Los Prejuicios, Discriminacion Y Racismo.

A. Introducción

La novela de Franz Kafka, El Proceso, es la historia de un joven arrestado, juzgado y ejecutado por un crimen que no se especifica nunca ni al acusado ni al lector.

Desde el inicio de la novela y hasta el final se supone la culpabilidad del acusado y cualquier protesta de inocencia por su parte, supone aún más su culpabilidad, la palabra prejuicio es sumamente apropiada a este contexto ya, que la historia supone un juicio prematuro o previo de culpabilidad.

Los psicosociólogos, en lugar de referirse a un pre-juicio favorable o desfavorable, reservan el termino prejuicio para los juicios negativos es decir para los casos en que una persona tiene un prejuicio “contra” otra persona, sin embrago no se refiere tanto a los prejuicios hacia individuos, sino más bien hacia grupos enteros, por lo cual debe considerarse que los prejuicios constituyen opiniones dogmáticas y desfavorables respecto a otros grupos y por consecuencia a miembros individuales de estos grupos.

Es importante resaltar la diferencia entre el prejuicio y la discriminación, ya que el primero refiere a las actitudes negativas y la discriminación es el comportamiento dirigido contra los individuos objeto del prejuicio, de esta manera se puede decir que la discriminación, viene tras el prejuicio, sin embargo no existe un enlace automático, ya que el hecho de que una persona exprese prejuicios negativos hacia un grupo determinado, no significa que esta persona tendrá un

comportamiento hostil hacia cada miembro individual del grupo, por lo tanto un prejuicio no conduce siempre a una condena.

Ahora bien, si el prejuicio puede existir sin la discriminación, también es posible lo contrario, este ejemplo se expone en otra novela de Kafka, El Castillo, cuyo personaje principal es un forastero y es tratado como tal por los habitantes de una aldea, los cuales se encuentran dominados por la autoridad del castillo.

En esta historia se plantea una situación en la que existe discriminación, sin que existan prejuicios personales, de acuerdo a esto debe entenderse que independientemente de cuales sean las razones , en ciertas circunstancias la expresión de una actitud también puede ser considerada como discriminación, lo cual nos revela otro aspecto importante del prejuicio, su aspecto social.

B. Etnocentrismo y autoritarismo

Dentro del estudio psicosociológico de los prejuicios, se publica en 1950, La Personalidad Autoritaria, escrita por un equipo de psicólogos, Adorno, Frenkel-Brunswick, Levinson y Sanford, basada en investigaciones llevadas a cabo en los Estados Unidos , bajo la influencia de dos corrientes teóricas Europeas. Esta obra representaba investigaciones empíricas, provenientes de las teorías de Freud, que añadirían una perspectiva psicológica al análisis de la sociedad capitalista, formulado por Karl Marx, esta alianza de perspectivas teóricas, tenía una gran importancia para comprender el desarrollo de un

pensamiento marcado por los prejuicios en la sociedad contemporánea.

Este estudio se realizó en el Instituto de investigación social, por un grupo de pensadores socialistas de Alemania, quienes llegaron a la conclusión de que la interpretación de la sociedad dada por el marxismo convencional no era suficiente para comprender lo que estaba sucediendo.

La obra de Marx, sugería que los factores económicos determinan la forma de pensar de la gente, sin embargo los acontecimientos de la Alemania entre guerras, no concordaba con este modelo, en donde el aumento de la crisis económica y el aumento del desempleo masivo , provocaron el auge de ideas extremistas de derecha y esto se dio tanto en la clase burguesa como en la obrera, ya que en lugar de adoptar ideas revolucionarias como solución, numerosas personas se sentían atraídas por ideas irracionales, como el culto a un jefe fuerte y la creencia de una raza dominante, este pensamiento lleno de prejuicios se convirtió en el nazismo y se adopto como una doctrina oficial.

Explicar únicamente desde el punto de vista económico, este irracionalismo de masa pareció poco satisfactorio al Instituto y sus investigadores se dirigieron hacia las teorías psicoanalíticas de Freud, realizaron investigaciones preliminares sobre los motivos psicológicos que podían hacer que una persona se sintiera atraída por el fascismo y el antisemitismo, este trabajo fue suspendido poco después de que Hitler tomara el poder, ya que el grupo

tuvo que huir de Alemania, y finalmente llegar a los Estados Unidos, en donde fue retomada la investigación por Max Horkheimer quien dirigió una serie de estudios sobre el fundamento de los prejuicios, que posteriormente desembocaría en La Personalidad Autoritaria, resultado de investigaciones de un equipo conjunto de investigadores del instituto y psicólogos norteamericanos, quienes aportaron métodos más modernos de construcción de cuestionarios, a los análisis más teóricos de los Europeos, por lo cual el resultado fue una investigación de raíces empíricas por una parte y por la otra un análisis de la sociedad.

La Personalidad autoritaria, plantea un problema fundamental en relación con las actitudes, que debía estudiarse según los autores y este es “que es posible que los motivos económicos del individuo no desempeñen el papel dominante y crucial que a menudo se les atribuye”, ejemplifican con el fascismo ya que este no puede recurrir directamente a consideraciones económicas, ya que siendo objetivos solo puede beneficiar a un pequeño numero de individuos comparativamente con el gran numero de personas que afecta, por lo cual resulta imposible demostrar que mejora la situación de la mayoría de las personas, el objetivo principal del estudio consistía en examinar los diferentes modelos de actitudes, o de ideologías adoptados por los norteamericanos, para ver si los individuos tenían prejuicios contra grupos minoritarios específicos, así como otro tipo

de ideas y si además poseían rasgos de personalidad diferentes.

El trabajo se centro en las actitudes expresadas en lugar de tomar el comportamiento discriminatorio de grupos minoritarios, se evaluó por medio de cuestionarios un gran numero de personas de diversos orígenes sociales y económicos pero todos blancos, ya que los encuestadores se interesaban de forma especial por los prejuicios contra los judíos y los negros, la etapa posterior a la encuestación consistía en descubrir si el prejuicio contra los judíos y los negros estaba ligado a un prejuicio contra otros grupos. El resultado marco que los sujetos que se clasificaban antisemitas en primer plano, probablemente estaban de acuerdo con las cuestiones dirigidas hacia los negros.

El resultado

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