Selección De Contenidos Lengua 2do ESO

Actividades de recuperación de contenidos diciembre 2014

1. ¿Qué es un mito? ¿Cuáles son sus características principales?

2. ¿Qué es un cuento?. ¿Cuáles son las características del cuento realista?

3. Leé el siguiente texto y respondé:

Eco y Narciso

Eco era una joven ninfa de los bosques, parlanchina y alegre. Con su charla incesante solía entretener a Hera, esposa de Zeus, mientras éste la engañaba. Finalmente, Hera terminó enterándose del papel que jugaba Eco en los engaños de su marido y decidió castigarla impidiendo que volviera a hablar espontáneamente: solamente podría repetir el final de las frases que escuchara. Eco, avergonzada, se recluyó en una cueva en lo más profundo del bosque.

El segundo protagonista de esta historia es Narciso, un muchacho encantador, hijo de la ninfa Liríope. Cuando Narciso nació, el adivino Tiresias predijo que el niño sería feliz si no llegaba a ser consciente de su belleza. Por esta razón, su madre retiró de su casa espejos y demás objetos en los que pudiera verse reflejado.

Narciso siempre parecía estar ensimismado en sus propios pensamientos. Daba largos paseos sumido en sus cavilaciones, y uno de esos paseos lo llevó cerca de la cueva donde Eco moraba. La ninfa lo miró embelesada y quedó prendada de él.

Narciso encontró agradable la ruta que había seguido ese día y la repitió en varias ocasiones. Eco lo esperaba y lo seguía en su paseo, siempre a distancia, temerosa de ser vista, hasta que un día, un ruido que hizo al pisar una ramita puso a Narciso sobre aviso de su presencia, descubriéndola tras doblar un recodo en el camino. Eco palideció y enrojeció cuando Narciso se dirigió a ella.

- ¿Qué haces aquí? ¿Por qué me sigues?

- Aquí... me sigues... -fue lo único que Eco pudo decir, maldita como estaba, habiendo perdido su voz.

Narciso siguió hablando y Eco nunca podía decir lo que deseaba. Finalmente, los animales de alguna manera le hicieron entender a Narciso el amor que Eco le profesaba. Ella le miró expectante, ansiosa... pero su risa helada la desgarró. Y así, mientras Narciso se reía de ella, de sus pretensiones, del amor que albergaba en su interior. Eco se retiró a su cueva, donde permaneció quieta, sin moverse, allí se consumió de pena, tan quieta que llegó a convertirse en parte de la propia piedra de la cueva... De ella sólo quedó la voz.

Némesis, diosa griega que había presenciado la desesperación de Eco, entró en la vida de Narciso otro día que había vuelto a salir a pasear e hizo que sintiera una sed abrasadora. Narciso recordó entonces el riachuelo donde una vez había encontrado a Eco, y sediento se encaminó hacia él. Allí, cuando estaba a punto de beber, vio su imagen reflejada en el río. Y como había predicho Tiresias, esta imagen le perturbó enormemente. Quedó absolutamente cegado por su propia belleza, en el reflejo. Hay quien cuenta que allí mismo murió de inanición, ocupado eternamente en su contemplación. Otros dicen que enamorado como quedó de su imagen, quiso reunirse con ella y murió ahogado tras lanzarse a las aguas. En cualquier caso, en el lugar de su muerte surgió una nueva flor al que se le dio su nombre: el narciso, flor que crece sobre las aguas de los ríos, reflejándose siempre

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