Ceguera por falta de atención

Ceguera por falta de atención:

La ceguera por falta de atención es la incapacidad de una persona de notar un estímulo inesperado en el campo visual, cuando la persona está realizando otras tareas que demandan atención. Está categorizado como un error de la atención y no está asociado con ninguna deficiencia visual. Esto generalmente sucede porque estamos sobresaturados con estímulos y no es posible prestarle atención a todos los estímulos del ambiente. Se han realizado múltiples experimentos para demostrar este fenómeno.

Incapacidad de una persona de notar un estimulo en el campo visual, mientras realiza otras tareas que requieren atención. Generalmente sucede cuando estamos sobresaturados de estímulos y no es posible prestarles atención a todos.

Experimentos realizados sobre ceguera por falta de atención

La prueba del Gorila Invisible

El estudio más conocido que demuestra la ceguera por falta de atención es el del Gorila Invisible, conducido por los doctores en psicología Daniel Simons de la Universidad de Illinois y Christopher Chabris de la Universidad de Harvard. En este estudio, una versión modificada de los estudios previamente realizados por Ulric Neisser, Neisser y Becklen, en 1975, se le pide a los sujetos mirar un video corto donde aparecen dos grupos de personas vestidos de blanco o negro que hacen pases con una pelota. Se le pide a los sujetos que cuenten los pases del grupo vestidos de blanco, ignorando a los de de negro, o que cuenten los pases hechos con rebote o sin rebote. En las diferentes versiones del video, hay un momento donde una persona camina entre los dos grupos, llevando un paraguas o vistiendo un disfraz de gorila. Después de ver el video, se les pregunta a los sujetos si vieron algo fuera de lo común, en la mayoría de los casos, 50% de los sujetos afirman que no había ningún "gorila", llegando incluso a acusar a los investigadores de cambiarles el video cuando les vuelven a mostrar el video, esta vez sin contar para que no sufran del efecto de la ceguera. La incapacidad de ver la persona con el paraguas o disfrazada es atribuida a la incapacidad de prestar atención a los alrededores mientras los sujetos se encuentran en la tarea de contar los pases. Estos resultados indican que la relación entre lo que está en el campo de visión y la percepción está basada mucho más en la atención de lo que antes se pensaba.

El experimento del payaso en el monociclo

Este experimento fue realizado para evaluar cómo los celulares contribuían a la ceguera por falta de atención en acciones básicas como caminar. Los particimantes eran divididos en cuatro grupos: hablando por teléfono, escuchando un reproductor mp3, caminando solos o en pares. El estudio demostró que aquellos que estaban hablando por teléfono eran los que menos notaban la presencia del payaso. Este experimento fue diseñado por Ira E. Hyman, S. Matthew Boss, Breanne M. Wise, Kira E. Mckenzie yJenna M. Caggiano en la Western Washington University.

Clasificaciones de la atención:

• Interés del sujeto

• Selectiva: Capacidad de atender a uno o dos estímulos particulares sin confundirlos con otros. Por ejemplo: Ver una película donde hay personas realizando diferentes actividades.
• Dividida: implica que hay varios elementos que entran en el campo atencional de la persona. Por ejemplo leer un libro en el colectivo, mientras se va observando la parada en la que debería bajarse.

• Origen y naturaleza de los estímulos:

• Interna: la atención puede ser de tipo propioceptiva (sensaciones internas) o bien que tenga que ver con nuestros recuerdos, sentimientos o cuestiones similares.
• Externa: puede ser determinada por estímulos en el ambiente.

• Modalidad sensorial:

• Visual: La atención visual está más relacionada con los conceptos espaciales. Por ejemplo: ver una película, ver por donde caminas, ver los diferentes entornos a nuestro alrededor.
• Auditiva: está más relacionada con parámetros temporales. Por ejemplo: escuchar la radio, escuchar los ruidos en la calle, etc.

• Control sobre la atención:

• Concentrada: la atención está focalizada en una cuestión o situación particular.
• Dispersa: la atención es dirigida al contexto general que nos rodea.

• Actitud del sujeto:

• Voluntaria: ocurre cuando el individuo hace un esfuerzo por concentrar su atención en un estimulo.
• Involuntaria: la atención se produce de forma automatizada, ya sea por un habito establecido u otra razón.

• Grado de conciencia:

• Consciente: corresponde a un nivel superior de consciencia, porque es voluntaria e intencional, y puede detenerse en los objetos focales, obteniendo imágenes mentales claras y definidas que sirven al conocimiento y el autoconocimiento. Desarrollar un nivel cada vez mas consciente de atención, significa desarrollar un nivel cada vez más elevado de conciencia.
• Inconsciente: corresponde a un nivel inferior de conciencia, porque es involuntaria, automática o mecánica, y dispersa.

Es necesaria para la supervivencia física, pues te permite responder automáticamente a los peligros y amenazas del ambiente.

Los procesos atencionales suelen tener tres fases: inicio, mantenimiento y cese.

Fases de la atención:

• Inicio: se produce al desencadenarse un cambio en la estimulación ambiental. Los receptores sensoriales se orientan hacia la función de estimulación. Ese inicio se debe a una decisión voluntaria de la persona. Este comienzo de atención suele incluir también la selección de estrategias atencionales adecuadas para la tarea que pretendemos realizar.  

Inicio: Cambios en la estimulación ambiental y respuesta orientada. Incluye atención seleccionada voluntariamente por una persona.

• Mantenimiento: en esta fase debemos focalizar la atención en el objeto durante un cierto tiempo (es variable). Después de 4 o 5 segundos después de la fase de inicio. Una cuestión fundamental es que la duración de la fase sea adecuada a la tarea que se pretende realizar.  En esta fase influyen la intensidad, la frecuencia y el ritmo de los estimulos. Si son intensos, la respuesta de orientación es intensa y se termina produciendo menos habituación, lo que contribuye a mantener a atención.

Mantenimiento: Focalización en un objeto en un tiempo adecuado. En esta fase influyen la intensidad, la frecuencia y el ritmo de los estímulos.

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