Reflexiones sobre ciudad y sus sinergias entre sostenibilidad, políticas y SmartCities

Reflexiones sobre ciudad y sus sinergias entre sostenibilidad, políticas y SmartCities

Autor:                 Julián Camilo Angel Morales

Programa:        Maestría en gestión de proyectos

Contenido

1-        Introducción        1

2-        Las posibles sinergias del sistema y su complejidad        2

3-        Conclusiones        3

4-        Bibliografía        4

1. Introducción

Inteligente o “Smart” es la etiqueta que ha logrado posicionarse como prefijo que dota de características de programación, procesamiento e interacción a dispositivos electrónicos como los televisores, teléfonos, relojes , entre otros y que hoy ha llegado por medio de alianzas privadas y públicas a permear el escenario de la ciudad agregándole a sus habitantes la categoría de “ciudadano inteligente”, sin embargo existen diferencias abismales entre los dispositivos electrónicos y las personas, en especial por la capacidad humana de comprender y en especial de elegir bajo razonamientos , por lo cual afirmaría que existe una dicotomía conceptual entre inteligencia humana  representada en las ciudades e inteligencia artificial que si no se separa a la hora de hablar de ciudades “inteligentes” se puede caer en el error de convertir en un sensor al ciudadano o convertir al sensor en ciudadano.

Conforme a esto vale la pena hacer la aclaración que de acuerdo con indagaciones de diversos autores “smartCity” no se constituye como un modelo urbano entendido como la estrategia de ocupación del suelo, sino como a un método de gestión urbana basado en indicadores que miden eficiencia y eficacia con respecto a los subsistemas que componen la ciudad. De otro lado los modelos de ciudad (lineal, fragmentada, eco ciudad, compacta, difusa, etc.) actuales son decisiones mancomunadas entre organismos internacionales, gobiernos nacionales, alcaldías locales, empresas y ciudadanos por apostar a un modelo de crecimiento que se acoja a indicadores pactados mediante acuerdos internacionales para garantizar la sostenibilidad de cara a los retos como el calentamiento global, la superpoblación, la huella de carbono.

Finalmente enmarcado dentro de la sostenibilidad, el Banco Interamericano de Desarrollo por medio de la iniciativa ciudades emergentes sostenibles ofrece asistencia técnica para las ciudades intermedias  con una población entre 100.000 y 2’000.000 de habitantes a partir de 3 pilares o ejes:  sostenibilidad ambiental y cambio climático , sostenibilidad urbana, sostenibilidad fiscal y gobernabilidad y dentro del pilar de infraestructura ofrece estudios adicionales con respecto a las TIC enfocado a cobertura de banda ancha.  

Con este panorama, el objeto del presente ensayo es reflexionar sobre el concepto de ciudad y sus sinergias con la sostenibilidad, las políticas y el método de la Smart City como base para el desarrollo de capital humano.

1. Las posibles sinergias del sistema y su complejidad

El concepto de ciudad ha sufrido varias trasformaciones representativas desde el origen de las primeras civilizaciones hasta el contexto contemporáneo de la ciudad fragmentada y dispersa latinoamericana para ser redefinida como un organismo vivo en permanente proceso de construcción, que refleja una sociedad inacabada y en constante transformación, la cual requiere de la activa participación de los diferentes actores sociales que en ella interactúan para su adecuado desarrollo y consolidación (Tovar, 2002) y constituye la memoria colectiva de los pueblos (Rossi, 1982) , por lo cual desde su morfología podemos realizar diferentes lecturas de los tiempos que han pasado por dicho organismo. Desde esta perspectiva, la inteligencia es una capacidad biológica inherente de la ciudad y sus componentes ( hechos urbanos: Personas, encuentros, viviendas, calles, etc.) de adaptarse y ser resiliente a través de la memoria de lo individual y lo colectivo , así que desde esta primera aproximación tenemos la tipología, la memoria, nuestra historia, nuestras dinámicas y lo propio de nuestro folklore como activos intangibles para reinventar, crear y adaptar a los nuevos retos que nos enfrenta el ambiente, en este sentido la tecnología siempre será variable, finita , a pesar de que genere cambios revolucionarios y de mayor impacto sobre el ambiente. (la máquina de vapor, el transistor, entre otros.)

Es de esta forma que hablamos de los modelos urbanos como decisiones en respuesta a problemáticas temporales que enfrentamos desde lo individual y lo colectivo. En el caso de Colombia, me parece interesante plantear la complementariedad entre el modelo de super Manzana de Idelfonso Cerdá, la Eco ciudad, los conceptos de salvador rueda sobre energía en la urbanización y el concepto de Smart City como la gran base de datos para gestión de estos modelos.

La Super Manzana de Cerdá se convirtió en la célula de la ciudad de Barcelona y represento un modelo de ampliación donde la prioridad era el habitante, recuperando  el interior de las manzanas como espacio integrado a la red verde de la ciudad ; La Ecocity es una ciudad sostenible totalmente orientada a reducir al mínimo sus consumos (energía, agua alimentos) y sus residuos (el calor, la contaminación de aire y agua) , provocando la menor huella ecológica en su entorno,  además utiliza fuentes de energía renovables, edificios y electrodomésticos diseñados ecológicamente, ventilación natural y transporte público, en un entorno adecuado para ir en bicicleta y caminar (Gobierno de Navarra, 2009), sin embargo el mayor problema de este modelo de ciudad es la teoría de decrecimiento que plantea con respecto al modelo capitalista de explotación de los recursos naturales, sin embargo es un modelo de ciudad compacto basado en la integración de sistemas de transportes públicos; Salvador rueda  quien de la mano de la eco-ciudad propone el urbanismo en tres niveles para buscar nuevas formas de aprovechamiento para la superficie, las terrazas y los subsuelos: el desarrollo de los mismos proporcionará, como lo hizo el urbanismo ortodoxo, un conjunto de instrumentos de carácter legal y económico, acomodados a un nuevo statu quo y a la resolución de los nuevos retos y a su vez  expresa la sostenibilidad como el cociente E/H donde E seria la energía (como expresión del consumo de recursos) que necesita el sistema para mantener la complejidad urbana H. (Rueda, 2005)

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