PARÁFRASIS 2

PARÁFRASIS 2

Texto transcrito “Ignaz Semmelweis y su investigación de la etiología en la fiebre puerperal” de José Gómez Romero (1983).

En el año de 1844,260 de 3157 madres, es decir el 8.2%, que terminaron su labor de parto en la Primera División de Maternidad, fallecieron a causa de fiebre puerperal; al año siguiente la tasa de mortalidad fue de 6.8% pero en 1846 dicha tasa se elevo hasta un 11.6%.

Lo preocupante de estas cifras era que en la Segunda División de Maternidad del mismo hospital ubicado en Viena las tasas de mortalidad a causa de la fiebre puerperal, fueron simplemente de 2.3,2.0 y 2.7 %.Para lograr resolver este problema, se empezaron a tomar en cuenta ciertos factores tradicionalmente aceptados como los causantes de la fiebre puerperal; por ejemplo, los cambios atmosféricos y cósmico-telúricos que afectaban a las mujeres en trabajo de parto hospitalizadas, es decir, eclipses solares o lunares, lunas llenas,etc.

Pero en realidad esta hipótesis los seguía dejando sin respuesta ante el problema por el cual se veían afectadas de manera predominante las pacientes de la Primera División de Maternidad en comparación con las de la Segunda División.

De igual manera otro aspecto que ponía en entre dicho la explicación de la epidemia fue el caso de las madres que no alcanzaban a llegar al hospital y entraban en labor de parto en camino a este, pues a pesar de las condiciones difíciles de un parto así en vía pública, los casos de fiebre puerperal en estas mujeres era menor que entre las internas de la Primera División.

Otra explicación que se creía posible fue el hacinamiento, lo cual de considero con baja probabilidad pues las condiciones de sobrepoblación eran mayores en la Segunda División. Asimismo se eliminaron las hipótesis basadas en los tipos de cuidados y dietas, pues estos habían sido los mismos para ambas divisiones.

Después de esto una comisión dedujo a que dicho padecimiento se debía al mal trato y las manipulaciones a las que eran expuestas las pacientes durante su revisión eran muy violentas, pues los estudiantes de medicina eran los que las atendían.

Ante dicha explicación Semmelweis afirmo que cabía establecer las presentes objeciones: primeramente, las lesiones y el dolor durante el trabajo de parto eran mucho más intensas que las de una simple examinacion.aun cuando se diga que sea violenta; en segundo lugar, las parteras y los estudiantes que realizaban los exámenes en la Segunda División lo hacían de la misma forma que los de la Primera y por último, a partir del informe de la comisión, el numero de los estudiantes practicantes fue reducido a la mitad y se minimizo la revisión de mujeres embarazadas.

Después de esto, hubo una pequeña baja para luego elevarse más que nunca la tasa de mortalidad. No se encontraba explicación para este tipo de cosas, incluso llegaron a pensar que todo se debía a la presencia del sacerdote en el hospital, pues para dar el sacramento a una mujer en su lecho de muerte antes tenía que pasar por cinco pasillos mas, este llevaba un acompañante que iba tocando una campana y se creía que era una imagen maligna y debilitante para las mujeres. Pero este problema no se presentaba en la Segunda División, pues ahí el sacerdote pasaba directamente al cuarto de las mujeres desahuciadas sin tener que pasar antes por otros pasillos.

A partir de esto, se le pidió al sacerdote que optara por otra ruta para poder llegar a la sala de la Primera División, así como también se le pidió excluir su campana, de esta forma, el sacerdote llegaba y nadie se daba cuenta, De igual manera, la tasa de mortalidad no disminuyo.

Se produjo una hipótesis más, pues se observaba que en la Primera División las internas fallecían de espaldas, y en la Segunda División lo hacían de lado, para lo que se aconsejo el uso de la postura lateral en la Primera, sin embargo la tasa de mortalidad se mantuvo sin variación.

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