PREVENCION DE ADICCIONES EN EDUCACION MEDIA SUPERIOR
Enviado por erickrene • 30 de Agosto de 2012 • 2.822 Palabras (12 Páginas) • 1.103 Visitas
Prevención de adicciones en educación media superior
El mayor nivel de ingreso económico está asociado con mayores niveles de consumo y adicción
La evidencia científica ha demostrado que los programas pueden evitar 20% de todos los inicios en el mundo del consumo de drogas
La prevención escolar debe enfocarse en las habilidades sociales y académicas de los jóvenes, incluyendo el mejoramiento de las relaciones con los compañeros, el autocontrol, el poder manejar los problemas y las habilidades para rehusar las drogas. De ser posible, los programas de prevención basados en la escuela deben ser integrados al programa académico escolar, ya que fortalecen los lazos de los estudiantes con la escuela y los factores de protección contra el abuso de drogas. Lo anterior fue una de las expresiones vertidas en la mesa “Prevención de adicciones en educación media superior”, donde expertos nacionales y extranjeros se dieron cita para compartir, durante el Congreso Mundial de Adicciones, sus experiencias e ideas sobre el tema.
A esta mesa asistieron el doctor Mario Miguel Carrillo Huerta, secretario de Educación del Gobierno de la Ciudad de México, quien fue expositor de la ponencia “Factores que determinan el consumo de drogas entre los jóvenes de la Ciudad de México”; asimismo, el doctor José Armando Salazar Ascencio, de la Universidad de la Frontera en Chile, con “La educación formal y sus desafíos en materia de prevención de drogodependencias”; Katri Tala encargada de Programa de la Organización de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC), con “Prevención de adicciones en escuela media superior”; licenciado Ángel Camacho Prudente, director técnico de la Dirección General de Educación Tecnológica Industrial (DGETI), “Acciones concretas en la prevención de las adicciones”.
De igual forma, participaron la doctora Lilia Bertha Alfaro Martínez, coordinadora del Proyecto de la Escuela Nacional Preparatoria (ENP) de la Universidad Nacional Autónoma de México, con el tema “Habilidades para la vida y la prevención de adicciones en adolescentes”; en representación del doctor Arturo Zárate Loyola, de la Universidad Autónoma de San Luis Potosí, acudió el doctor Sergio Galán, profesor e investigador de la Facultad de Psicología de esta universidad, quien presentó, “Factores de angustia de padres con hijos en el nivel superior”, y el maestro Francisco Javier García Espinosa, de la Universidad Autónoma de San Luís Potosí, “Evaluación a padres de familia de alumnos de nuevo ingreso a la universidad en el consumo de drogas”. La coordinación de la mesa fue dirigida por el maestro Wilfrido Perea Curiel, director general del Colegio Nacional de Educación Profesional Técnica (Conalep).
El inicio de esta serie de ponencias correspondió al doctor Carrillo Huerta, quien sobre su tema destacó que, de acuerdo con una estudio realizado a estudiantes de nivel medio superior de la Ciudad de México, el mayor nivel de ingreso económico está asociado con mayores niveles de consumo y adicción; además
expuso que las personas separadas y divorciadas tienen mucho más posibilidad de consumir drogas que las que están casadas, y en el caso de las personas solteras, esto sucede sólo con el alcohol. Planteó que en las variables de edad se ha encontrado que no existen diferencias significativas en el consumo de drogas entre la población adolescentes con respecto a los adultos. También señaló que las personas con nivel de secundaria consumen más alcohol que las que no cuentan con ninguna educación; también revela que las probabilidades de que mujeres fumen cigarros es menor en 21% que los hombres. Referente al ingreso económico, en los tres casos: drogas, tabaco y alcohol, expresó que por cada mil pesos de aumento en el ingreso de los individuos, la probabilidad de consumir droga crece entre 0.1 y 0.3%.
El secretario de Educación también indicó que en cuanto a la edad sólo se encontró que en el caso del alcohol aumenta el consumo al principio, llega a su máximo a cierta edad y a partir de esa edad empieza a disminuir. Mencionó que en Estados Unidos los solteros encuestados tienen 3.2% mayor posibilidad de consumir alcohol que los casados; mientras que en los separados y divorciados este problema es mayor en 10.1%. Igualmente comentó que al hacer la descripción de las características se pudo observar que el consumo y la adicción han aumentado en niños y jóvenes, alcanzando niveles que resultan preocupantes y representan un serio reto para las agendas de políticas públicas de la ciudad. Los datos que se presentaron, dijo, permiten ver que la cantidad y variedad de drogas que consumen los estudiantes de secundaria y bachillerato va en constante aumento. Por ello, enfatizó, es importante que se tomen en cuenta los resultados para diseñar algún tipo de política que permita atacar a tiempo los problemas que se pueden derivar después.
En su ponencia el doctor Salazar Ascencio subrayó que hay dos grandes lineamientos al momento de hablar de prevención primaria. Por un lado hay un fuerte énfasis de movimientos orientados a la comprensión y conocimiento de factores de riesgo, y por otro se deben adoptar y desarrollar iniciativas para una formación integral. En este contexto, reconoció, sería interesante señalar que los programas de prevención primaria tienen tres grandes categorías: unos que se agrupan a nivel universal, orientado a todo público para informar y sensibilizar en el consumo; otros donde hay una prevención primaria selectiva con grupos de riesgo estadístico, y por último un programa de prevención primaria específica, donde existen grupos de riesgo a definir. La tendencia de la investigación y la literatura en general, señaló, están orientando el camino a prevención primaria específica.
El especialista chileno abundó que desde el punto del vista del currículum formal se tienen tres grandes elementos: por un lado los contenidos mínimos obligatorios, es decir, lo que el alumno debe aprender en cada disciplina escolar, así como los objetivos fundamentales que son los mapas de progreso que el alumno debe adquirir desde el primer año de preparatoria hasta el último de secundaria, y los objetivos fundamentales transversales que es donde ha llegado el espacio reservado de la prevención en drogodependencias. En la escuela, refirió, se
encuentran los cuatro actores: estudiantes, profesores, familia y comunidad. La familia en especial, añadió, desempeña un rol importante en el éxito escolar del estudiante, y más aún en la ayuda que la escuela puede brindar dentro del proceso de socialización. Resaltó que no se puede hacer prevención en la escuela sino se hace un diagnóstico de los sujetos que vamos a someter a prevención.
Por su parte Katri Tala refirió
...