DINAMICA Y CONDUCCION DE GRUPOS EN EL AULA

UNIVERSIDAD ETAC

ALUMNO: ANDRES HERNANDEZ VARGAS

TÍTULO: CONTEXTO, HISTORIA Y PARADIGMAS EDUCATIVOS

MATERIA: DINAMICA Y CONDUCCION DE GRUPOS EN EL AULA

GRUPO:

ASESOR: MARIA GUADALUPE CORTÉS TOLEDO

FECHA DE ENTREGA:   11 DE FEBRERO DEL 2016

INTRODUCCION

       La educación es un proceso social bastante complejo que sin dudad exige al docente habilidades que le permitan conducir de manera apropiada su participación en dicho proceso.

       La relación maestro-alumno va más allá del mero papel asignado tradicionalmente en la que uno recibe y otro imparte. La relación pedagógica debe ser adecuada y apropiada para el crecimiento profesional del docente y sobre todo para la formación académica e integral del alumno.

       Con base a esto, en el presente trabajo se abordan cuatro factores que permiten analizar puntos clave de la situación actual de las educaciones México como son el papel del docente actual, las debilidades del modelo tradicional, aprendizaje significativo y técnicas de evaluación y aprendizaje colaborativo. Y el objetivo en este trabajo es principalmente el desarrollar un juicio y postura crítica sobre factores que estos factores.

DESARROLLO

      En México el papel del docente pasa por un periodo de evaluación de diferente naturaleza, tanto en sus habilidades pedagógicas como en su valor social, anteriormente ser maestro era sinónimo de cierto estatus social que se ha ido perdiendo por diversos factores, entre ellos los cambios tan vertiginosos que la sociedad experimenta y que exige del docente una mayor preparación, ya  no basta con sólo tener dominio en la materia, ahora el docente del siglo XXI debe tener además de habilidades docentes e intelectuales, cualidades humanas que lo distingan de otras profesiones en cuanto a la formación de individuos.

      La dinámica de la vida actual y del contexto en el que la vida académica de los estudiantes se desarrolla es un factor que determina el papel del docente, las características de la población y las necesidades futuras de ésta han de determinar las capacidades docentes que se deben desarrollar para cumplir el perfil que permita abordar y cubrir la “Declaración Mundial sobre la Educación para Todos” (Jomtien, 1990), en esta declaración aun cuando el papel del docente no se desarrolla textualmente, se abordan las características implícitas del perfil docente y en el cual se puede observar una alto compromiso con cada uno de sus artículos, tanto en su desarrollo profesional como con el compromiso social que le permita colaborar equitativamente fundamentándose en valores de paz, respeto a la vida y a la diversidad.

      El papel del docente actualmente debe entre otras cosas estar al día en cuanto a globalización, no sólo de naturaleza comercial sino de índole académico; en este aspecto el docente debe conocer las tendencias educativas, los nuevos paradigmas y la metodología y técnicas que le permitan tener un mejor desempeño en su relación docente-alumno.

     Además, el docente debe tener la capacidad de integrar la vasta multiculturalidad y la gran diversidad de rasgos sociales y económicos de su población estudiantil a modo que su quehacer sea lo más inclusiva posible y en la que se fomente y consoliden los valores, la moral y el juicio crítico sobre la pérdida de valores.

       Por ultimo en este aspecto el docente ha de fomentar en sus alumnos el uso y dominio tecnológico, siendo él quien domine primero las herramientas y técnicas de investigación y de comunicación (TIC)

      El papel del docente actual, pone en evidencia las debilidades de los modelos tradicionales. Por un lado manifiesta sus propias carencias el conducir sus grupos como tradicionalmente se hacía empoderando su posición de dominio y sometiendo al individuo.

      Una de las mayores debilidades del modelo tradicional es que se basa en el desarrollo de roles, el docente, el alumno y el grupo en general tienen muy claro su papel, en este el rol del docente de impartir conocimiento y de establecer las normas de conducta hacen que el papel del alumno se centre en sus actividades y productos, mientras el grupo repite la misma acción que un sólo individuo. Este modelo fortalece el papel del docente facilitando el trabajo y volviendo la naturaleza de la clase pasiva e inflexible.

     En este modelo no se fomentan las características deseadas en el alumno ni en el docente, tampoco en el ambiente que permita lograr aprendizajes que fomenten la creatividad y el desarrollo personal y colectivo. Si bien el rol del docente actual es más el de un guía o acompañante, la relación docente-alumno no se puede fortalecer en el modelo tradicional pues en este el docente está muy por encima del alumno mientras que en modelos más flexibles, el alumno está en condiciones de igualdad que el docente, sobre todo al momento de decidir y establecer acuerdos y al marcar ritmos de aprendizaje.

       Un aspecto de gran relevancia en el modelo tradicional y que es una de sus mayores debilidades es la importancia que se le da al factor de la memorización y la repetición de los aprendizajes, es decir, el aprendizaje mecanizado.

      El aprendizaje significativo, su contraparte, surge cuando estos están relacionados de modo no arbitrario y sustancial (no tal cual, al pie de la letra) con lo que el alumno ya sabe, es decir, el conocimiento se apega a la estructura cognitiva previa del alumno ya sea con una imagen, un símbolo o un concepto (Ausubel, 1976).

      El docente en la actualidad debe tener las habilidades apropiadas que le permitan generar en el alumno este tipo de aprendizaje, para ello es necesario que se adentre en las características del alumno y del grupo ya que posibilita el intercambio conocimientos no sólo de aspecto académico sino además personal y es sobre todo este el que le permite conocer al alumno y el modo en que aprende. Así, los conocimientos previos se pueden aprovechar para integrar nueva información y nuevas habilidades.

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