Investigacion Del Cigarrillo

RIESGOS DEL CIGARRILLO

Los odontólogos conocen desde hace tiempo que las personas que fuman son más propensas al desgaste del esmalte y a desarrollar enfermedades de las encías. Sólo recientemente los investigadores pudieron probar que los fumadores reducen la capacidad de su organismo de combatir infecciones, demorando así el proceso de cicatrización del tejido gingival dañado.

Además, quienes consumen tabaco masticándolo, incorporan partículas abrasivas que, al mezclarse con la saliva, forman una pasta abrasiva que funciona como un papel de lija fina desgastando el esmalte.

Como si las enfermedades pulmonar y cardíaca no fueran suficientes razones para dejar de fumar, el tabaquismo tiene otras consecuencias negativas: mal aliento, la enfermedad periodontal, el cáncer bucal y un aumento de la incidencia de labio leporino y fisura palatina en niños cuyas madres fumaron durante el embarazo.

De acuerdo con un estudio realizado en Johns Hopkins University, el labio leporino o la fisura palatina, dos de las anomalías congénitas más comunes, se producen durante el desarrollo fetal temprano, a menudo antes de que la mujer sepa que está embarazada.

Las mujeres que fuman pueden excitar al gen que causa esta anomalía congénita. De acuerdo con el estudio, los niños portadores del gen responsable de la anomalía, que tenían madres fumadoras, tuvieron una probabilidad seis veces mayor de desarrollar una hendidura que aquellos del grupo control.

Un estudio publicado en el Journal of Periodontology muestra que los fumadores resultaron ser cuatro veces más propensos a padecer periodontitis que la gente que nunca había fumado. En total, cerca del 53 por ciento de los casos de gingivitis del estudio se atribuyó a actuales y ex fumadores.

Se descubrió también en el estudio lo siguiente: el 55 por ciento de los sujetos con periodontitis del estudio eran actuales fumadores y cerca del 22 por ciento eran ex fumadores. Los actuales fumadores de más de 1-1/2 paquetes de cigarrillos por día tenían una probabilidad de padecer periodontitis de alrededor de un 6 por ciento mayor que los no fumadores. Aquellos que fumaron menos de medio paquete diario tenían una probabilidad de casi el triple de desarrollar la enfermedad.

Fumar también restringe el crecimiento de los vasos sanguíneos, lo que demora la cicatrización del tejido gingival dañado.

PREVENCION DEL CIGARRILLO

La mejor manera de prevenir el tabaquismo es evitar que las personas se inicien en el consumo de cigarrillos. Los jóvenes deben ser críticos y tomar conciencia de la trascendencia que sus comportamientos tendrán para el futuro de su salud. La mayoría de ellos, sin embargo, sin darse cuenta pueden estar imitando comportamientos de maestros, padres, hermanos mayores, por tener estos una importante función modélica y educadora. Desgraciadamente, muchos docentes, médicos, enfermeros y otros profesionales de la salud son el grupo que más fuma, y en numerosas ocasiones ponen resistencia a ejecutar políticas de prevención del tabaquismo. Llama la atención cómo en las familias de padres fumadores los hijos, en general, también lo son y los padres no tienen fuerza moral para aconsejar a sus hijos de que no fumen, al igual que los docentes quienes a pesar de las disposiciones legales que rigen en las escuelas, fuman en las salas de maestros.

Está demostrado que no sirven acciones aisladas, muchas veces, hay un gran esfuerzo personal que desgasta y hasta desalienta a seguir en esta lucha. Por lo tanto se deben incluir:

Acciones de gobierno:

 Proteger a los no fumadores.

 Hacer menos accesible el tabaco a los jóvenes con aumento de precio.

 Prohibir totalmente la publicidad del tabaco.

 Investigar más acerca del consumo y prevalencia del tabaquismo en la población.

 Crear programas de prevención y educación tan atractivos como los que utilizan las tabacaleras.

 Promover la cesación tabáquica con programas efectivos y calificados aconsejando y apoyando a todos aquellos fumadores que deseen o deban dejar de fumar.

 Crear un ambiente social negativo para el hábito del tabaco, que sea socialmente un mal hábito e inaceptable.

La educación es un refuerzo importante de todas las medidas que puedan tomarse desde el gobierno y las instituciones. Es un pilar para el refuerzo positivo de actitudes saludables para la vida. Los programas deben desarrollarse a partir del 1° nivel de la escuela ya que a éstas edades se incorporan fácilmente los patrones de conducta. En cuanto a los jóvenes ya pueden y deben luchar contra el

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