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TEORIA SOCIOLOGICA


Enviado por   •  13 de Septiembre de 2021  •  Resumen  •  30.045 Palabras (121 Páginas)  •  144 Visitas

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UNIDAD 1:

Texto: Giddens, A. Sociología. Cap. 1

Conceptos básicos: sociología-ciencia-objetividad.

Términos importantes: creencias de sentido común- reproducción social-preguntas fácticas-transformación social-preguntas comparativas-imaginación sociológica-preguntas sobre el desarrollo-antropología-investigación empírica-positivismo-preguntas teóricas-actividades significativas-consecuencias imprevistas-autoconocimiento.

Cap. 1, sociología: problemas y perspectiva.

La sociología es el estudio de la vida social humana, de los grupos y sociedades. Es una empresa cautivadora y atrayente, al tener como objeto nuestro propio comportamiento como seres humanos. El ámbito de la sociología es amplio, desde el análisis de los encuentros efímeros entre individuos en la calle hasta la investigación de los procesos sociales mundiales.

¿De qué trata la sociología? Algunos ejemplos

Amor y matrimonio

El amor expresa una atracción física y personal que dos individuos sienten el uno por el otro. El enamorarse nos inclinamos a pensar, deriva de sentimientos y emociones humanos universales. Parece del todo natural que una pareja que se enamora desee formar un hogar, y que busquen su realización personal y sexual en su relación. La idea del amor romántico no se extendió en Occidente hasta fecha bastante reciente, y no ha existido jamás en la mayoría de las otras culturas. En la Edad Media, y durante siglos después de ella, las personas se casaban sobre todo para perpetuar la posesión de un título o de una propiedad en las manos de la familia, o para tener hijos que trabajaran la granja familiar. Una vez casados, puede que en ocasiones llegaran a ser compañeros muy unidos; sin embargo, esto sucedía después del matrimonio, pero no antes. Existían relaciones sexuales fuera del matrimonio, pero en éstas no intervenían demasiado los sentimientos que asociamos con el amor. El amor se consideraba en el mejor de los casos, como una debilidad necesaria, y, en el peor, como una especie de enfermedad. Las relaciones entre el marido y la mujer en los círculos aristocráticos a menudo eran frías y distantes.  Los ricos vivían en grandes casas. Cada uno de los esposos tenía su propio dormitorio. Ni el amor romántico ni su asociación con el matrimonio pueden entenderse como características dadas de la vida humana, sino que están conformadas por influencias sociales más amplias. Éstas son las influencias que los sociólogos estudian. La sociología demuestra la necesidad de adoptar una perspectiva mucho más amplia sobre las razones que nos llevan a actuar como lo hacemos.

Salud y enfermedad

Consideramos la salud y la enfermedad como cuestiones relacionadas únicamente con la condición física del cuerpo. Sin embargo, los factores sociales tienen de hecho un efecto profundo sobre la experiencia y la aparición de las enfermedades. Otras sociedades piensan que la enfermedad, e incluso la muerte, están producidas por hechizos, no por causas físicas susceptibles de tratamiento. En nuestra sociedad, los miembros de la Christian Science rechazan muchas de las ideas ortodoxas sobre la enfermedad, en la creencia de que en realidad somos seres espirituales y perfectos hechos a la imagen de Dios, y que la enfermedad proviene de un mal entendimiento de la realidad. Las probabilidades de contraer enfermedades graves como afecciones cardíacas, cáncer o neumonía están muy influidas por características sociales. Cuanto mejor posición económica tengan las personas, menores son las probabilidades de que sufran enfermedades graves en un momento cualquiera de sus vidas. Además, existen roles sociales muy definidos acerca de cómo se espera que nos comportemos cuando caemos enfermos. Una persona enferma queda excusada de muchos o de todos los deberes normales de la vida cotidiana. Es probable que si se piensa que alguien sufre sólo de una forma de debilidad relativamente benigna, o su enfermedad no se ha identificado con precisión, se considere a esa persona un enfermo fingido.

Otro ejemplo: crimen y castigo

Las ejecuciones históricas de épocas anteriores estaban calculadas para maximizar el período de agonía del condenado y su conciencia durante éste (aplastar hasta la muerte mediante una carga progresivamente pesada situada sobre el pecho, romper al condenado en la rueda, la crucifixión, el estrangulamiento, la hoguera, el cortar tiras de carne, apuñalar partes no vitales del cuerpo, estirar y cuartear, y otras técnicas semejantes consumían períodos de tiempo prolongados). Las ejecuciones frecuentemente se llevaban a cabo frente a extensas audiencias, práctica que persistió hasta bien entrado el siglo XVIII en algunos países. A los condenados a muerte se les paseaba por las calles en un carro abierto, para que se encaminaran a su fin como parte de un espectáculo con buena publicidad. Los verdugos eran celebridades públicas, y en ocasiones tenían la fama y seguimiento que se prodiga a las estrellas de cine en los tiempos modernos. Hoy en día encontramos estos modos de castigo totalmente repelentes. Nuestro sistema penal está basado en el encarcelamiento más que en infligir dolor físico, y en la mayoría de los países occidentales la pena de muerte se ha abolido por completo. ¿Por qué cambian las cosas? ¿Por qué sentencias de encarcelamiento reemplazan a formas de castigo más antiguas y violentas? Se supone que nosotros nos hemos humanizado. Pero para un sociólogo, esta explicación no es convincente. El uso público de la violencia como método de castigo estuvo, establecido en Europa durante siglos. Las personas no cambian súbitamente sus actitudes hacia tales prácticas «sin más ni más»; intervienen influencias sociales más amplias, relacionadas con importantes procesos de cambio que se dieron en ese período. Las sociedades europeas se estaban industrializando y urbanizando. El antiguo orden rural estaba siendo rápidamente reemplazado por un orden en el que cada vez más gente trabajaba en fábricas y talleres, trasladándose a las áreas urbanas en expansión. El control social sobre las poblaciones urbanas no podía mantenerse mediante los antiguos métodos de castigo, sólo eran apropiados en comunidades reducidas. Las prisiones se desarrollaron como parte de una tendencia general hacia el establecimiento de organizaciones en las que los individuos se mantenían «encerrados y apartados» del mundo externo, como una forma de controlar y disciplinar su comportamiento. Entre los que eran encerrados al principio no sólo se contaban delincuentes, sino vagabundos, enfermos, personas sin empleo, débiles mentales y locos. Las prisiones sólo de forma gradual empezaron a separarse de los manicomios y de los hospitales para los enfermos físicos. En las prisiones se suponía que los delincuentes se «rehabilitaban» para convertirse en buenos ciudadanos. El castigo del crimen se orientó a crear ciudadanos obedientes. Estos procesos crearon las sociedades en las que vivimos hoy.

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