Intoxicacion bacteriana

UNIVERSIDAD LE CORDON BLEU 

Carrera de Gastronomía y Gestión Empresarial

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INTEGRANTES:

Maria Coronado

7mo Ciclo de la Universidad Le Cordon Bleu

Intoxicación bacteriana

INTRODUCCIÓN:

En este documento trataremos el tema “ Intoxicación bacteriana por consumo de pescados y mariscos” en donde investigaremos acerca de las toxinas bacterianas más comunes que se encuentran en estos alimentos y que deben conocer los consumidores. Con la razón de saber con cuanta o qué información cuenta nuestra población acerca de la intoxicación bacteriana por consumo de pescados y mariscos. Nuestro método usado para esta investigación es cuantitativa ya que más adelante realizaremos una encuesta con el motivo de saber cuán informada está la población acerca de los síntomas y variedades comunes de toxinas bacterianas que pueden estar presentes en dichos alimentos. En donde, de acuerdo a los datos recopilados, se concretará un análisis de las respuestas y posteriormente se darán conclusiones acerca de nuestro tema de investigación.

OBJETIVOS :

Objetivo general:

Investigar el conocimiento que tienen los jóvenes de San Martín y Magdalena del mar a cerca de la intoxicación bacteriana por pescados y mariscos

Objetivos específicos:

• Determinar cuales son los síntomas más comunes presentados por la intoxicación bacteriana.

METODOLOGÍA:

La población serán jóvenes limeños y nuestra muestra serán los jóvenes limeños de 15-32.

El método usado para esta investigación es cuantitativa, realizamos una encuesta. En donde, de acuerdo a los datos recopilados, se concretará un análisis de las respuestas.

Marco teórico:

El pescado es una fuente importante de proteínas, minerales y vitaminas requeridas para la nutrición humana, sin embargo, todavía existen algunas especies que son dañinas para la salud humana y animal debido a su dieta, factores ambientales desfavorables y la presencia de toxinas.. Esta situación significa que las agencias y consumidores responsables de la pesca y distribución de especies acuáticas deben tener un amplio conocimiento de todo lo relacionado con estos temas para poder formular leyes y / o resoluciones que puedan proteger la salud de los consumidores y su salud. Los consumidores no deben ingerir estas especies reguladas. (Del Campo, 2014)

La comúnmente conocida como marea roja no es más que las microalgas, cuando las condiciones ambientales sean favorables para ellas, se multiplicarán incluso llegando a colorear el mar. Por lo general, a esto los trabajadores marinos atribuyen el nombre al florecimiento de microalgas Tóxicas, porque en muchos casos esta coloración rojiza de la superficie del mar es incompatible con los incidentes tóxicos donde se prohíbe la venta de mariscos. (Soliño, 2015). Estas algas son el motivo por el  cual se encuentran varias toxinas en mariscos, peces y moluscos.

Tanto los cocineros como los consumidores de mariscos y peces deben tener cuidado al usar o comer estos alimentos, debido a que estas toxinas pueden hacerles daño a su salud, así como mencionó Escobar en su tesis; “La ingestión de estos mariscos contaminados por acumulación de toxinas causa, en el ser humano, la intoxicación paralítica por mariscos” (Escobar, 2011). La intoxicación por consumir estos alimentos puede ser muy fuerte, por este motivo se debe tomar la precauciones necesarias cuando se desea preparar un plato con estos ingredientes marinos.

Aunque la mayoría de las especies de mariscos que se alimentan por filtración son relativamente insensibles a las toxinas STX, los mecanismos y respuestas de cada especie son diferentes. En condiciones similares, por ejemplo, los mejillones parecen acumular más toxinas PSP que las ostras. Los experimentos de alimentación de laboratorio han demostrado que la concentración de Alexandrium que los mejillones consumen rápidamente es igual o mayor que la concentración que hace que se detengan las bombas y las ostras. Los resultados de los estudios electrofisiológicos de los nervios de los animales bivalvos en la costa atlántica muestran que los nervios de las ostras son sensibles a las toxinas, mientras que los de los mejillones son relativamente insensibles (Mons et al, 1998).

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