Relaciones Por Internet

Mi versión de una relación por internet

¿Qué es una relación de pareja? “La definición de una relación de pareja está marcada esencialmente por la inversión que ambos miembros hacen en un vínculo amoroso compartido, con el reconocimiento personal y social de que esas dos personas desean desarrollar un proyecto de forma conjunta.” Tomando la opinión de una página web o para un entendimiento mejor habrá que definir las palabras por separado en un contexto humano el diccionario de la Real Academia Española define la palabra RELACION como “Conexión, correspondencia, trato, comunicación de alguien con otra persona.” Y la palabra PAREJA se define como “Conjunto de dos personas, animales o cosas que tienen entre sí alguna correlación o semejanza, y especialmente el formado por hombre y mujer.” Tomando en cuenta ambos significados llega la duda del por qué muchas personas establecen que el intentar formar una relación de pareja por internet es absurda y por tanto ni se considera una relación cuando las palabras establecen que la conexión se va a las ideas o a los sentimientos mas no al medio por el cual se llevan a cabo.

Un estudio realizado en la universidad de chicago revelo que 1 de cada 3 norteamericanos que consumieron su matrimonio entre 2005 y 2012 fue por haberse conocido en internet, dando asi una perspectiva de que dichas relaciones se pueden hacer más frecuentes en los años próximos e incluso se consideran que estos matrimonios funciona mejor a comparación de los matrimonios en los cuales las parejas se conocieron en una discoteca o bar El profesor de psicología social en la Universidad de Chicago, John Cacioppo señalo lo siguiente “Es más cómodo y permite que la gente se abra más”

Pero así como muchos datos revelan lo positivo de las relaciones de parejas por internet también hay muchos aspectos en contra que se tienen que tomar en cuenta pues en la internet se pueden encontrar grandes peligros, desde mentiras hasta la posibilidad de ser víctima de una estafa o un crimen violento ya sea en el aspecto emocional o en el físico cualquiera corre peligro de ser herido y todo tiene una manera y modo de hacerse siempre y cuando se sea precavido.

Mucho se ha dicho acerca del tema en sí y sería muy sencillo ofrecer datos y estudios que aprueban o rechazan esta manera de relacionarse e incluso formar una pareja, pero más allá de dar información sobre el tema, daré una perspectiva propia, mi manera de ver las cosas, pues yo he vivido esta situación y a eso se debe que elegí este tema, quizás haya muchos que relaten su propia historia pero como todo pensamiento humano la única es única e irrepetible y ofrecerá un punto de vista distinto.

A la edad 17 años yo me encontraba sin escuela y a la espera de los resultados del examen de admisión, ya que estaba recursando por problemas personales, a pesar de que se avecinaba un nuevo comienzo, una nueva oportunidad, mi ánimo parecía el mismo y más aún al saber que mi promedio no daba más para ingresar a un colegio de Bachilleres y fue en ese tiempo cuando la conocí… Kiara Cárdenas una chica de apenas 17 años cumplidos, yo ya había decidido mantener fuera la idea de tener una relación y no la vi más que como una amiga, pero su manera de ser y de expresarse me intrigó, tenía una manera de escribir poesía e historias como una autora profesional; claro, al menos esa sensación me causaban sus palabras y entre bromas juegos y contando nuestras respectivas historias comenzaba a sentir algo por aquella chica que no había visto, poco tardó para decirme que vivía lejos, en Tapachula Chiapas, por un momento me desanimé, pero seguí con la idea de conocerla, que pudiera entenderme y yo a ella, no duro mucho la amistad pues no tarde en sentir un sentimiento más fuerte por ella y tal sentimiento fue creciendo después del primer poema de muchos que escribí para y con ella, aun retumba en mi cabeza un fragmento de él…

“Asumo la tarea que he de cumplir

haré de tus lagrimas mi sangre

de tu dolor mi fuerza

de tu nombre mi estandarte

he de seguirte a donde quiera que vayas

donde quiera que estés”

mi corazón no tiene miedo a perecer.

El saber que ella sentía los mismo y sin palabras, solo haciéndole sentir al otro cariño fue como una relación, una bonita relación que empezó.

Para muchos le habrá parecido muy repentino algo así pues cuando la conocí a cuando decidimos tener una relación sabiendo que vivíamos en lugares muy distintos, ella en Chiapas y yo en la Ciudad de México solo pasado mes y medio , si no es que un poco menos, pero haciendo lo correcto y que a través de fotos y platicas continuas le diéramos al otro una idea de quiénes éramos, fue sencillo de hacer, pues si ambos no hubiéramos puesto de nuestra parte, la confianza se hubiera degradado y todo se basaría en una mentira, como en muchas otras relaciones por internet que han fracasado.

A partir de ese momento en que decidimos tener una relación , optamos por conocernos el uno al otro lo más que pudiéramos, cosa que mucha gente incluso después de años de casados no lo logra por una u otra razón, mas allá de gustos musicales, aficiones y nuestros respectivos pasados, tratábamos de entender al otro, queríamos saber quién era esa persona detrás de la pantalla, saber sus metas, sus aspiraciones y la perspectiva de la vida que tenía.

Justo después yo entre al colegio de bachilleres plantel Aeropuerto, pero mi perspectiva de las cosas, mi ánimo, parecía haber cambiado, como si algo en mi vida me motivara más de lo que lo había hecho, era ella, ella me había dado el entusiasmo para que sin importar dónde o como, yo siguiera con mi vida y así lo hice mientras más hablaba con ella y sabía que tenía alguien que me apoyaba no por darle algo a cambio sino porque creía en mí, mi vida se tornaba mucho más feliz y eso lo reflejaba en mis estudios.

Mis calificaciones mejoraban y mi relación con Kiara se hacía más cercana a pesar de la distancia, sentía una gran fascinación por sus ideas y su manera de ver al mundo, siempre parecía idear algo para salvar al mundo o al menos para hacerlo mejor, no para todos sino para quienes no pueden defenderse, fue su bondad lo que me hizo sentirme más y más, por decirlo así, enamorado; no todo era felicidad claro está, como cualquier otra relación teníamos problemas y la distancia causaba la mayoría, por momentos las inseguridades de lo que pasaba con el otro sobre con quién convivía nos hacía dudar a veces pero cada duda se desvanecía cuando las hablábamos y no nos dejábamos llevar por ellas; también nos carcomía la idea de no poder estar juntos de ni siquiera poder tomar la mano del otro y aunque quizás

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