Producto integrador de aprendizaje “Albinismo en África”

UNIVERSIDAD AUTÓNOMA DE NUEVO LEÓN[pic 1][pic 2]

FACULTAD DE CONTADURÍA PÚBLICA Y ADMINISTRACION

Unidad de Aprendizaje:

Competencia comunicativa

Producto integrador de aprendizaje

“Albinismo en África”

Alumno:                                                               Maestra:

Lizeth Jaqueline Hernández Reyna                    María de Lourdes Cantú Contreras                                

Matricula: 1744879

Aula: 621

Grupo: 1G

Carrera: Contador público

        San Nicolás de los Garza, Nuevo León, 03 de noviembre del 2017

A continuación, hablare sobre el Syndrome de Hermansky-Pudlak mejor conocido como “Albinismo”. Este tema no es muy conocido y muchas veces se tiene un concepto erróneo de ello; la definición correcta según Lluís Montoliu (2006): “es un conjunto de condiciones congénitas que afectan a los humanos y que globalmente se caracterizan por la ausencia o disminución de pigmento (melanina) en la piel, los ojos o el pelo.” Cabe aclara que las personas albinas nacen con esta condición, no se “vuelven” albinas, ni lo “padecen”. Es importante referirse al albinismo como una condición genética y no caer en las viejas creencias. Las personas con estas condiciones genéticas, especialmente las que están resididas en África pasan muchas situaciones desagradables. En el presente ensayo se hará referencia a estas vivencias que pasan los albinos, explicando algunos de los miedos que pasan y como ven la vida. Se hará mención de fundaciones que ayudan a estas personas brindándoles protección y vivienda.

Existen dos tipos principales de albinismo: el ocular que afecta solamente los ojos, y el oculocutáneo, que es el más frecuente afectando los ojos y la piel, se da de manera más acentuada en las personas de raza negra africana.  

El principal problema de las personas albinas no es su falta de pigmentación sino las alteraciones asociadas en su visión. Las personas albinas pueden presentar las siguientes alteraciones visuales: falta de agudeza visual, visión nocturna o en penumbra reducida, visión estereoscópica (binocular, en tres dimensiones) limitada o reducida. Los albinos que padecen la piel blanca deben protegerse de la luz solar para evitar quemaduras o desarrollar algún tipo de cáncer de piel.

 Sin embargo, la gente es ignorante a las causas, consecuencias y cuidados del albinismo, exponiendo a estas personas en diversos peligros.

Numerosos son los mitos relacionados a las personas con albinismo, en África se encuentran los siguientes:

Se les considera personas inmortales, fantasmas e inhumanas, también que es una maldición mandada por los dioses; quien los toque quedará maldito, tendrá mala suerte y se contagiará de enfermedades o  morirá si se relaciona con este tipo de personas; que la utilización de extremidades y otras partes del cuerpo podrían emplearse para realizar pócimas mágicas que harán volverse rico y próspero.

En 2008 según Manuel Carballal menciona, que, la creencia en el norte de Tanzania según la cual ingerir una pócima confeccionada con partes de cuerpos de albinos propicia encontrar oro o hacerse rico se extiende, ha cruzado a Burundi y se teme que llegue a otros países africanos.

En países como Tanzania o Malawi ubicados en África, los brujos de las aldeas han extendido la idea de que los niños albinos son demonios que atraen a la mala suerte y que la única forma en la que pueden ser valiosos para las aldeas es amputándoles alguna parte del cuerpo o sacrificarles en rituales.

 En lo que va de año, y pese al esfuerzo del Gobierno tanzano y de su presidente, Jakaya Kikwete, que inició una campaña de persecución de los brujos, más de 30 albinos, entre ellos un bebé de siete meses, han sido asesinados.

Las persecuciones contra los albinos no paran; día y noche estas personas viven con el temor de que alguien llegue a sus casas y atente contra sus vidas o en contra de sus hijos. Muchas familias esconden a sus hijos o los llevan a centros de refugio especiales para albinos. Los cazadores de albinos usualmente atacan a los más pequeños, ya que estos no pueden defenderse, usan machetes y cuchillos para cortar el mayor número de extremidades posibles y se marchan dejando a la persona muerta o agonizante.

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