Pérdida de tiempo en distractores (por Gerardo García)

PÉRDIDA DE TIEMPO EN DISTRACTORES

Todos conocemos las redes sociales (como Facebook), todos conocemos reproductores modernos (como los ¡Pod), todos conocemos las televisiones.

¿Qué tienen en común todas estas cosas? La respuesta es muy simple, todos son producto de los avances científicos y avances tecnológicos. Pero esta respuesta la podemos ampliar aún mucho más.

Todas esas cosas, aparte de ser traídas por la tecnología, que a su vez fue traída por la ciencia, tuvieron un gran éxito mundial, a tal grado de que muchos de nosotros las queremos, ya como si fueran parte de nosotros, pero la realidad es más sombría.

Tanto Facebook, ¡Pod y la televisión, a pesar de no ser la misma cosa, comparten muchas más semejanzas de las ya mencionadas, puesto que a través de ellos nos podemos “informar” (aunque muchas de las veces podríamos estar obteniendo información que no necesitamos o no es benéfica para nosotros), y es aquí donde precisamente comienza el problema,

Las redes sociales, y los aparatos electrónicos, pueden llegar a convertirse en el peor de los ejemplos de vicios de exceso. Esto es pues, actualmente, y está de más decirlo, se han convertido en una gran problemática local, pues funcionan como “distractores”.

¿Por qué distractores? Porque hacen que, niños, jóvenes y adultos pierdan mucho de su tiempo en ellos. Por ejemplo, hoy en día los niños usan ¡Pod, y cuando lo usan (que es casi todo el día), le prestan más atención a ese aparato electrónico que a su propia vida social, sus padres los llaman y muchas veces ni responden, porque es como si ellos estuvieran introducidos dentro de un mundo virtual donde no puedes escuchar a nadie más. A esta enfermedad se le conoce como “vicio tecnológico” y se caracteriza principalmente por una adicción igual o más fuerte que el vicio a las drogas o al alcohol. Después de mucho tiempo, una persona con el vicio tecnológico puede llegar a padecer síntomas como: impulsividad, cambios de humor, baja tolerancia a la frustración, falta de habilidades sociales, dificultad para enfrentarse a problemas y para encontrar soluciones, dependencia emocional o baja autoestima.

Ahora bien, eso es sólo en una persona o un niño o un joven o inclusive ya hasta un adulto, sin embargo como ya mencioné más arriba, esto se trata de una problemática local, por lo que al menos el 75% de los poblados de San Quintín son localidades que pueden tener distractores como el ¡Pod o la televisión, y acceso a redes sociales como lo es Facebook. Imaginen un gran número de personas con esa enfermedad.

Muchas personas, aún usan estos medios como entretenimiento, pero no pasa de allí, es como si estuvieran en los tiempos de antes jugando al trompo, o usando una computadora para hacer su tarea.

Por desgracia, la mayoría de las personas pierden bastante de su tiempo con estas distractores a tal grado de considerarlos más importantes que otras cosas como son sus deberes.

Por ejemplo, un profesionista que dentro de su oficina sólo está en Facebook, se puede desconcentrar fácilmente de su trabajo.

O un joven, que por estar viendo la televisión puede descuidar las tareas y el estudio, lo cual puede bajar después sus notas.

Es tiempo de que vayamos recapacitando, de que estos distractores no son malos, si se les da el uso adecuado y no se exagera en su uso, pero que si se pasa demasiado tiempo con ellos, las consecuencias pueden incluso llegar a ser fatales, puesto que en el caso de Facebook (y de otras redes sociales) nos pueden robar información privada fácilmente, y tengan por seguro que si roban nuestra información, no será para nada bueno.

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