Principios de relaciones internacionales

Principios de Relaciones Internacionales

Igualdad Soberana de todos los Estados

Este principio es quizá el más importante en lo que refiere a materia de Derecho Internacional, siendo considerada como norma fundamental del mismo.  Para poder percibir la profundidad de tal principio, es importante hacer memoria de que como este se manifestó en el aspecto normativo, como doctrinal de la sociedad internacional (Christian Tomuschat, 2001).

Existe un amplio convenio en el sistema de derecho internacional en relación a que los fundamentos igualdad soberana nacieron de la organización de estatutos sobre las relaciones entre estados que se crearon a través de los acuerdos que dieron lugar a la Paz Westfalia de 1648, no obstante cierta soberanía  de carácter religioso de principados como reinos se reconoció a través de tratados anteriores, tras darse por terminada la Guerra de los Treinta Años lo que genera que se suspendan las relaciones internacionales de carácter religioso, y secular que durante mucho tiempo el papado, como el emperador tuvo a su disposición (Morgenthau, 1948) que dieron lugar a la igualdad soberana que se convirtió a partir dicho período en una invención legal constitutiva del sistema jurídico producto del mismo tratado de Westfalia conformado por estados, un sistema en que era pertinente regular las relaciones internacionales entre los estados que no lograba reconocer poderes superiores que pudiesen determinar sus obligaciones basadas en su propio consentimiento, conformadas en gran medida de nociones y elementos de igualdad.

Como lo establece la carta de las Naciones Unidas en el párrafo primero de su segundo artículo que « la Organización está basada en el principio de igualdad soberana de todos sus miembros» (Bleckmann & Fassbender, 2002).  Dicho principio es recalcado en la Declaración relacionada a principios de Derecho Internacional referentes a las relaciones de amistad y a la cooperación entre los Estados de conformidad con la Carta de las Naciones Unidas,( RESOLUCIÓN 2625 (XXV) de la Asamblea General de Naciones Unidas, de 24 de octubre de 1970) tras establecer que «todos los estados gozan de igualdad soberana», delimita que los estados poseen iguales derechos e iguales obligaciones y que de igual manera forman parte de la comunidad internacional, a pesar de las diferencias de orden económico, social, político o de cualquier otro tipo.  Tal principio define de forma ilustrativa el concepto de lo que es la igualdad soberana, como de los elementos que la conforman, entre los que están: 1) Los Estados son iguales jurídicamente, 2) cada estado goza de los derechos inherentes a la plena soberanía, 3) cada estado tiene el deber de respetar la personalidad de los demás Estados, 4) la integridad territorial y la independencia política de cada estado son inviables, 5) cada estado tiene derecho a elegir y llevar adelante libremente su sistema político, económico, social y cultural, y 6) cada estado tiene el deber de cumplir plenamente y de buena fe sus obligaciones internacionales Fez y de vivir en paz con los demás Estados.

Estos elementos relacionados igualdad soberana superan la idea de lo que la igualdad de los estados, en la busqueda de mantener su soberanía tanto interna y externa, como su independencia.  Ciertos elementos son los que logran definir un principio en una perspectiva amplia, aunque limitado únicamente en el cumplimiento de los aspectos relativos al derecho internacional, enfatizando tal limitante que reside en el fundamento del imperio del derecho en la sociedad internacional.  Es importante resaltar que los estados son reconocidos como iguales y soberanos, pero no están por encima del derecho internacional

Prohibicion del uso de la fuerza

En lo referente a la prohibición del uso de la fuerza,  durante siglos el Derecho Internacional permitió el uso de la guerra como medio para la resolucion de conflictos entre Estados.  Durante el transcurso del siglo XX se apreció cambios en las relaciones internacionales tales como la Conferencia de Paz de La Haya de 1907, con relacion a prohibir el uso de la fuerza para el saldo de deudas contractuales.

Con la creación de la ONU tras la Segunda Guerra Mundial, cuya Carta establece de forma general, en su segundo artículo, el principio de prohibición del uso de la fuerza el cual dice: “Los Miembros de la Organización, en sus relaciones internacionales, se abstendrán de recurrir a la amenaza o al uso de la fuerza contra la integridad territorial o la independencia política de cualquier Estado, o en cualquier otra forma incompatible con los Propósitos de las Naciones Unidas”. Dicho principio se enmarca en dicho artículo 2 en conjunto con otros dos de estrecha relación: uno de ellos el principio del arreglo pacífico de controversias y el principio de seguridad colectiva. Actualmente la norma que prohíbe la amenaza o el uso de la fuerza es parte de un principio de Derecho Internacional consuetudinario, donde, su importancia hace considerar una norma imperativa de Derecho Internacional general

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