Investigación de obesidad en la pandemia

INCREMENTO DE PESO DURANTE LA PANDEMIA EN PERSONAS DE MACUSPANA, TABASCO, MÉXICO

PRESENTACIÓN

Esta pandemia ha traído demasiados efectos negativos en la salud de las personas enfermedades ocasionadas por el virus, pero otro de las consecuencias negativas es que muchas personas han incrementado su peso por estar viviendo de una manera sedentaria.

Un estudio realizado por la Sociedad Mexicana de Obesidad señala que casi el 40% de los mexicanos declara haber aumentado de peso durante el confinamiento. La obesidad y el covid-19 se retroalimentan portal motivo cuidar el peso durante la pandemia debe ser un mensaje tan importante como el uso de mascarillas o el lavado de manos.

Si sumamos a la pandemia de covid-19, obesidad y los estragos que sobre el peso ha tenido el confinamiento, tenemos el contexto perfecto para que exista un deterioro importante de la salud global, con aumento de las enfermedades y la mortalidad no esperada en personas jóvenes y adultas a corto plazo.

JUSTIFICACIÓN

La obesidad amenaza cada vez mas a la salud de un mayor número de personas en esta pandemia, se ha convertido en un factor determinante en la aparición de numerosas enfermedades tales como la diabetes, hipertensión, enfermedades coronarias entre otras; incrementando con ello la prevalencia y los índices de morbimortalidad de la población adulta. Sin embargo, este tampoco es solo un problema de la edad adulta, por el contrario, existen numerosos estudios que revelan que el problema de la obesidad inicia en edades tempranas de la vida y se incrementa con estilo de vida sedentario como es el caso de la mayoría de personas en esta localidad.

Es por eso el motivo de esta investigación acerca del momento en el que el problema aparece que es fundamental detectar puntos clave en el desarrollo de la condición

        OBJETIVOS

PRINCIPAL:

 Determinar los factores de riesgo que han sido producidos por la obesidad en tiempos de confinamiento

ESPECIFICO:

• Conocer los efectos negativos que causa la obesidad
• Buscar formas de reducir el sedentarismo
• Nombre las enfermedades que propicia

HIPÓTESIS

El incremento de peso u obesidad se debe a la interacción de varios factores: hábitos alimenticios, falta de ejercicio físico, predisposición genética, y en algunos casos, pobreza y entorno social. Una dieta desequilibrada: Alimentos muy energéticos (en especial, alimentos grasos) de preparación rápida, las comidas irregulares y de ingesta rápida. Comer demasiado, por diversas razones: hábitos familiares, actividad profesional. La población es cada vez más sedentaria y tiene un gasto energético diario cada vez menor: se camina menos, se utilizan menos las escaleras, etc. Las actividades de ocio suponen menos ejercicio físico que antes. Estos factores en conjunto con el estrés del confinamiento producen la obesidad o incremento de peso.

PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA

Mas allá de sus ventajas vinculadas a evitar el contagio del covid-19, muchas son las consecuencias que trae aparejada la cuarentena prolongada en nuestro país. Una de ellas es el aumento de peso producido por la falta de actividad física, la mala alimentación y en muchos casos, por la angustia que provoca el encierro.

Se vio que en tiempo de cuarentena un 80% de las personas que fueron parte de una encuesta había aumentado entre 1 y 3 kilos. Un 4% gano mas de 5 kilos. En 2 meses es muchísimo y genera una alerta importante. Por eso los profesionales están mirando el cuadro de situación y las consecuencias que dejara en la población cuando el encierro se termine. Algunos ya se atreven a decirle la pandemia de la obesidad.

¿Por qué la gente gano tanto peso en tan poco tiempo? Las explicaciones son muchas, pero una respuesta parece apuntar a la falta de espacio para realizar actividades físicas. No todos viven en una casa con comodidades. Que permita tener una suerte de gimnasio en casa.

Pero también existe el ejemplo de la persona que, si tiene espacio, pero no realiza actividades por falta de estímulo. El aislamiento es preventivo y esta muy bien que así suceda. Pero los humanos, como seres sociales, necesitan de otro. La tecnología nos dio una sorpresa. Nos quejamos durante años, pero ahora podemos hacer hasta nuestro trabajo con una computadora o con un celular. No obstante, hay un aspecto, que es el contacto físico, que no lo podemos tener. Y no es menor esa falencia, porque en muchos casos se necesita del otro para formar parte de un grupo.

Afrontar el esperable repunte de las infecciones por coronavirus (SARS-Cov-2) y las nuevas posibles oleadas que llegarán en los próximos meses de esta pandemia con unos kilos de menos debería ser una prioridad para las personas con sobrepeso u obesidad, ya que esto les permitirá afrontar mejor esta posible infección.

MARCO TEÓRICO

En relación a los adolescentes, jóvenes y personas adultas, la OMS determina que en una tercera parte de esta población presenta sobrepeso y obesidad.

Investigaciones revelan que en un 20% de las calorías consumidas por adolescentes proviene de bebidas azucaradas, se estima que un porcentaje igual o superior puede provenir de comidas chatarras y golosinas.

La obesidad suele ser el resultado de ingerir más calorías de las que se queman durante el ejercicio y las actividades diarias normales.

La obesidad se caracteriza por un índice de masa corporal igual o superior a treinta. El síntoma principal es la grasa corporal excesiva, que aumenta el riesgo de padecer problemas de salud graves.

El tratamiento principal implica hacer cambios en el estilo de vida, por ejemplo, seguir una dieta más saludable y hacer ejercicio.

El estrés y la ansiedad es inherente a esta situación. La incertidumbre, la falta contacto el temor a enfrentarse o que se enfermen nuestros seres queridos y muchas cosas mas atentan contra una buena alimentación. Y aquí radica otro de los problemas que están llevando a la sociedad a desviarse del camino de la conducta alimenticia que tantos transitaban antes de esta pandemia.

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