Violencia Contra Las Mujeres
Enviado por kludia7 • 9 de Mayo de 2014 • 1.672 Palabras (7 Páginas) • 308 Visitas
LA VIOLENCIA CONTRA LAS MUJERES.
Aunque la violencia contra las mujeres no es un fenómeno nuevo, en los últimos
años se ha desarrollado un proceso de denuncia, discusión, visibilización y toma de
conciencia sobre este problema, pasando de considerarlo como cuestión privada a
entenderlo como problema social, y en este proceso han tenido mucho que ver el
movimiento feminista y los grupos de mujeres (Bosch y Ferrer, 2000; Ferrer y Bosch,
2006).
Tradicionalmente, la consideración de la violencia contra las mujeres (y
particularmente de aquella ocurrida en el marco de la pareja) como fenómeno privado
ha propiciado que fuera entendida como un derecho del varón, como algo normal e
incluso legítimo. Posteriormente, pasó a ser considerada como algo inadecuado o
inconveniente pero que formaba parte de la vida íntima y en lo que, por tanto, no había
que intervenir. Todo ello ha contribuido a que la resistencia de las mujeres que la
padecen a denunciar, tanto por miedo como por vergüenza y desconfianza hacia las
posibles ayudas a recibir, y, en definitiva, a que éste haya continuado siendo, en gran
medida, un grave problema “oculto”, donde las cifras oficiales posiblemente sólo son la
punta del iceberg. La consideración de la violencia contra las mujeres como problema
social ha facilitado su visibilización tanto en lo que se refiere a los casos individuales
(que han alcanzado presencia en los medios y en los registros oficiales) como a nivel
global (con la elaboración y/o perfeccionamiento de los métodos de recogida de datos,
el diseño de encuestas ad hoc, etc.).
Además, la consideración de la violencia contra las mujeres como problema
social ha traído consigo también una nueva forma de abordar su explicación. Así, si
desde su análisis como problema individual se entendía esta violencia como
consecuencia de alguna situación o circunstancia particular (situación socioeconómica,
psicopatología del agresor, etc.), desde su consideración como un problema social pasa
a entenderse que tiene su origen último en unas relaciones sociales basadas en la
desigualdad, en un contrato social entre hombres y mujeres que implica la dominación
de un género (el femenino) por parte del otro (el masculino), base de la estructura
patriarcal. Y, desde esta nueva consideración, son necesarias actuaciones profundas a
nivel social que impliquen un nuevo contrato social, con nuevas medidas legislativas,
modificaciones los programas educativos, etc., para afrontar el problema y superar sus
consecuencias.
Por lo que se refiere a la definición de la violencia contra las mujeres, de
acuerdo con las recomendaciones de los diferentes organismos nacionales e
internacionales que se han ocupado del tema (Declaración de la Asamblea General de
Naciones Unidas sobre la eliminación de la Violencia contra la Mujer, Resoluciones del
Parlamento Europeo sobre Violencia contra las Mujeres, Programa de Desarrollo y
Salud en la mujer de la Organización Mundial de la Salud, recomendaciones del
Instituto de la Mujer, etc.), este término se refiere a toda forma de violencia ejercida
mediante la fuerza física o la amenaza de recurrir a ella, cuyo denominador común es
ser ejercida contra las mujeres por su condición de tales.
En este marco, la “Declaración sobre la eliminación de la violencia contra la
mujer” (Resolución de la Asamblea General 48/104, ONU, 1994) constituye el primer 4
instrumento internacional de derechos humanos que aborda de forma explícita este
problema. Según esta Declaración la violencia contra las mujeres es
"todo acto de violencia basado en la pertenencia al sexo femenino que tenga o
pueda tener como resultado un daño físico, sexual o psicológico para la mujer, así
como las amenazas de tales actos, la coacción o la privación arbitraria de la libertad,
tanto si se producen en la vida pública como en la vida privada”.
Esta violencia incluye
"la violencia física, sexual y psicológica en la familia, incluidos los golpes, el
abuso sexual de las niñas en el hogar, la violencia relacionada con la dote, la violación
por el marido, la mutilación genital y otras prácticas tradicionales que atentan contra
la mujer, la violencia ejercida por personas distintas del marido y la violencia
relacionada con la explotación; la violencia física, sexual y psicológica al nivel de la
comunidad en general, incluidas las violaciones, los abusos sexuales, el hostigamiento
y la intimidación sexual en el trabajo, en instituciones educacionales y en otros
ámbitos, el tráfico de mujeres y la prostitución forzada; y la violencia física, sexual y
psicológica perpetrada o tolerada por el Estado, dondequiera que ocurra”.
En opinión de autoras como Noeleen Heyzer (2000), esta Declaración marcó un
hito histórico por tres razones básicas: a) En primer lugar porque colocó a la violencia
contra las mujeres en el marco de los Derechos Humanos, explicitando que las mujeres
tienen derecho a disfrutar de los derechos y libertades fundamentales y a que éstos sean
protegidos, y que las diferentes formas de violencia contra las mujeres son violaciones
de los derechos humanos. Es decir, se reconoció de forma explícita y sin ambages que
los derechos de las mujeres son derechos humanos y que la violencia ejercida contra las
mujeres por el hecho de serlo es una violación de esos derechos, con lo que
...