Resumen Como Enfrentar Las Conductas Individales De Riesgo Para La Salud De Chile

“¿Cómo enfrentar el aumento de conductas individuales de riesgo para la salud en Chile?”

Luego de que se analizaran los resultados de la última encuesta nacional de salud se determinó la existencia de una alta prevalencia de conductas individuales de riesgo para la salud (tabaco, alcohol, dieta inadecuada y sedentarismo), conductas conocidas por ser factores de riesgo para enfermedades crónicas no transmisibles (obesidad, hipercolesterolemia, hipertensión arterial, etc).

El texto propone una visión amplia del porque se generan estas conductas de riesgo, tomando en cuenta dos elementos centrales: Primero, la centralidad de la posición social (PS) y segundo, la importancia del curso de vida. Respecto a la PS es importante destacar que es inversamente proporcional a la presencia de obesidad, sedentarismo y dieta inadecuada, no así con el tabaco, más prevalente en grupos sociales de mayor PS, por lo que podemos determinar que existe una estrecha relación entre PS y los factores de riesgo individuales. Posibles mecanismos explicativos de esto, han sido representados de manera clara a través del modelo de Determinantes sociales de la salud y son: El efecto de la pobreza material absoluta, el efecto de conductas de vida familiar y cultura local y el efecto del estrés producido por auto- percepción de inferioridad social. Todos estos modelos explican cómo la PS es un elemento central en la relación entre conductas de riesgo y salud. Por otra parte es importante vincular esta relación con la perspectiva del ciclo vital, podemos mencionar que la probabilidad de enfermar en la adultez esta predeterminada por la PS de su familia de origen, por lo que la prevención de los factores de riesgo en los adultos exige modificar sus desencadenantes desde la vida temprana. Existen evidencias importantes que determinan el peso de la PS sobre la salud de la población en el curso de la vida, demostrando que las diferencias en el estado de salud de una población es mejor explicada por la PS que por las conductas individuales de riesgo, ambas asociándose de manera independiente pero siendo la PS la que más modifica la magnitud de la conducta.

Esta visión más amplia nos permite la posibilidad de promover el desarrollo de estrategias de salud pública que complementen las intervenciones de foco individual para la protección de la salud, tomando en cuenta que la implementación de intervenciones basadas solo en el cambio de estilos de vida individuales no responde de manera total al problemas se hace necesario crear una política que posicione y priorice la reducción de desigualdades en la PS (reducción de las diferencias de años de educación e ingreso económico) es esencial para modificar la conducta de salud las conductas individuales a largo plazo.

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