EL COLTAN
Enviado por dulcers • 29 de Noviembre de 2013 • 1.970 Palabras (8 Páginas) • 330 Visitas
INTRODUCCION
En la presente investigación abordaremos el tema del Coltan, llamado también oro azul, barro del petróleo o el nuevo maná, los lugares en donde se encuentra, yacimientos, usos que se le da a dicho metal y los problemas sociales causados por el descubrimiento de este mineral.
Debido a los múltiples usos y beneficios en la industria tecnológica, este mineral se convirtió en uno de los compuestos químicos más apetecidos a nivel mundial, no solo por su aporte a nivel técnico o por su condición de ser un recurso no renovable escaso, sino por el alto costo que implica acceder a este.
Todo esto ha desatado en diferentes partes del mundo conflictos armados entre países por apoderarse de los yacimientos de este mineral generando olas de terror y muerte, condiciones laborares de semi esclavitud de adultos y niños, especialmente en lugares como la República Democrática del Congo, Ruanda, Uganda, entre otros.
Este metal fue recientemente encontrado en Colombia y ha generado discusiones y controversias debido a que las minas más grandes identificadas en nuestro territorio se encuentran ubicadas en la zona de reservas indígenas de la Orinoquía, y en la actualidad no se cuenta con una la legislación nacional que regule la exploración de este mineral, dejando a estas comunidades en condiciones vulnerables, lo que ha permitido que los grupos alzados en armas y terceros ajenos a nuestro país se beneficien y sigan enriqueciéndose con nuestros recursos.
COLTAN
El mineral coltán, es el causante de un conflicto bélico que se ha cobrado la vida de
Cuatro millones de personas desde 1997 y la desaparición de poblaciones de gorilas
en la república democrática del Congo.
La extracción de Coltán, un mineral muy escaso y que es empleado para uso de alta
tecnología; ha provocado un largo conflicto bélico interno en el país, que desde 1997
(Una década) hasta nuestros días, ha causado más de cuatro millones de muertes. El
control por las minas de este mineral escaso, así como por la extracción de diamantes,
ha originado que este conflicto durara tantos años y se cobrase tantas muertes ante los
ojos cerrados de la comunidad internacional. Han existido y existen aún verdaderas
hambrunas en muchas regiones de este país que soporta una deuda externa casi
insostenible. Sin embargo, es uno de los países con mayor riqueza, siendo “La cuenca
del río Congo”, la segunda selva más importante de la tierra.
En las montañas del parque Nacional Kakuzi Biega, donde se extrae el Coltán, han
acabado además con la vida de cientos de gorilas, perdiéndose para siempre poblaciones
muy importantes para la supervivencia de este simio en peligro de extinción. Además
para la declaración de Parque Nacional, se expulsó a tribus indígenas abandonándolas a
su suerte sin que nada se haga por ellas. Los niños mueren de enfermedades y
malnutrición cada día porque son incapaces de conseguir un hospital mejor equipado.
Miles de civiles han huido al interior de la selva, donde se enfrentan al hambre y a las
enfermedades. En menos de una década se calcula que han muerto cuatro millones de
personas, sobre todo de hambre y enfermedades causadas por el conflicto. Ha sido la
guerra que más muertes ha generado desde la segunda guerra mundial, con mil víctimas
mortales diarias. Otros miles acabaron con sus manos mutiladas, violaciones a menores
y hasta la incalificable aberración de obligar a padres a cometer canibalismo con sus
propios hijos una vez asesinados. Un verdadero infierno en la que el mundo cerró los
ojos por claros intereses económicos. Mercenarios extranjeros alimentaban los
enfrentamientos cambiando armas por los preciados metales, mercenarios pagados por
el mundo civilizado, el mismo que utilizaba las materias primas con olor a muerte, el
mismo que se horrorizó de las matanzas, el mismo que mando a los cascos azules a no
hacer nada.
El Proyecto Gran Simio ha pedido tanto al gobierno de España como a la Comunidad
Internacional, que se cancele la deuda externa de este país bañado en sangre y que se
ayude a su población a combatir el hambre y las enfermedades, pidiendo a cambio a su
gobierno, un respeto por los derechos humanos, apoyo eficaz a la población civil y la
conservación de su valiosa riqueza natural que no sólo beneficia a las poblaciones de
grandes simios (bonobos, chimpancés y gorilas) y de otros seres vivos, sino también a la
humanidad.
El nombre ‘coltán’ procede de la abreviatura de columbita y tantalita, minerales que
contiene este tipo de roca. De estos minerales se extrae el tantalio y el niobio, utilizados
en distintas industrias de aparatos eléctricos, centrales atómicas, misiles, fibra óptica y
otros, aunque la mayor parte de la producción se destina a la elaboración de
condensadores y otras partes de los teléfonos móviles.
La guerra del Coltán.
En realidad el mayor beneficiario del coltán congoleño durante la guerra fue Ruanda. A
partir del año 2001 la ONU había enviado a la zona un ‘grupo de expertos’. Los
informes por ellos elaborados proponían para acabar con la guerra la declaración de un
embargo en la zona tanto de armas como de las importaciones y exportaciones de oro,
diamante y coltán sobre los países invasores. De la misma forma, proponían sancionar
tanto a los países como a las empresas que incumplieran con el embargo. También
aconsejaba una congelación de los activos financieros de los movimientos rebeldes
(aliados de los países invasores) y sus líderes y que se estableciera un proceso de
certificación de origen del diamante, oro y coltán.
Los innumerables informes de diversas ONG o de la propia ONU que iban saliendo a la
luz, y que acusaban a Ruanda y Uganda del expolio de las riquezas minerales del
Congo, permitieron una cierta presión internacional y el establecimiento de listas negras
de empresas que operaban en la zona. Así 34 empresas (27 occidentales) fueron
acusadas de importar coltán y casiterita y se consiguió que la compañía aérea belga
Sabena suspendiese el transporte del mineral que realizaba desde Kigali (capital de
Ruanda) a Bruselas. Sin embargo, otras rutas alternativas
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