TEMA: DELINCUENTE, FACTORES QUE INFLUYEN EN EL DESARROLLO DE UNA MENTE CRIMINAL

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METODOLOGIA DE LA INVESTIGACION

DOCENTE: JUAN JOSÉ MENDEZ MENDOZA

TEMA: DELINCUENTE, FACTORES QUE INFLUYEN EN EL DESARROLLO DE UNA MENTE CRIMINAL

ALUMNO: ALEXIS GARCIA GONZALEZ

INGENIERIA INDUSTRIAL 4° CUATRIMESTRE

INDICE

01. INDICE        2

02. ANTECEDENTES        3

03. PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA        4

04. JUSTIFICACION        5

05. OBJETIVOS        6

06. HIPOTESIS        7

07. VARIABLES        8

08. PREGUNTAS DE INVESTIGACION        9

09. MARCO CONCEPTAL        10

10. MARCO LEGAL        14

11. MARCO TEORICO        15

12. METODOLOGIA DE LA INVESTIGACION        16

13. TIPO DE INVESTIGACION        17

14. RECOLECCION Y ANALISIS DE DATOS, TECNICAS UTILIZADAS, FUENTES DEINFORMACION, INSTRUMENTOS.        18

15. RESULTADOS DE LA INVESTIGACION        19

16. CONCLUCION        20

17. REFERENCIAS BIBLIOGRAFICAS        21

ANTECEDENTES

La intensa preocupación que la sociedad actual tiene por la conducta antisocial infantil y juvenil, más conocida como delincuencia juvenil, es un fenómeno propio del siglo XX, ya que ha sido durante éste siglo cuando los niños y los adolescentes han entrado a formar parte, plenamente de la estructura social. El progresivo reconocimiento de los deberes y derechos de los niños ha condicionado los cambios socio-jurídicos y normativos que tenían como objetivo valorar la conducta antisocial de los menores, término genérico y propio del ámbito jurídico que agrupa a niños, adolescentes y jóvenes menores de 18 años. La incorporación completa de estos nuevos sujetos a la sociedad ha sido, como muchos otros importantes cambios sociales, motivo de nuevas regulaciones para atender a sus necesidades y sus peculiaridades entre las que destacan todo lo referente a la conducta antisocial y/o delictiva por ellos protagonizada. Uno de los cambios más relevantes, con el paso de los años, ha sido la desaparición de la denominación de «niño delincuente» que ha sido sustituido por la denominación genérica de «niños con conductas antisociales» (Rutter et al, 2000).

A partir de la mitad del siglo XIX y especialmente a principios del siglo XX, los Estados empezaron a ocuparse de la delincuencia infantil y juvenil. Desde entonces hasta hoy se han sucedido cambios en las normas, leyes y otras actuaciones para eliminar estas conductas que, por lo general, despiertan una gran inquietud colectiva. Junto con las intervenciones sociales, jurídicas y asistenciales que pretendían reducir la conducta delictiva de los jóvenes, surgieron muchas preguntas acerca de los porqués de estas conductas y, sobre todo en el caso de la delincuencia infantil, acerca de la continuidad de las mismas en el futuro adulto de aquellos desdichados y precoces infractores. Para encontrar respuestas a estas preguntas se han ofrecido muchas reflexiones profesionales desde distintas disciplinas entre las que destaca la Psicología.

El aspecto relativo a si ciertas características biológicas, cromosómicas o neurofisiológicas, que incrementan o predisponen a la delincuencia se transmiten genéticamente y, por ello se heredan, —el delincuente nace o se hace—, ha sido objeto de numerosas y encendidas polémicas, continuando así las discusiones que en la Criminología han aportado los enfoques biologicistas, desde que LOMBROSO publicara en 1876, su obra L’Uomo delinquente, donde desarrolló su teoría del delincuente nato.

PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA

Hay individuos que se adaptan fácilmente a los diferentes modelos de comportamiento social actuales, por el contrario existen otros que empiezan a adoptar comportamientos en los que se rebelan a estos estándares o lo que comúnmente llamamos normal, comienzan a ser personas autodestructivas.

Los delincuentes ¿Nacen o se hacen?

Los niños son nuestro futuro y saber si ese infante será un futuro criminal muchas veces puede ser complicado y aun después de identificarlo el evitar el desarrollo de ese comportamiento es aún más difícil muchas veces.

JUSTIFICACION

En la actualidad los periódicos y noticieros se encuentran llenos de noticias sobre robos, secuestros y asesinatos cuyo número y frecuencia es cada vez mayor. Algunas personas se encuentran alarmadas, otras ya no se sorprenden, pero lo que realmente debería preocuparles es buscar una solución.

Si bien el gobierno interviene de alguna manera cada quien puede contribuir al educar adecuadamente a sus hijos.

Muchos se preguntaran: ¿Qué daño puede hacer un niño malcriado? Y tacharan esta información como innecesaria o inútil, pero la realidad es que los niños de ahora son el futuro de mañana.

Una persona (hombre o mujer) que haya tenido traumas en su niñez, haya sido maltratado, erróneamente encaminado o algún otro factor que haya influido profundamente en su conducta, tendrá más probabilidades de desarrollar una personalidad de delincuente que otras. Sin mencionar la importancia del factor genético.

Los padres con conocimiento de una conducta normal en la niñez, vislumbraran con más facilidad las conductas inadecuadas por lo que podrán ayudar a su niño a través de acciones dentro del hogar como poner reglas y límites, asegurarse de cumplirlas, establecer una muy buena comunicación, etc.

OBJETIVOS

OBJETIVOS GENERALES

Conocer como inicia la personalidad de un delincuente partiendo desde la infancia, basándose en pruebas psicológicas en niños de nivel preescolar y en diversas investigaciones anteriores a esta.

OBJETIVOS ESPECIFICOS

• Identificar las características de un posible delincuente a futuro según la observación de su conducta.
• Indagar las causas probables que encaminan al niño a tener dichas características tales como su entorno familiar y cultural así como su disposición genética.
• Saber cómo evitar que la personalidad del niño evolucione para mal poniendo límites, reglas, platicando abiertamente y, de ser necesario, buscar ayuda de un profesional.

HIPOTESIS

• Los infantes del Jardín de Niños Agustín Yáñez, Cuichapa, Mol. Con rasgos criminales presentan características distintivas como aislamiento, irritabilidad y timidez
• Las principales causas de que un niño presente las características de un delincuente en potencia son padres extremadamente estrictos, ambiente familiar o social de violencia y, en algunos casos, abuso sexual.
• Para evitar que un niño posea características distintivas de un posible delincuente es necesario establecer pláticas abiertas, un ambiente seguro y feliz, imponer reglas y límites, y si el caso es avanzado, consultar a un especialista.

VARIABLES

• El ambiente en que se desarrolle el niño.
• Factores genéticos, por ejemplo neurológicos, como deficiencias mentales heredadas entre otros.
• Traumas infantiles causados por episodios dolorosos que hayan sufrido, como desastres naturales, accidentes, abuso verbal, físico o sexual, guerra, etc.
• Accesibilidad de los padres ante la posibilidad de intervenir en el desarrollo del niño y su recuperación.
• Recursos suficientes de los padres para invertir en posibles terapias.

PREGUNTAS DE INVESTIGACION

Principalmente se entrevistará a profesionales que tengan conocimientos sobre el tema en base a cómo identificar si las características de un niño aislado y retraído, o agresivo e irritable puede ser un factor de desarrollo de una potencial mente criminal.

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