Valoración teórica-filosófica

Introducción

La educación es consustancial de la naturalidad de cada ser humano, conscientemente o inconscientemente aprendemos en la vida diaria. La escuela como institución siempre ha estado presente a lo largo de toda la historia humana. Pueblos y colonias se han encontrado en la necesidad de crear un sistema que ayude a promover el estatus social de cada comunidad o país al que se pertenece. A pesar de esto se encuentran constantes que incluso estas replican una a otra cuando nunca se presento una interacción histórica. A esto caben muchas preguntas, demasiadas. Sin embargo para efectos de este ensayo, solo nos preguntaremos: ¿Qué tan eficientes son los sistemas educativos? ¿Sirven? ¿Cumplen su propósito de creación?

Valoración teórica-filosófica

Responder lo anterior constaría de un estudio extenso y probablemente interminable, y puede prestarse mas a un debate. Por lo tanto la filosofía tratara de contestar.

Impresiona  observar el desarrollo de la educación en México con sus respectivos aciertos y fallas. Esto a pesar de que han existido grandes pensadores, intelectuales, y científicos mexicanos. Hoy continuamos con demasiados problemas de los que ya existían hace cientos de años. Han existido demasiados reformas, pero muchas han estado lejos de una real renovación en la educación para la mayoría de la población. La obligatoriedad puesta en la educación ha dado oportunidad que disminuya el analfabetismo pero no ha ayudado a que ciudadanos mexicanos funcionen y encuentren un lugar de progreso en la sociedad. La cuestión para comprender y entender dicha obligatoriedad en el proceso educativo es conocer desde fondo los orígenes y a través de que perspectivas fueron creadas las escuelas e instituciones educativas.

Para varios pensadores y filósofos, las escuelas son un tipo de replica que simula los sistemas militares, represivos y con una baja posibilidad de respuesta. El fin de estas no es educar o hacer del hombre un hombre libre sino copiar todos los sistemas de cohesión, prohibición y ciega obediencia a los que están el poder actualmente, parecen mas montajes para un adiestramiento, cuarteles y o fabricas. Si todo esto cambiara y los recintos educativos fueran espacios llenos de libertad o reflexión como en la antigua Atenas no sería necesario imponer una obligatoriedad que solo modela la conducta a través de castigos y promueve modelos elitistas de disciplina y obediencia a ciegas.

Existen en México muchas universidades e instituciones a nivel superior que son de gran prestigio y tiene un calidad educativa pero a pesar de esto pocas de estas instituciones contribuyen a la investigación seria, profunda y de calidad. Aunque seamos un país progresista seguimos dependiendo de lo exterior a nivel educativo en materia científica como tecnológica.

La sobrepoblación y el crecimiento desbordado de la población escolar se ha convertido en una gran obstrucción que impide mejorar la calidad educativa y aumentar la permanencia de los alumnos en las aulas. Los gobiernos sexenales en nuestro país no han permitido que haya una continuidad en los programas educativos, y mucho menos en los modelos o en las filosofías de la educación. Intereses económicos, políticos y del poder de los sindicatos han protagonizado los sistemas educativos. Hay intenciones que han sido buenas pero no suficiente para formar a docentes y maestros preparados y comprometidos con la educación. La calidad que tiene un sistema educativo no debe exceder la calidad de los maestros.

Probablemente los cambios que se quieren gestionar en la educación han sido hechos por administrativos, mas no por académicos, filósofos o pedagogos que son los que se preocupan por el ser humano. Estudiar y comprender lo que ha ocurrido desde un punto de vista filosófico como en filosofía de la educación es el saber critico que esclarece los conceptos, los enunciado y las argumentación que utilizan tanto educadores como pedagogos.

Las currículos de nuestras escuelas, o muchas de ellas, tienen contenidos alejados de la realidad de los individuos, son programas estandarizados que poco apoyan al pensamiento y a la creación. Estudiar no es un acto de consumir ideas, sino de recrearlas.

Denisse Dresser menciona que  la educación en México está amurallada, los alumnos no son competentes, son ciudadanos apáticos, memorizan, no piensan, no resuelven, se resignan a una vida mediocre. Las cifras de desempeño son alarmantes, los estudiantes aprenden, si es que lo hacen, datos inertes que de nada les sirve en su entorno cotidiano. La educación no sólo es en las aulas, aprendemos a pesar de ellas, podríamos prescindir de las escuelas, y salir del encierro podría ser más eficiente. Desarrollar habilidades que permitan a nuestros jóvenes enfrentar el mundo de hoy.

Hoy en día la educación debe ser la protagonista y la forjadora de ideas así como promotora de cambia de actitudes propias de una sociedad dinámica. Esto a pesar de la políticas filosóficas de cualquier país, inclusive de los países mas desarrollados a nivel educativo se debe de tener como esencia en cualquier sociedad la formación de los niños, hombres del futuro.

La educación primaria, básica en un mundo de alta tecnología y de complejos sistemas de comunicación masiva deben de : fomentar el deseo de aprender, el ansia y la alegría de conocer y, por lo tanto, el afán y las posibilidades de acceder más tarde a la educación toda la vida. México, al igual que otros países debe de hacer frente al problema de la educación si quiere desarrollarse y enfrentar los retos del futuro. Revisar los sistemas educativos con todo lo que ello involucra, desde el punto de vista de la teoría y práctica como lo propone la filosofía de la educación. Que sean verdaderas reformas educativas y no políticas. Revisar planes de estudio, fomentar la inclusión la diferenciación por ende, y capacitar verdaderamente a los maestros, como guías y responsables del proceso educativo. Los mexicanos tenemos necesidad de replantear y dar consistencia a los principios filosóficos, sociales, éticos y pedagógicos del proyecto educativo mexicano del siglo XXI y dar cumplimiento a la norma constitucional, que sitúa a la educación como un derecho social fundamental.

Una reforma integral que no sólo favorezca a unos cuantos y trascienda las políticas de los sexenios y el poder de las mismas. Que la educación de calidad comience en el preescolar hasta el posgrado, investigación sobre el tema, que se relaciones con otras áreas, que se vincule con los campos profesionales, de trabajo, hacía una calidad de vida. Parafraseando a Delors, para que nuestro país salga adelante y enfrente los desafíos del mundo actual debe concebir a la educación como un instrumento indispensable para que nuestra sociedad pueda progresar hacia los ideales de paz, libertad y justicia social.

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