Proceso De Atencion De Enfermeria

El proceso de atención de enfermería a través de los años ha requerido de innumerables estudios científicos para poder lograr que este proceso sea verídico. Debido a que la obtención de datos es lo que nos fundamenta toda la atención que nosotros como profesionales de enfermería brindaremos, debemos ser concisos en las preguntas que realizamos y hacer que nuestro paciente nos entienda, mejor dicho utilizar un dialecto en el que nuestro paciente se sienta cómodo y sobre todo seguro de responder con toda la sinceridad posible.

La valoración que nosotros realizamos, debe ser exacta, en donde identifiquemos a nuestro paciente como una persona única, y que los temas que sean cuestionados sean de nuestra incumbencia y que sobre todo nos llevan a algo, al bienestar del paciente.

Debemos tener siempre en cuenta que el paciente no solo es el, sino que también abarca a la familia, amigos y entorno en el que vive y se desenvuelve, y sobre todo comprender que influyen el uno con el otro. Por lo que nosotros, profesionales de enfermería requerimos de tener conocimientos de todas las disciplinas como se nos sea posible, saber de matemáticas, geografía, medicina, farmacología, leyes, psicología, arquitectura, criminología y sobre todo saber español, debido a que todos pensamos que lo sabemos pero en realidad nos podemos dar cuenta de que no, y esa deficiencia de conocimientos nos construye una barrera con el paciente que no debe de existir.

Existen diversos factores que influyen en la obtención de datos y que siempre se deben tener en cuenta como las necesidades físicas, mentales y emotivas, cultura, los sentidos y valorar como son que estos funcionan en el paciente, el pasado, las experiencias que nuestro paciente ha tenido, que es lo que le interesa, preocupa o motiva en la vida, el entorno en el que vive y las actitudes y reacciones hacia las demás personas.

Por lo que el PAE es un método sistemático que nos permite brindar cuidados que abarquen todo el ser de una persona, para que esto nos conduzca al bienestar del paciente y así sea más rápida la curación que tenga ya sea física o biológica, psicológicamente, y lograr que el entorno sea siempre favorecedor para el paciente y su familia. Siempre recordando que requerimos de confianza, empatía, afecto, autonomía y mutualidad hacia el paciente.

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