Temor
Lo único que mi cuerpo siente es temor. Mis pies arden de tanto correr, algo me persigue no se puede definir como humano es una masa incorpórea, un ser de gran estatura que cada vez que volteo a verlo crece aun mas, no tiene rostro pero si un gran agujero donde debían estar sus ojos, no posee extremidades es mas parece que levita. Mis pies ya no dan más, mis respiración es cada vez más acelerada <<por favor pies no se rindan, no paren siguán corriendo, por favor>> trato de controlar mi cuerpo pero es inútil, caigo de rodillas completamente exhausta. Un hielo corre por mi espalda,<<no es momento de descansar, espera cuando estemos a salvo, lejos de todo peligro>> hago un gran esfuerzo y logro volver a estar de pie, siento una punzada en las piernas pero no dudo en continuar corriendo dejando una estela de sangre en el pavimento.<>.No tengo la cuenta exacta de tiempo que llevo escapando pero no pongo en duda de que es muchísimo, volteo aterrada esperando encontrar a el ser de horrible aspecto pero no hay nada, es sólo carretera lo que se encuentra detrás de mí, ralentizando el paso observo con mayor atención el lugar, no hay nada más que una carretera y arboles <> ayuda , necesito pedir ayuda , un pequeño sentimiento de esperanza surgió. Corro desesperadamente hacia el lugar, mientras me voy acercando crece mi esperanza pero cae en picada al encontrarme frente al lugar. Era una gran casa de estilo victoriano pero completamente en ruinas, moho crecía en las esquinas, las ventas se encontraban tapadas con diario, la escalera que debía contar con 4 escalones solo tiene 2 en “buen estado”, algunas paredes se encontraban en el suelo con cenizas como si un incendio las hubiera derribado pero lo que llamo mi atención fue el cartel, que colgaba de un solo extremo, sobre la puerta <<Orfanato Sweet dreams”. <<No hay nadie, estoy muerta>>, sin saber que hacer me siento en la escalera, un ruido a mis espaldas me sobresalta, el pánico se apodera de mi <<Es esa cosa otra vez>> volteo y encuentro a una anciana de aspecto dulce en la puerta del orfanato << cariño ¿Qué haces afuera? Pasa, los niños están durmiendo>> la anciana me dirige por un largo pasillo lleno de puertas hasta que se detiene frente a una, es una habitación normal, hay un camarote, un pequeño velador lleno de documentos y un armario antiguo.<<La comida esta por servirse, espero que te guste mi sopa>> la anciana sale de el lugar dejándome sola en la habitación <<estoy a salvo>> no paso mucho tiempo cuando escucho una campana <<es la comida>> recordando el camino voy hasta la cocina y con una sonrisa destapo la olla. Brazos, pies, piernas …¿una oreja?, mi estomago se revuelve y arcadas me hacen caer al suelo, ¿Qué es este lugar?, aun con el estomago revuelto busco la puerta pero esta no se encuentra por ningún lado, al final de un largo pasillo encuentro una extraña división en la pared <>, me asomo cuidadosamente con los nervios a flor de piel, era un calabozo lleno de jaulas donde habían desde bebes a pequeños de a lo menos 12 años, todos en pésimo estado, al medio del calabozo había una mesa llena de maquinas, herramienta y partes de cuerpos, << veo que encontraste mi cuarto de entrenamiento pequeña>> empiezo a sudar frio, la anciana se encuentra detrás de mí , con lo que parece una sierra en su mano derecha <<voy a morir, voy a morir>>, retrocedo hasta chocar con la mesa <<¡que divertido¡ estas tratando de escapar>> ,corro lo más rápido que puedo , corro porque mi vida depende de eso, en mi camino hacia la salida veo cuerpos de mujeres colgando del techo <sta mujer está loca>>, la salida se encuentra a dos pasos de mi, tan cerca, tomando la perilla de la puerta una felicidad me invade <> pero esa felicidad duro poco un dolor tan fuerte en mis pierna izquierda me hizo caer y golpear mi cabeza con el suelo, miro mi pierna, una flecha de punta oxidada la atravesó completamente <> siento la voz de la anciana en mi oído, de su espalda saca un gran cuchillo y la acerca a mi cara <>, volvemos al inicio , temor, lo único que siento es temor. Un grito desgarrador sale de mi garganta, siento las lagrimas en mis mejillas pero ya no estoy en esa casa, estoy en mi cama <>repitió internamente, tranquilizándome, <>.
