ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

PSICOFISIOLOGÍA DE LOS INSTINTOS.


Enviado por   •  2 de Diciembre de 2016  •  Ensayo  •  1.745 Palabras (7 Páginas)  •  706 Visitas

Página 1 de 7

UNIDAD II: PSICOFISIOLOGÍA DE LOS INSTINTOS

EL INSTINTO SEXUAL: concepto, etiología, clasificación, diferencias entre sexo y sexualidad, formaciones cerebrales responsables, factores culturales, relación con la agresión, trastornos psicofisiológicos.

Sexo: diferencias funcionales y anatómicas entre individuos de una misma especie. Combinación y mezcla de rasgos genéticos, dando como resultado la especialización de organismos masculinos que producen gametos masculinos: espermatozoides y organismos femeninos que producen gametos femeninos: óvulos. Cuando el organismo es capaz de producir ambos gametos a la vez es llamado hermafrodita.

Sexualidad: aspecto central del ser humano, presente a lo largo de su vida. Abarca el sexo, las identidades, los papeles de género, la orientación sexual, el erotismo, el placer, la intimidad y la reproducción. Se vivencia y expresa a través de pensamientos, fantasías, deseos, creencias, actitudes, valores, conductas, prácticas, papeles y relaciones interpersonales. La sexualidad está influenciada por factores Biológicos, psicológicos, sociales, económicos, políticos, culturales, éticos, legales, históricos y espirituales entre otros.

Instinto sexual: en su teoría del instinto, Freud propuso primero la existencia de dos grupos de instintos: los instintos del yo o instinto de conservación y los instintos sexuales o líbido; posteriormente, consideró que los instintos de conservación son la expresión de la líbido hacia el propio individuo, por lo que sólo existiría la líbido como instinto básico y lo llamó pulsiones. Las pulsiones humanas fundamentales serían el Eros (que engloba las de autoconservación y las sexuales) y el Tanathos (pulsión de muerte), pareciendo que lo que sería instintivo en el ser humano según las teorías freudianas sería la búsqueda de placer en sí mismo y el rechazo del dolor. Aunque a veces se buscan el dolor y lo extremo por el Tanathos, lo que en algunos casos podría conducir al suicidio para evitar el sufrimiento, cuando el dolor físico o psíquico es muy grave. Esto no sería una peculiaridad propia de los seres humanos, pues parece haber constancia de casos de suicidio en animales.

La sexualidad humana: representa el conjunto de comportamientos que conciernen a la satisfacción de la necesidad y el deseo sexual. La complejidad de los comportamientos sexuales del hombre es producto de la cultura, factores sociales y a su vez de la inteligencia. El instinto sexual no está en su totalidad gobernado por el hombre a pesar de ser un ente pensante por excelencia. No obstante los humanos manejan códigos genéticos que los impulsan hacia  una vida instintiva del placer, la agresión y el miedo.

Hablar de sexualidad es hablar de un término más complejo donde intervienen hechos, fenómenos, acontecimientos, y constantes en los seres humanos. Concretamente tiene que ver con cinco factores  que son: el sexo, el género, la reproductividad, los vínculos afectivos y finalmente el erotismo.

El género es una construcción de la sociedad, una etiqueta, la cual incluye ideología, valores, comportamientos, que distinguen a los hombres de las mujeres en las sociedades. De ahí los roles de géneros, los cuales distinguen al rol masculino injustamente sobre el femenino, no existe la igualdad en esos roles injustos para ellas, pero a su vez injustos también para ellos, ya que se les cancela su expresión de sentimientos.

La reproductividad no solamente se refiere a la fusión del óvulo con el espermatozoide y tampoco al intercambio de material genético para la creación de nuevos seres sino a la reproductividad de ideas, de conceptos y de valores. Hay personas  que no procrean pero que son magníficos padres.

        

Los vínculos afectivos generalmente asociados al amor, pero que realmente tienen implícitos sentimientos básicos como el miedo, alegría, tristeza, enojo y amor (MATEA). Estos en conjunto conforman la carga afectiva que se producen en la vinculación de pareja y otras relaciones humanas.

El erotismo se refiere a un fenómeno particularmente humano y consiste en: deseo, excitación y orgasmo. Tiene que ver con las relaciones sexuales, pero también con su calidad y disfrute.  

Freud interpretó el aspecto agresivo del comportamiento como parte constituyente del instinto sexual. Esto sucedía en el período inicial de sus estudios, cuando su atención se hallaba centrada en el instinto sexual, considerado el elemento fundamental en la aparición de las neurosis. Freud explicaba que el componente agresivo consistía en la tendencia a querer dominar el objeto de amor y que su origen era incierto.

Según esta hipótesis, la agresividad sería un aspecto del impulso sexual, y la agresión, es decir el comportamiento agresivo, un componente del comportamiento sexual, subordinado a este último y tendente a superar los obstáculos que pudieran interponerse en la consecución del placer. Sin embargo, más tarde Freud, a través de la observación más objetiva de los impulsos sádicos de sus pacientes y de los juegos de los niños en ocasiones crueles con los animales, llegó a considerar la agresividad como un impulso autónomo independiente de la sexualidad.

El limitar la actividad sexual incrementa factores que perturban la capacidad de goce, el deseo se ve reducido, se incrementa el temor a la vida y el miedo a la muerte. Se coarta la felicidad individual.

Diferentes teorías desde la antigüedad, afirman la existencia en el humano del instinto sexual. Su finalidad es el placer, se manifiesta desde la infancia a través de sus zonas erógenas y puede prescindir de otro objeto erótico en forma de autoerotismo. Hoy en día la Psicología moderna afirma que la sexualidad puede y debe ser aprendida.

En la cultura sexual, el comportamiento sexual solo puede entenderse dentro  del marco de referencias culturales. En toda sociedad hay exigencias, normas, tabúes que regulan numerosos aspectos de la vida sexual. Las personas indican con quien tener relaciones, donde tenerlas, con qué frecuencia, qué caricias deben preceder al coito, qué hacer después del coito, entre otras cosas. Para los adolescentes los valores morales y creencias religiosas, les generan una voz interior que los guían para resistir las presiones de mantener relaciones sexuales antes del momento “indicado”, pero debido a su naturaleza rebelde, la sensación de no estar en nada los apremia; el deseo de agradar a otros y sentirse parte de un grupo de amigos los lleva en muchas oportunidades a involucrarse en relaciones sexuales para no ser menos que los demás y ser aceptados en el grupo, esto los lleva a frustraciones por no poder experimentar lo que dicen que se siente, pues en su inmadurez no comprenden que el sexo no es solamente físico; también es emocional y las emociones varían de persona a persona.

...

Descargar como (para miembros actualizados) txt (12 Kb) pdf (97 Kb) docx (14 Kb)
Leer 6 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com