Trayecto Formativo

Diagnóstico

En la actualidad vivimos en una sociedad del conocimiento la cual exige personas preparadas que realicen el papel de facilitadores, que guíen a la sociedad hacia una mejor calidad de vida, que estimulen en los jóvenes el interés por apropiarse de conocimientos, para abatir la ignorancia, que es una de las finalidades de la educación básica, ante este panorama los docentes juegan un papel tan relevante que no puede pasar inadvertido.

Así pues el docente tiene la tarea de ser relevante, expresar conocimientos y demostrar que es capaz de atraer la atención de la sociedad en la que se desenvuelve, para llevar acabo las transformaciones que se requieren.

Por ello la dirección general de formación continua de maestros en servicio (DGFCMS) ha planteado una serie de competencias profesionales que sirven como un referente para evaluar el desempeño profesional de los maestros en servicio.

De los cuales considero que están en proceso de fortalecimiento los siguientes:

• Domina los contenidos de enseñanza del currículo y los componentes pedagógicos y didácticos para el desarrollo de capacidades intelectuales y de pensamiento complejo en los estudiantes de acuerdo con los Planes y Programas de Estudio vigentes para la Educación Básica.

• Atiende de manera adecuada la diversidad cultural y lingüística, estilos de aprendizaje y puntos de partida de los estudiantes de manera que valora la individualidad y potencializa el aprendizaje con sentido en un contexto de inclusión y equidad (crea condiciones para la educación inclusiva).

• Trabaja en forma colaborativa y participa en redes académicas de profesionales de la educación, para el desarrollo de proyectos de innovación e investigación educativa tanto en su propia comunidad educativa como en otros contextos y experiencias.

• Domina una segunda lengua (nacional o extranjera), que contribuya a sus posibilidades de desarrollar actitudes y prácticas interculturales.

• Incorpora las tecnologías de la información y comunicación en los procesos de formación profesional y en las prácticas pedagógicas del aula, que les permita enfrentar los retos de las sociedades del conocimiento.

Así el presente trayecto formativo tiene como finalidad hacer participe al maestro dentro del actualización y preparación profesional, para que de esta manera no solo se quede en el saber, sino que trascienda al saber hacer, puesto que nos enfocamos en los cursos obligatorios y nos hace falta la iniciativa propia.

Justificación

El rol del maestro es muy trascendental ya que deben presentar a sus alumnos situaciones que les posibiliten avanzar en su desarrollo y conocimiento, que les permitan investigar y experimentar.

Nosotros somos los encargados de guiarlos en todos esos procesos de enseñanza aprendizaje, desarrollando en ellos destrezas, valores, que sean relevantes dentro de su vida social.

Por ello la preparación profesional e involucramiento, dentro del proceso educativo exige el conocimiento de todos los planes y programas que nos rigen, para orientar la educación hacia los objetivos precisos que permitan obtener los resultados deseados y alcanzar el perfil de egreso esperado.

En el plan de estudios 2011 habla de:

Elevar la calidad de la educación implica, necesariamente, mejorar el desempeño de todos los componentes del sistema educativo: docentes, estudiantes, padres y madres de familia, tutores, autoridades, los materiales de apoyo y, desde luego, el Plan y los programas de estudio.

(SEP, pan de estudios 2011. Educación básica: 9)

Por ello debemos dominar los contenidos de enseñanza del currículo y los componentes pedagógicos y didácticos para el desarrollo de capacidades intelectuales y de pensamiento complejo en los estudiantes de acuerdo con los Planes y Programas de Estudio vigentes para la Educación Básica.

La educación es un derecho fundamental y una estrategia para ampliar las oportunidades, instrumentar las relaciones interculturales, reducir las desigualdades entre grupos sociales, cerrar brechas e impulsar la equidad. Por lo tanto, al reconocer la diversidad que existe en nuestro país, el sistema educativo hace efectivo este derecho al ofrecer una educación pertinente e inclusiva.

En correspondencia con este principio, los docentes deben promover entre los estudiantes el reconocimiento de la pluralidad social, lingüística y cultural como una característica del país y del mundo en el que viven, y fomentar que la escuela se convierta en un espacio donde la diversidad puede apreciarse y practicarse como un aspecto de la vida cotidiana y de enriquecimiento para todos.

(SEP, pan de estudios 2011. Educación básica: 35)

Dentro del salón de clases se atiende de manera adecuada la diversidad cultural y lingüística, estilos de aprendizaje y puntos de partida de los estudiantes de manera que valora la individualidad y potencializa el aprendizaje con sentido en un contexto de inclusión y equidad (crea condiciones para la educación inclusiva).

El trabajo colaborativo alude a estudiantes y maestros, y orienta las acciones para el descubrimiento, la búsqueda de soluciones, coincidencias y diferencias, con el propósito de construir aprendizajes en colectivo.

(SEP, pan de estudios 2011. Educación básica: 28)

Es de suma importancia llevar acabo en forma colaborativa y participa el trabajo dentro de la comunidad escolar, además participar en redes académicas de profesionales de la educación, para el desarrollo de proyectos de innovación e investigación educativa tanto en su propia comunidad educativa como en otros contextos y experiencias.

El dominio generalizado de las tecnologías de la información y la comunicación, y en general de las plataformas digitales, como herramientas del pensamiento, la creatividad y la comunicación; el dominio del inglés, como segunda lengua, en un mundo cada vez más interrelacionado y para acceder a los espacios de mayor dinamismo en la producción y circulación del conocimiento; el trabajo colaborativo en redes virtuales, así como una revaloración de la iniciativa propia en la construcción de alternativas para alcanzar

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