Como es la Determinación de potabilidad de agua

1. Introducción

El agua es  un compuesto químico inorgánico formado por dos átomos de hidrógeno (H) y uno de oxígeno (O) es inodora, incolora, e insípida, es decir, no tiene un olor propio, no tiene color ni sabor. Su importancia reside en que participa en casi la totalidad de los procesos químicos que suceden en la naturaleza,  por ejemplo participa en el metabolismo y en el transporte de sustancias en el organismo. No solo en organismos vivos sino también en la superficie no organizada de la tierra, así como los que se llevan a cabo en laboratorios y en la industria, tienen lugar entre sustancias disueltas en agua.

A pesar de que el agua se encuentra en gran cantidad en el mundo, el ser humano solo consume agua potable que es al agua que puede ser consumida sin restricción para beber o preparar alimentos esta pasa por un proceso de potabilización. A partir  del agua potable surgió un mercado de agua embotellada que no es más que agua potable en botellas individuales y que se vende al menor o por mayor.

Muchos países, especialmente los países desarrollados, regulan la calidad del agua embotellada a través de estándares del gobierno, normalmente utilizados para garantizar que la calidad del agua es segura y las etiquetas reflejan con precisión el contenido de la botella. En muchos países en desarrollo, sin embargo, tales normas son variables y suelen ser menos estrictos que los de las naciones desarrolladas.

Para determinar la calidad del agua potable se pueden hacer distintos estudio para determinar diferentes parámetros, como lo son el pH del agua, sus solidos totales, su conductividad, su contaminación microbiana, medidas de carbono total, cloruros, nitratos, nitritos etc. Para cada uno de estos parámetros se pueden realizar diferentes técnicas para encontrar sus valores en el agua.

En este trabajo se analizara una muestra de agua embotellada marca Aguafiel, se le realizaran diferentes estudios para determinas sus características químicas como pH, no se utilizaran estudios para determinar contaminantes microbiológicos, esto se hará para saber si esta marca de agua cumple con los valores adecuados para el consumo humano.

1. Antecedentes

El agua es un líquido incoloro, inodoro e insípido formado por dos átomos de hidrógeno y uno de oxígeno. Existen diferentes tipos de agua, entre ellos se encuentra el agua salada, dulce, dura, blanda, residuales, bruta, etc., pero uno de los tipos de agua más importante es el agua potable o para consumo. El agua embotellada es agua potable envasada en botellas individuales de consumo y venta al por menor o mayor. El agua puede ser agua glacial, agua de manantial, agua de pozo, agua purificada o simplemente agua del abastecimiento público de agua (el agua del grifo).

El abastecimiento de agua para uso y consumo humano con calidad adecuada es fundamental para prevenir y evitar la transmisión de enfermedades gastrointestinales y otras, para lo cual se requiere establecer límites permisibles en cuanto a sus características bacteriológicas, físicas, organolépticas, químicas y radiactivas. Muchos países, especialmente los países desarrollados, regulan la calidad del agua embotellada a través de estándares del gobierno, normalmente utilizados para garantizar que la calidad del agua es segura y las etiquetas reflejan con precisión el contenido de la botella. En muchos países en desarrollo, sin embargo, tales normas son variables y suelen ser menos estrictos que los de las naciones desarrolladas (Guerrero y Shifter, 2011).

Una de las normas que se encarga de establecer las especificaciones con las que debe de cumplir el agua para consumo humano es la NOM-201-SSA1-2002, en la cual se encuentran los valores de referencia sobre las concentraciones de los componentes que puede tener el agua sin ocasionar un riesgo para la salud. Por lo tanto, se deben llevar a cabo inspecciones sanitarias periódicas y análisis de muestras de agua para determinar si las empresas de abastecimiento de agua están cumpliendo con estos límites permisibles ya establecidos. Además, en las plantas purificadoras de agua se deben llevar registros de las pruebas efectuadas a la materia prima (agua), producto en proceso, producto terminado, lavado de envases, mantenimiento sanitario del equipo, líneas de producción, accesorios y número de lote asignado al producto, los cuales deben conservarse por un año a disposición de la autoridad sanitaria.

Otra de las normas que establece las disposiciones y especificaciones sanitarias que deben cumplir el agua envasada para consumo humano, es la NOM-127-SSA1-1994 que indica que algunas especificaciones organolépticas y físicas que debe de tener el agua potable son: el olor, el cual debe ser inodoro, su sabor deberá ser insípido, su pH de 6.5 a 8.5, con un color máximo de 20 unidades de color verdadero en la escala de platino cobalto, etc.  

Así mismo, la NOM-041-SSA1-1993 menciona que el producto debe contener únicamente los siguientes límites máximos de mg/L de ciertos químicos: alcalinidad total 300,00 como CaCO3, aluminio 0.20, arsénico 0.05, bario 0.70, cadmio 0.005, cianuros como CN- 0.05, cloro residual libre después de un 0,10 tiempo de contacto mínimo de 30 minutos, cloruros como Cl- 250.00, cobre 1.00, cromo total 0.05, dureza total como CaCO3 200.00, fenoles o compuestos fenólicos 0.001, fierro 0.30, fluoruros como F- 0.70, manganeso 0.05, mercurio 0.001, nitratos como N 10.00, nitritos como N 0.05, nitrógeno amoniacal como N 0.50, nitrógeno orgánico total como N 0.10, oxígeno consumido en medio ácido 2.00, ozono al envasar 0.40, plata 0.05, plomo 0.02, sólidos disueltos totales 500.00, sulfatos como SO4= 250.00, sustancias activas al azul de metileno 0.50,  trihalometanos totales 0.10, zinc 3.00.

Otros de los parámetros que constituyen una guía muy útil para evaluar los aspectos generales de la calidad del agua son por ejemplo la medición del cloro residual, ya que indica la presencia de un remanente del desinfectante capaz de asegurar la inhibición o muerte de las bacterias patógenas. Además del cloro residual, en un programa de vigilancia y control de la calidad del agua también es práctico medir la turbiedad y el pH, los cuales influyen en la desinfección, además la turbiedad está relacionada con la cantidad de partículas y se ha demostrado que, al menor incremento de la turbiedad en el agua tratada, aumenta el riesgo de transportar partículas contaminantes (Aurazo, 2004).

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