Death Penalty

En 2013 cada costarricense utilizó un 8% más de los recursos que estaban disponibles en el territorio nacional. Así lo señala un análisis de la huella ecológica realizado por el Programa Estado de la Nación y que se publicará en el próximo mes de noviembre, cuando se haga oficial el más reciente informe.

Esta medición se viene haciendo desde años atrás. Karen Fernández, investigadora del Estado de la Nación, comentó que la brecha entre la huella ecológica y la biocapacidad es cada vez más amplia y eso debe de preocuparnos como país y como sociedad.

“La huella ecológica es el uso de los recursos y la biocapacidad es la capacidad para reponer esos recursos que utilizamos… Se miden los diferentes usos que se hacen del territorio, como el forestal, el tema del carbono, producción e infraestructura”, explicó Fernández.

Se mide el uso de la tierra en estos diferentes campos. Cerca del 31.1% de la huella ecológica corresponde al uso energético y las emisiones contaminantes generadas, siendo los principales factores que propician. También se destaca una alta dependencia de la estructura de consumo energético del país a la dependencia de los hidrocarburos.

“El patrón de esa matriz es bastante dependiente, porque tiene una alta dependencia del 70% de los hidrocarburos y un 25% de la electricidad. Vemos que esa fortaleza de la generación de la electricidad a partir de fuentes hidráulicas se ha venido contrarrestando. A raíz de la disminución de los caudales de agua, el país ha tenido que aumentar su dependencia a los hidrocarburos para generar electricidad”, acotó la investigadora.

En 2010 el porcentaje que se necesitó cubrir con hidrocarburos para generar electricidad fue de un 10%, en 2012 fue de un 9%. Para 2013, hubo un incremento en ese rubro del 44%. Dicha información es proporcionada por el Instituto Costarricense de Electricidad (ICE) y otras entidades ligadas al sector energía, como la Refinadora Costarricense de Petróleo (Recope) o la Autoridad Reguladora de Servicios Públicos (Aresep).

“Uno de los sectores que más afecta en ese sentido es el sector transporte, que es el mayor consumidor de energía y de ahí la importancia de tomar medidas y acciones en este sector. No es la única alternativa, pero sí la más importante, para disminuir la producción de gases de efecto invernadero”, citó la funcionaria.

Cantidad de vehículos incide Según el Estado de la Nación, en 1980 el parque vehicular del país se situaba en 180.986 unidades, mientras en 2013 se situaba en 1.329.041. Cifras que están íntimamente relacionadas con un mayor consumo de hidrocarburos en el país.“Hay sectores que apuestan a la exploración petrolera, pero hay otros sectores que hablan de desarrollar más las energías limpias. Ya se utilizan, pero el potencial que tienen esas energías es mucho mayor al que se les da en el país”, agregó Fernández.

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