Comida Enlatada

Si todo se mira con el mismo matiz, entonces nada dejara de ser gris. Hoy en día existe mucha controversia en cuanto al proceso que del enlatado de la comida. Por lado tenemos a aquellos fanáticos de lo orgánico, quienes aseguran que su almacenamiento y su proceso no son seguros y que puede llegar a dañar al ser humano que lo consuma. Es entonces valido preguntarnos, ¿Qué tan cierto es lo que escuchamos y que tan dañino puede ser el comer algo enlatado?

Si nos ponemos a analizar todo lo que hemos escuchado acerca de los alimentos enlatados, nos daríamos cuenta de una triste verdad. Todos los argumentos que se nos mencionan son siempre los mismo, si bien nunca varían de argumentos creo yo que es justo y valido repasar sus puntos para así poder llegar a una conclusión imparcial acerca del consumo de estos productos.

El primer punto que quisiera analizar es el que casi siempre se menciona primero al nombrar las desventajas de los productos enlatados, el alto contenido en sodio y azúcar. Este punto, creo yo, es uno de los más validos que se pueden mencionar al momento de una discusión, si bien es cierto que un alimento que se prepara de manera natural no contiene tanto sodio o azúcar, cabe mencionar que no todos los alimentos enlatados se conservan con sal o almíbar en el caso de las frutas. Es cierto que el sodio puede aumentar los niveles de presión y que pude ser dañino para alguien que sufre de hipertensión, pero hay que ser objetivos en este punto. Muchos alimentos se conservan usando aceite en lugar de sal, en cuanto al almíbar hay que recordar que incluso en pueblos típicos se usa para conservar las frutas en tiempo de sequía, por lo que al parecer no es tan dañino como nosotros pensamos. Eso sí, siempre consumirlo con medida ya que el almíbar en exceso puede llegar a causar diabetes.

El siguiente punto que oigo mucho cuando se toca este tema es el hecho de que la comida enlatada tiene menos nutrientes que la comida fresca, esto casi siempre se menciona cuando se habla de frutas y de verduras. Este punto tiene en realidad muchas verdades, se sabe que si a una fruta o a una verdura se le quita la cascara perderá, entre otras cosas, fibra y en algunos casos la manera de enlatar puede hacer que pierda vitaminas; un ejemplo muy claro es el de los cítricos ya que se sabe que muchas verduras y frutas se tienden a hervir o a coser a cierta temperatura para poder ser enlatadas. En este proceso de cocción los cítricos llegan a perder la vitamina C, siendo esta la que contienen en mayor parte. Es entonces cuando uno se pregunta qué otra vitamina se podría estar perdiendo si esta estuviera en menor cantidad en el cítrico antes de ser enlatado.

El último punto que se menciona es el hecho de que hay alimentos como: el frijol o la papa, que no conservan su sabor original, esto se debe a que han estado en contacto con el metal o con el proceso de enlatado que se lleva acabo para su elaboración, pero entonces es cuando llega la pregunta. ¿Cómo se va a lograr una mayor variedad de productos enlatados, si solo se quiere ver lo negativo de su consumo?

Después de que estos puntos fueron expuesto, llega entonces el punto de ver algo que muy pocos ven, y eso es el hecho de que la comida enlatada puede llegar a tener muchos puntos a favor y llegar a desmentir mitos que afectan la manera en que la sociedad las ve.

Uno de estos puntos importantes, se puede decir, se deriva de uno de los contras de los puntos anteriores. Se sabe que los alimentos enlatados, aumentan su contenido en sodio y en azúcar, pero también lo hacen en la grasa. Esto en pocas palabras querer decir que, por ejemplo, en las

...