funcionamiento del grupo con relación a sus fines. El ingreso a un grupo lleva al individuo a una regresión. Se produce angustia por despersonalización, (Rene Käes nos habla de una tendencia a la homomorfia: “somos todos iguales, no hay diferencia entre nosotros) y se generan diversos mecanismos de defensa. Esta vivencia de unidad perdida se recompone luego en la construcción compartida de la vivencia de la unidad grupal en el sentimiento del "nosotros", del grupo como un todo (nuevamente René Käes conceptualiza este aspecto como una tendencia a la isomorfia: somos diferentes, pero tenemos aspectos que nos unifican) Se puede admitir que en toda situación de grupo hay una representación imaginaria subyacente común a muchos de sus miembros, que da cuenta de la unidad y de lo común compartido. Esas representaciones pueden obstaculizar el funcionamiento del grupo, con relación a los fines que racionalmente se propone, y pueden ser causa de parálisis en el funcionamiento interno del grupo o de errores en la actitud en relación a lo que requiere el principio de realidad. Pero, cuando un grupo funciona eficazmente, es también una representación imaginaria la que le permite encontrar la solidaridad y la eficacia. Cada grupo construye significaciones imaginarias propias, como, mitos, rituales, costumbres, prácticas e ideologías.

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