INVESTIGACION CAPITALISMO

Capitalismo.

En este ensayo veremos en profundidad el caso del capitalismo como modelo económico y analizaremos su impacto respecto al coronavirus, como ha ayudado o perjudicado en esta materia.

El capitalismo es un modelo económico en el que como eje central se encuentra el capital y derivado de su producto generamos beneficio económico, es un sistema económico dinámico está en constante movimiento y genera importantes interrelaciones sociales a través del mercado, que se encuentra mayormente constituido por relaciones empresariales vinculadas a las actividades de inversión y obtención de beneficios, así como de relaciones laborales, tanto autónomas como asalariadas subordinadas libres, con fines mercantiles. Si bien el capitalismo no encuentra su fundador en un pensador sino en las relaciones productivas de la sociedad, la obra La riqueza de las naciones concedió a Adam Smith el título de fundador intelectual del capitalismo, después sería John Locke quien establecería los principios del sistema productivo, además de fundamentar el liberalismo como corriente social.

Entre los factores fundamentales de este pensamiento encontramos que están bien identificados con el trabajo y el capital. El capitalismo nos indica que el trabajo que se realice debe ser remunerado, es decir se proporcione a cambio de salarios monetarios por el trabajo realizado y debe ser aceptado libremente por parte de los empleados. La actividad económica busca que las personas encargadas de suministrar los medios de producción puedan tener acceso a un beneficio económico y poder aumentar sus ingresos. Los bienes y servicios se distribuyen mediante mecanismos de mercado, promoviendo la competencia entre empresas. El aumento de capital, por medio de la inversión ayuda a la generación de riqueza. Si los individuos persiguen el beneficio económico y la competencia en el mercado, aumentará la riqueza. Y con el aumento de riqueza, aumentarán los recursos disponibles.

Las economías  que tienen la orientación capitalista se caracterizan principalmente porque empresas e individuos generan a través de interacciones en el mercado el intercambio bienes y servicios por medio de transacciones económicas a través de determinados precios. De esta manera, puede señalarse que es el individuo el que por medio de organizaciones empresariales o financieras lleva la iniciativa económica y toma decisiones.

Las ideas del capitalismo, que iniciaron a partir del siglo XIII, dando de esta forma un reemplazo  a los ideales económicos que predominaban en la Edad Media. Luego, se vieron reforzadas por el proceso de colonización del continente americano por parte de las potencias europeas a partir del siglo XV, ya que se estaba estableciendo relaciones comerciales con estas nuevas naciones. Esto, debido al intercambio comercial que se generó entre las metrópolis y sus colonias en el nuevo continente.

Posteriormente, en el siglo XVIII, fue relevante el aporte de Adam Smith quien publicó “La riqueza de las naciones” donde defendía los principios del libre mercado. Smith podría ser considerado creador del capitalismo, aunque esto es debatible, pues aparte de ser un movimiento económico, también tuvo su impacto en el ámbito social.

Mediante la metáfora de “la mano invisible”, Smith sostuvo que una sociedad alcanzaría un mayor bienestar si el Estado deja funcionar por sí mismo el mercado, mediante la ley de la oferta y la demanda, es decir se fomentaba el autoajuste de la economía a través de las variaciones que existían en el mercado. De ese modo, aseguró el pensador escocés, si cada persona persigue su propio beneficio, la comunidad en su conjunto también llegará a la mejor situación posible. El beneficio común fomenta el bienestar en general.

Las ideas del capitalismo fueron apuntaladas, además, por el renacimiento y la ilustración, que desplazaron el sistema conocido como Antiguo Régimen y dieron lugar a los estados modernos.

El capitalismo encontró importantes detractores por su carácter consumista  fue luego cuestionado por uno de los pensadores más emblemáticos del siglo XIX, Karl Marx, quien sostenía que el sistema capitalista propiciaba la explotación de un grupo de la población, el proletariado, por parte de los dueños de los medios de producción, los capitalistas. De ese modo, nace una corriente de pensamiento socialista que fue llevado al extremo con el sistema comunista de Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS) en el siglo XX. Sin embargo, el modelo que planteaba, de una economía totalmente centralizada desde el Estado, no obtuvo los resultados esperados.

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