Seguridad Agroindustrial

Seguridad Agroindustrial

Con la finalidad de evitar riesgos laborales, que pongan en peligro la vida de los trabajadores, así como de las propias instalaciones de las compañías, empresas del ramo agroindustrial y congeladoras de la región, han establecido estrictos programas de seguridad.

Desde hace varios años, en particular en la última década, empresas del ramo han fortalecido y profesionalizado sus programas de seguridad industrial, a partir de la obligatoriedad en la aplicación de normas nacionales e internacionales de seguridad.

A lo anterior se suma el estricto cumplimiento de las normas de las denominadas Buenas Prácticas Agrícolas (GAP's-Good Agricultura Practice-) y del Análisis y Control Crítico de Puntos de Riesgo (HACCP-Hazard Analysis & Critical Control Points-)

Las agroindustrias en México y el mundo deben cumplir con una misión muy especial atender las necesidades alimentarias de la humanidad que exigen seguridad, calidad, productividad uso sustentable de los recursos naturales y protección ambiental.

Estas empresas ocupan un lugar dentro del sistema de cadenas de valor, al depender de las materias primas de los productores y proporcionar productos a los canales de distribución.

La actividad agroindustrial inicia con los productos del sector agrícola, que después de ser cosechados requieren servicios de transporte, almacenaje, logística, servicios industriales/comerciales de mercadeo y el proceso de transformación, sea para su uso en otras áreas o facetas industriales y de procesamiento o para la preparación de alimentos y su consumo.

Los productos agrícolas son afectados por la calidad de materiales como selección de semillas, aplicación de fertilizantes, control de plantas al competir por espacios, plagas y control de enfermedades, limpieza y selección Situación similar se vive con los productos de origen animal.

Aunque los HACCP tienen una utilidad limitada en la producción de frutas y hortalizas frescas, constituyen un proceso útil para reducir los riesgos cuando se procesan los productos.

Si las frutas y hortalizas están destinadas a ser consumidas frescas, no existen medidas que puedan eliminar o reducir los riesgos biológicos a niveles aceptables después de la contaminación. La contaminación se puede controlar a través de las Buenas Prácticas Agrícolas (GAP's) y las Buenas Prácticas de Fabricación (GMP's-Good Manufacture Practice-).

Los programas como las GAP's, GMP's y HACCP proporcionan las condiciones operativas y ambientales básicas necesarias para la producción de frutas y hortalizas seguras y saludables.

Algunos aspectos del área de seguridad en las agroindustrias involucran garantizar un entorno laboral limpio y seguro para todos los empleados, así como eliminar

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