Medidas tomadas en la educación superior ante la pandemia COVID-19

Medidas tomadas en la educación superior ante la pandemia COVID-19

Cesar Andrés Anaya Molina Juan Esteban Diaz Ogaza  María Camila Zúñiga Benavides

El 11 de marzo de 2020 la Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró la epidemia del virus SARS-CoV-2 o COVID-19 como Pandemia, y como medida inmediata los Gobiernos de cada país alrededor del mundo tomaron como principal medida el confinamiento de sus habitantes. Esto ocasiono un pare en las actividades académicas de colegios, escuelas, IES tanto Públicas como Privadas. Si se mira hacia las IES al 30 de marzo de 2020 el 87% de los estudiantes (alrededor de 1,520 millones) se vieron afectados por estas medidas, y alrededor de 63 millones de profesores ya  no  estaba  trabajando  en  las  aulas  ((IESALC-UNESCO,  2020)  en  (Santuario,  2020)).

Estudiantes, docentes, y las mismas IES se encontraron con falta de recursos para afrontar el nuevo

escenario de educación virtual.

En primer lugar, se va abordar la problemática a la que se enfrentó una gran parte de los estudiantes, encontrándose que no tenían las herramientas necesarias para llevar a cabo el nuevo modelo de educación que se vieron obligados a tener, abriendo y dejando en evidencia una nueva brecha social, la equidad educativa. En segundo lugar, se verá como una gran parte de los docentes no supo asimilar los modelos de enseñanza virtuales y como hasta incluso algunos no tenían ni el menor conocimiento en el manejo de herramientas tecnológicas. En tercer lugar, veremos la problemática económica a la que se enfrentaron tanto IES públicas como privadas, mostrando también que el mayor reto estuvo enfocado en las IES Públicas de zonas en vía de desarrollo.

A lo largo de toda la pandemia se dejó en evidencia una importante brecha social, mayoritariamente en las sociedades de países subdesarrollados o en vía de desarrollo, en donde se encuentra que muchos estudiantes no tienen condiciones mínimas para implementar espacios de

enseñanza-aprendizaje óptimos y eficientes; López Ramírez, M., y Rodríguez, S. A. Mencionan que:

“En ocasiones, existe una sola computadora en el hogar que se comparte con otros miembros de la familia y muchos de los estudiantes no cuentan con un espacio para sus labores escolares. Además, al estar en casa, el tiempo de que disponen se fragmenta entre diversas actividades, tareas del hogar y el cuidado de otros familiares. A esto se suma que, aunque existe la creencia de que estos alumnos pertenecen a la generación tecnológica, muchos de ellos carecen de las habilidades necesarias para desarrollar actividades de aprendizaje de forma virtual, así como de la autodisciplina que demandan estas modalidades, en un ambiente de estrés, incertidumbre y de restricciones socioeconómicas derivadas de la pandemia.” (Rodríguez, 2020)

Mostrando que debe haber un apoyo económico, social, y psicológico al estudiante, para que este siga continuando sus estudios de forma correcta, y de forma óptima en esta nueva realidad.

Continuando con la idea o creencia de que la generación que se está enfrentando a este nuevo modelo educativo es una generación con buen manejo tecnológico, se encuentra que en realidad gran parte de estos jóvenes en su precariedad o no de recursos carecen de entendimiento en estas herramientas y apoyarse de ellas en su proceso de aprendizaje. Tal como López Ramírez, M., Y Rodríguez, S.A. Afirman los estudiantes obtendrán diferentes habilidades debido a que se podrán diferenciar a través de sus estratos económicos, la falta de herramientas de trabajo, asimismo, la carencia en el aprendizaje autónomo y las diferentes ayudas que les suministre las universidades y los pedagógicos. (P.105, 2020); Las TIC y herramientas ofimáticas que son de vital funcionamiento para los métodos de enseñanza-aprendizaje virtual u online, se evidencia poco uso

de ellas en los jóvenes estudiantes, esta falta de conocimiento en el manejo de dichas herramientas se puede ligar a las situaciones precarias en Instituciones Educativas de los países más vulnerables y la poca orientación que se imparte sobre el uso y buen manejo de estos mecanismos, en muchas de ellas los estudiantes ni siquiera tienen acceso a aparatos tecnológicos, tales como computador (de mesa o portátil), Tablet, o teléfonos inteligentes. Asimismo los jóvenes pertenecientes a las zonas marginadas de las grandes ciudades y los también pertenecientes a zonas rurales (donde el acceso a internet es restringido), encontrándose en que la situación socio-económica de sus familias es de bajos recursos, y teniendo acceso nulo o casi nulo a dispositivos tecnológicos y el uso de herramientas tales como las TIC u ofimáticas; Además de esto se presentan zonas rurales en las que no hay conexión a internet, dejando en claro una nueva problemática, y dejando en claro que aunque al estudiante se le dé la orientación necesaria para el uso de estas herramientas no lo va a poder poner en Práctica.

Talavera (2020) Menciona qué los docentes deben cambiar su anterior modelo de enseñanza en donde se valían de clases presenciales y recursos memorísticas, deben tener un giro en esta nueva realidad educativa, debido a que en el momento en que intenten implementar este proceso de enseñanza en un sistema de educación virtual, será un error ya que esto no tendrá éxito suficiente para dar frutos en la sociedad. En retrospectiva a lo que plantea Talavera se encuentra que gran parte de los profesores no logran implementar de manera correcta los nuevos modelos de enseñanza-aprendizaje, que ellos en su rol docente en la sociedad no tienen un buen manejo de herramientas tecnológicas, encontrándose también que varios de ellos tienen conocimiento casi nulo en el manejo de dispositivos tecnológicos.

López Ramírez, M., y Rodríguez, S. A. (2020) plantean unas acciones que deben tener en cuenta y tomar los profesores, siendo las siguientes:

• Los profesores deben priorizar los contenidos esenciales de los cursos; planear las clases y actividades virtuales, y privilegiar aquellas que no demanden el uso de internet o medios tecnológicos (por ejemplo, reconstrucción de experiencias y vivencias en esta situación o la elaboración de un diario), considerando el contexto de estrés y cuarentena en que se encuentra la población en general, y especificando de manera clara los criterios y procesos de evaluación.
• Es indispensable mantener una comunicación activa con los alumnos a través de distintos medios (los de fácil acceso para los docentes y estudiantes), de manera que todas las dudas puedan ser atendidas oportunamente y que los jóvenes tengan un acompañamiento durante su proceso de enseñanza-aprendizaje.
• Los profesores deben tener flexibilidad ante diversas situaciones, sobre todo con alumnos de escasos recursos.

Además de estas posturas y acciones que deben implementar, los docentes deben buscar la forma de orientarse en el manejo de dispositivos y herramientas tecnológicas, el Estado y sus respectivas IES deben capacitarlo en esto.

Partiendo de la afirmación que da Santuario (2020) diciendo que las IES serán vulneradas en el ámbito económico y presupuestario, unas más que otras, las ya estables financieramente a largo plazo no se verán afectadas, pero al contrario las Instituciones de países tercer mundistas tendrán que reajustar sus presupuestos y hacer más con menos. En Latinoamérica muchas universidades no estaban preparadas para un cambio de metodologías de enseñanza, incluso al principio de esta situación varias universidades optaron por un cierre temporal de actividades académicas debido a déficits presupuestarios, de recursos, y preparación para optar este nuevo sistema educativo virtual, y por otra parte se encontró que las que intentaron continuar sus actividades académicas se enfrentaron a extensos retos para lograr los objetivos académicos planteados inicialmente antes de

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