Oratoria

Introducción

La Oratoria es una derivación de la antigua retórica griega, concebida como el arte del buen decir. También se le ha definido como el estudio y la aplicación de formas de comunicación oral y escrita, orientadas hacia la persuasión y el dominio de las masas.

En él se desarrollaran puntos como: ¿Qué es la oratoria?, objetivos de la oratoria, afección de la oratoria entre otros.

Este trabajo tiene por finalidad ampliar el conocimiento de una manera clara y concisa de lo que es la oratoria de acuerdo a la teoría dada por Renny Yagosesky en su libro “El poder de la oratoria”

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¿Qué es la Oratoria?

Es una representación de comunicación interpersonal, a través de la cual una persona denominada Orador se sirve de una serie de actitudes, así como de técnicas verbales y no verbales, para influir sobre un determinado grupo de de personas, designadas Público, con la intensión de que piensen, sientan y actúen de una manera previamente establecida.

Objetivos de la oratoria

Podemos decir que la oratoria tiene tres objetivos básicos, que le dan sentido o son su razón de ser:

1. Relacionarse: Relacionarnos es una necesidad vinculada con la conservación misma de la existencia, además no es ningún secreto que somos seres grupales y que necesitamos relacionarnos y nos gusta hacerlo. La oratoria es una excusa para satisfacer esa poderosa necesidad que clama nuestro interior, si lo vemos de un nivel menos elaborado podemos decir que se necesita crear una relación aunque sea breve, para poder comunicar los mensajes que estimamos importantes de transmitir a nuestros semejantes.

2. Expresarse: Como humanos nos relacionamos a través del lenguaje, sea verbal o no verbal. Sentimos impulso sentimos de transmitir a otros lo que sentimos y ese es un signo característico de nuestra especie. Luego de crear una relación interpersonal,

3. Influir: Modificar la percepción, actitud o manera de actuar de los interlocutores.

Bases de la oratoria

Claridad: Se refiere a claridad mental o claridad en las ideas. Para decir algo es necesario y conveniente saber antes lo que se dirá, se deben tener bien definidas y desarrolladas las ideas durante el discurso, explicaciones y ejemplos claros.

Sencillez: Alude al factor comprensibilidad. El orador debe expresarse con un lenguaje, que todos o al menos la mayoría de los oyentes puedan entender sin necesidad de esforzarse.

Concisión: Es la capacidad de seleccionar y expresar lo prioritario, lo valioso, lo esencial del tema que se elige para exponer. Para ser conciso se debe evitar lo redundante, lo inexpresivo y lo artificioso, es decir, se debe evitar la prolongación innecesaria, la cual corre el riesgo de agotar al público.

Coherencia: Es la capacidad de iniciar, continuar y culminar la exposición de un tema, sin perder el sentido de la idea principal, ni romper el hilo temático. Se pueden desarrollar sub-ideas, siempre y cuando se mantenga el tema central que es la prioridad. La coherencia permitirá que el oyente capte con facilidad las ideas, una tras otra.

Fluidez: Hace referencia a la facilidad con la que se emiten las palabras y frases, por parte del orador. Este deberá expresarse de manera moderada, sin rapidez ni lentitud, y sin hacer pausas muy largas o frecuentes.

Naturalidad: Se entiende por naturalidad una actitud autentica, el orador de comportamiento natural es percibido como un comunicador relajado y seguro de sí mismo, como alguien que se siente cómodo consigo mismo y que no intenta aparentar algo distinto. La naturalidad se logra mediante la práctica y la honestidad.

Elegancia: Esto se logra combinando inteligentemente variables como: Vocabulario adecuado, entonaciones apropiadas, buena dicción y un lenguaje personal congruente con la personalidad del orador, el contenido del discurso y las expectativas del público.

Impacto: Es muy posible que logre un impacto en el público si logra expresarse con naturalidad, fluidez, coherencia y sencillez, Si pensamos que tenemos algo importante que decir, es conveniente encontrar formas impactantes de decirlo, con la finalidad de que sean escuchadas, aceptadas y recordadas. Solo se conseguirá atención y respeto si el orador habla para el público no para sí mismo.

¿Quién tiene el poder en la oratoria?

El Orador es quien tiene el por en la oratoria.

Conceptos básicos de la oratoria

Es una parte de la argumentación. Se la considera como el arte de la elocuencia o como el arte de hablar con elocuencia, o arte que enseña las reglas para llegar a ser un buen orador.

La Oratoria es a la vez un arte, una ciencia, una técnica y un instrumento.

Es una ciencia, de observación, en cuanto tiene como principio reglamentado: conocer.

Afecciones de la oratoria

Muletillas: Es una palabra o frase que se repite mucho por hábito, en ocasiones llegando al extremo de no poder decir frase alguna sin ella. Como por ejemplo: este, eh, pues, ¿me explico?, okey, o sea, y nada. Entre otras

Modismos: Es un hábito, una costumbre lingüística que tiene la función de ahorrar energía, se define como una expresión fija, privativa de una lengua, cuyo significado no se deduce a las palabras que la forman.

Ignorancia: Suele entenderse de forma general como ausencia de conocimiento.

Miedos: Estado de privación que reduce la afectividad comunicacional e impide el despliegue de las capacidades expresivas potenciales de los afectados.

Desatención: Descortesía, Falta de respeto.

Indiferencia: Estado del ánimo en que se fastidio a un objeto o negocio determinado.

Imprudencia: Falta de cordura, discreción y cuidado, que una persona demuestra en sus acciones.

Lo correcto e incorrecto de la oratoria

Lo correcto:

Fluidez al hablar.

Respeto en la palabra.

Poder de convencimiento.

Proyección adecuada.

Elocuencia.

Lenguaje visual y fónico.

Lo incorrecto:

Tonos altos y bajos.

Falta de modulación.

Mala pronunciación.

Ignorar términos.

Uso de goma de masc.ar

Excesos de confianza.

Emplear términos no reglamentarios.

Ejercicios para lograr una excelente oratoria

7 ejercicios para hablar para lograr una excelente oratoria:

1. Respiración: Ejercita tu respiración para fortalecer tu diafragma y lograr así un mejor volumen en tu voz y para que no te falte el aire mientras hablas por horas.

Ejercicio: Siéntate de manera que tu espalda quede derecha, tu pecho un poco arriba y

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