Ciencia Y Fe
Enviado por 160293mon • 5 de Octubre de 2012 • 351 Palabras (2 Páginas) • 594 Visitas
La actitud, un término definido principalmente desde la Psicología, puede entenderse de diversas formas. Entre ellas, se le considera como la postura que adopta el cuerpo humano según los diferentes movimientos del ánimo, sin embargo, la forma más común de entender aquello que se conoce por actitud es aquella disposición anímica del ser humano expresada de algún modo en particular.
Este concepto proviene de la palabra latina “actitudo” y, como ya se mencionaba, se define desde la psicología como aquella motivación social de las personas que predisponen su accionar hacia determinadas metas u objetivos. Existen actitudes personales que sólo guardan relación con si mismo, mientras que existen ciertas actitudes sociales que inciden en las conductas de un grupo o colectivo.
http://www.misrespuestas.com/que-es-la-actitud.html
En psicología, la palabra aptitud refiere a las condiciones psicológicas de una persona que se vinculan con sus capacidades y posibilidades en el ámbito del aprendizaje. El concepto tiene su origen en el latín aptus.
Por ejemplo: “Mi hijo tiene una gran aptitud para la música”, “Buscamos gente con aptitud para la generación de nuevas oportunidades comerciales”, “Lo siento, pero no tengo aptitud para este tipo de trabajo”.
http://definicion.de/aptitud/
Llas cuatro virtudes cardinales: prudencia, justicia, fortaleza y templanza.
Las virtudes humanas se arraigan en las virtudes teologales que adaptan las facultades del hombre a la participación de la naturaleza divina. Son disposiciones estables del entendimiento y de la voluntad que regulan nuestros actos, ordenan nuestras pasiones y guían nuestra conducta según la razón y la fe.
Las virtudes morales crecen mediante la educación, mediante actos deliberados y con el esfuerzo perseverante. La gracia divina las purifica y las eleva. Pueden agruparse en torno a las cuatro virtudes cardinales: prudencia, justicia, fortaleza y templanza.
Prudencia
Dispone la razón práctica para discernir, en toda circunstancia, nuestro verdadero bien y elegir los medios justos para realizarlo.
Justicia
Consiste en la constante y firme voluntad de dar a Dios y al prójimo lo que les es debido.
Fortaleza
Asegura, en las dificultades, la firmeza y la constancia en la práctica del bien.
Templanza
Modera la atracción hacia los placeres sensibles y procura la moderación en el uso de los bienes creados.
...