Glándula Mamaria Humana

GLÁNDULA MAMARIA HUMANA

Octubre 2.012

Glándula Mamaria

La glándula mamaria humana segrega leche, alimento natural del recién nacido. Desde el punto de vista anatómico, los principales componentes son el aparato lobuloalveolar, los conductos galactóforos, el tejido conectivo y el tejido adiposo. Se distinguen distintas etapas anatomofuncionales en la evolución de la glándula mamaria femenina: 1) la mama infantil; 2) la mama puberal; 3) la mama del embarazo, y 4) la mama de la lactancia.

La mama puberal aparece durante la adolescencia femenina por un proceso llamado mamogénesis (o desarrollo de la mama), que obedece a las llamadas hormonas mamotrópicas. Se caracteriza por la formación y ramificación de los conductos y el crecimiento mamario, especialmente del tejido conectivo y adiposo. Durante el embarazo se produce el desarrollo lobuloalveolar completo de la glándula mamaria, que queda así preparada para la secreción de leche (lactogénesis). Después del parto se inicia la lactación o secreción de leche, proceso que se conoce como galactopoyesis.

En condiciones normales, en los varones hay escaso desarrollo adicional en la vida posnatal y las glándulas permanecen en estado rudimentario.

El desarrollo y la secreción de la glándula mamaria es multifactorial, ambos fenómenos se deben a una combinación de factores genéticos y ambientales, dietéticos y humorales.

ANATOMÍA DE LA GLÁNDULA MAMARIA

Mama

Las mamas están situadas en la pared anterior del tórax, entre el esternón y una línea vertical tangente al límite anteromedial de la axila. En sentido vertical, se extienden desde la 2º a la 6º costilla. Son de forma casi hemisféricas en la mujer joven. Sin embargo su mitad inferior es comúnmente un poco más redondeada y saliente que su mitad superior. Esta disposición se acentúa con la edad y por influencia del embarazo. Inferiormente se separan de la pared torácica por un surco submamario.

Configuración externa de la mama

La porción central de la superficie anterior de la mama está ocupada por el pezón o papila mamaria, una prominencia de forma cilíndrica o cónica. La extremidad libre del pezón está recorrida por surcos y sembrada de pequeñas aberturas (que son los orificios de los conductos lactíferos), estos son los poros lactíferos, que varían entre diez y veinte.

El pezón está rodeado por una superficie pigmentada anular, la aréola. Su superficie es irregular por la presencia de pequeñas eminencias llamadas tubérculos de las glándulas areolares (de Morgagni) y constituidas por voluminosas glándulas sebáceas.

A la piel fina y móvil de la aréola y del pezón, están anexas las fibras musculares lisas subdérmicas, cuyo conjunto constituye el músculo areolar. Este músculo está formado por fibras circulares y fibras radiadas. (ver histología)

Glándula mamaria y Mama

Glándula mamaria

La glándula mamaria presenta casi la misma forma que la mama. Está constituida por varias glándulas independientes unas de otras, en número de 10 a 20; cada una de ellas constituye un lóbulo, y cada lóbulo se divide en lobulillos y en ácinos.

Cada lóbulo posee un conducto excretor o conducto lactífero (galactóforo), en el cual desembocan los conductos procedentes de los lobulillos. Se encuentran en número igual al de los lóbulos y se dirigen hacia el pezón. Presentan, antes de penetrar en el mismo, una dilatación llamada seno lactífero (ampolla galactófora); más allá del seno, los conductos lactíferos se dirigen hacia el vértice del pezón, donde se abren en los poros lactíferos (galactóforos).

Irrigación sanguínea y drenaje linfático

Las arterias que irrigan la mama provienen de las ramas torácicas de la arteria axilar, la arteria torácica interna (mamaria interna) y las arterias intercostales anteriores. Las ramas de estos vasos transcurren a lo largo de los conductos alveolares y se distribuyen en redes capilares perialveolares. Las venas siguen, en su mayor parte, el mismo camino que las arterias, para drenar en las venas axilar y torácica (mamaria) interna.

Los capilares linfáticos se localizan en el tejido conectivo que rodea los alvéolos. Los vasos linfáticos de mayor calibre drenan en los ganglios axilares, supraclaviculares y de las cadenas mamarias internas (paraesternales).

Drenaje linfático de la glándula mamaria

Inervación

Los nervios que llegan a la mama son ramas cutáneas anteriores y laterales de los nervios intercostales segundo a sexto. Los nervios conducen fibras aferentes y simpáticas hacia la mama y desde ella. La función secretora se halla en su mayor parte bajo control hormonal, pero en la secreción refleja de prolactina y oxitocina participan impulsos aferentes asociados con el amamantamiento (estimulación de receptores cutáneos durante el acto de succión).

EMBRIOLOGÍA DE LA GLÁNDULA MAMARIA

La primera manifestación de las glándulas mamarias se presenta en forma de un engrosamiento a manera de banda en la epidermis, la línea mamaria o pliegue mamario. En el embrión de siete semanas de edad esta línea se extiende a ambos lados del cuerpo, desde la base de la extremidad superior hasta la región de la extremidad inferior. Aun cuando la parte principal de la línea mamaria desaparece poco después de formarse, persiste un pequeño segmento en la región torácica y se introduce en el mesénquima (es el tejido conectivo embrionario laxo) subyacente. En este sitio forma de 16 a 24 brotes los cuales, a su vez, dan origen a pequeñas evaginaciones macizas. Hacia el final de la vida intrauterina los brotes epiteliales se canalizan y forman los conductos galactóforos, mientras que las evaginaciones constituyen los conductos de menor calibre y los alvéolos de la glándula. En un principio los conductos galactóforos desembocan en un pequeño hundimiento epitelial; poco después del nacimiento este hundimiento se convierte en pezón por proliferación del mesénquima subyacente.

Desarrollo embrionario

En condiciones normales, en los varones hay escaso desarrollo

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