Histología de tejido sanguíneo y sistema respiratorio.

TEJIDO SANGUINEO

Elementos que lo componen

Células según su estirpe

Células según la presencia/ausencia de gránulos de secreción

Descripción

Células o elementos formes

Eritrocitos

También llamados glóbulos rojos o hematíes son las células más abundantes de la sangre y se encuentran de 3 a 5 millones/mm3. Son discos bicóncavos anucleados y no poseen núcleo ni gránulos. Tiene un diámetro de 7.8 micras, un espesor de 2.6 micras en su borde y un espesor central de 0.8 micras.

Tiene una vida media de 120 días, después de los cuales el 90% aproximadamente sufre fagocitosis por los macrófagos del bazo, la medula ósea y e hígado. El resto se desintegra por vía intravascular.

Atraviesan con facilidad los capilares más estrechos ya que se pliegan sobre sí mismos, por ello se denominan deformables.

Los responsables de la forma y la capacidad de deformarse de los eritrocitos son proteínas especiales funcionalmente relacionadas con el citoesqueleto, en particular espectrina y actina.

La función esencial de los eritrocitos es el transporte de oxígeno y dióxido de carbono que se unen a la hemoglobina.

Leucocitos

Granulocitos

La denominación “granulocitos” se debe a la existencia de una gran cantidad de gránulos en el citoplasma y se dividen en tres:

Neutrófilo: son los leucocitos más abundantes ya que constituyen entre el 50 y 70%. Miden de 10 a 12 micras de diámetro. Se caracterizan por las múltiples lobulaciones de su núcleo, por esa razón, también reciben el nombre de neutrófilos polimorfonucleares o polimorfos. Los neutrófilos maduros tienen de 4 a 5 lóbulos unidos por finas hebras de material nuclear. Posee tres tipos de gránulos en el citoplasma, los cuales son: azurofilos o primarios, específicos o secundarios y terciarios; los cuales le sirven tanto para degradar compuestos de tejido conjuntivo, para poder migrar a los sitios donde son requeridos, como para destruir los componentes fagocitados. Son la primera línea de defensa del sistema inmunológico.

Eosinófilos: son muchos menos abundantes ya que solo constituyen de 1 al 3% de leucocitos totales. Miden de 11 a 14 micras de diámetro, estos suelen contener un núcleo bilobulado con heterocromatina abundante. Su principal característica son los gránulos ovalados que se tiñen con  eosina. Estos grandes y su eje mayor mide entre 0.5 y 1.5 micras, los cuales son de dos tipos: Específicos los cuales contienen un cuerpo cristaloide rodeado por una matriz electrodensa y los Azurofilos los cuales son los lisosomas. Se asocian con reacciones alérgicas, infestaciones parasitarias e inflamación crónica.

Basófilos: son muy escasos de 0 a 1% de linfocitos totales, miden de 8 a 11 micras de diámetro, posee un núcleo relativamente grande, con abundancia de heterocromatina, en forma de S el que difícilmente se puede observar debido a que su citoplasma está lleno de gránulos grandes y meta cromáticos. Se parece funcionalmente a los mastocitos.

Agranulocitos

Linfocitos: Son alrededor del 22 – 44% de los leucocitos totales, son las células específicas del sistema inmunitario. Pueden medir de 6 a 12 micras de diámetro varía según la actividad. Posee un núcleo de gran tamaño y por consiguiente el citoplasma es escaso. Se clasifican en: Linfocitos B que se originan en la médula ósea, son los responsables de la inmunidad humoral, constituyen de 20 a 30% de linfocitos en la sangre. Linfocitos T estos también se originan en la medula ósea pero migran  tempranamente hacia el timo, donde maduran, son los responsables de la inmunidad celular, constituyen de 60 al 80% de los linfocitos totales en sangre; Células NK o linfocitos granulares que son los responsables de la citotoxicidad.

Monocitos: son de 3 – 8% de leucocitos totales, son las células precursoras de macrófagos, miden de 12 – 18 micras de diámetro, son los más grandes tiene un núcleo en forma de riñón, grande y excéntrico, así como citoplasma ligeramente basófilo con abundantes lisosomas que le ayudaran con su función fagocítica.

plaquetas

También llamadas trombocitos se encuentran en la sangre en cantidades de 150 a 450 mal/mm3. Su principal función es la formación del coagulo primario, el cual sirve como anclaje para la formación del coagulo secundario o definitivo. Su vida media en la sangre alcanza los 7 a 10 días, después son degradados por los macrófagos, sobre todo en el  bazo.

Los trombocitos son fragmentos citoplasmáticos anuclados, ovales o discoides, de 2 a 4 micras de diámetro, con una estructura organizada, que se forman por estrangulación a partir de las prolongaciones celulares de los megacariocitos de la medula ósea. Poseen una cubierta de glucocaliz gruesa. Su citoplasma se divide en un granulómero central y un hialómero periférico. Puede dividirse en cuatro zonas: periférica, estructural, de organelos y membranosa

plasma

Es la parte liquida de la sangre y se encuentra formado por aproximadamente 90% agua, 9% de proteínas y 1% de sales, gases disueltos, glucosa, entre otros compuestos.

Las proteínas m as importantes del plasma son la albumina que es la responsable de la presión coloidal, las globulinas que incluyen las inmunoglobulinas y globulinas no inmunes, y fibrinógeno que interviene en la coagulación de la sangre. La mayoría de las proteínas plasmáticas son secretadas por el hígado.