Reforma 2008

En las iniciativas de los diputados y del ejecutivo cabe resaltar por las extremadas cifras de delitos(entre ellos los de la delincuencia organizada) , y las sobrepoblaciones de los centros penitenciarios se plantea reformar el sistema penal que sea más eficaz y reduzca el índice delictivo así como permita la realización de los procesos más fáciles, de esta forma también se disminuiría la carga de trabajo en los tribunales; este nuevo sistema se pretende que sea basado desde la libertad del imputado y no desde su encarcelamiento. Sugiere como características la oralidad, lo acusatorio y lo adversarial, como principios rectores la inmediación, la publicidad, la contradicción, la concentración y la continuidad.

¿Por qué se ensayan cambios en vez de aplicar puntualmente las normas existentes, y en todo caso, por que se quiere construir un terreno que ha mostrado ser poroso y resbaladizo, en vez de plantear cimientos sólidos y suficientes para una verdadera obra de renovación y progreso? Es obvio que el problema de mayor relevancia en este ámbito es la impunidad; tiene que ver con la insuficiencia institucional, incapacidad y corrupción.

Una política criminal represiva conduce a “un endurecimiento desmedido de la medidas penales y a la adopción de medidas irracionales, incluyen las medidas de excepción o de emergencia para cierto tipo de delincuencia tienen la pretensión de alcanzar a un mayor número de delitos. Justifica principalmente por la pronta y expedita impartición de justicia, por la seguridad nacional y el patrimonio de la federación, y por atacar la estructura de la delincuencia organizada, que estas figuras son elevadas a rango constitucional, aun y cuando atacan y vulneran de manera evidente los derechos fundamentales de las personas acusadas por estas conductas. Por supuesto que una de esas figuras, es el arraigo

El Estado, en su trato con el ciudadano, debe atender a la norma más favorable para los derechos de éste. No esperemos que con el enjuiciamiento oral desaparezcan, la inseguridad y los secuestros, el delito tradicional y el crimen organizado, la violencia y la fraudulencia.

El sistema penal de la sociedad democrática confía en medios de control no punitivos; prefiere el Derecho penal mínimo, reduce el horizonte de los tipos penales y enfrenta la conducta ilícita con diversas reacciones jurídicas. El diagnostico que alentó la reforma de 2007 fue altamente crítico de la inseguridad pública en México y del sistema de justicia penal. Uno de los presupuestos fundamentales de esta reforma constitucional es que la protección a los derechos humanos y las herramientas para una efectiva persecución penal son perfectamente compatibles.

En México abrimos la puerta hacia el doble sistema cuando introdujimos en la Constitución un concepto importante que pudo quedar alojado en la norma secundaria: delincuencia organizada. En 1996, se expidió la Ley

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