Territorial
Enviado por mfergy • 5 de Septiembre de 2013 • 1.934 Palabras (8 Páginas) • 283 Visitas
La planificación territorial participativa es un planteamiento integrado del desarrollo que trata de aumentar los ingresos y mejorar las condiciones de vida de los hogares rurales en las zonas prioritarias de desarrollo. Este planteamiento ha sido utilizado durante los siete últimos años en Filipinas por el proyecto Comunidades de reforma agraria sostenibles – Apoyo técnico a la reforma agraria y el desarrollo rural (SARC-TSARRD), ejecutado por la FAO. El punto de partida de este proceso es una comprensión clara de la situación, problemas y potenciales existentes en el plano local; luego, se formulan planes de desarrollo, como base para acceder a los recursos de las distintas instituciones locales e internacionales orientadas al desarrollo, incluidas las organizaciones populares.
INTRODUCCIÓN
Para hacer frente a situaciones territoriales tensas en zonas críticas, se plantea en primer lugar la cuestión del nivel de las intervenciones. (1) El objetivo del proceso de diagnóstico territorial es reforzar el diálogo y la confianza entre los diversos actores y las instituciones. Para orientar de forma concertada los cambios sociales, culturales y políticos, y mejorar la articulación de las intervenciones entre los diferentes niveles de decisión (la sociedad civil y sus organizaciones, el Estado y sus órganos), se consideran las instituciones descentralizadas (locales o municipales) como el nivel de referencia por antonomasia. Sin embargo, como la mayoría de las dinámicas sobrepasa los límites políticos y administrativos, es importante tener en cuenta las externalidades que condicionan el desarrollo y las acciones llevadas a cabo en el territorio. Se plantea pues el problema del ordenamiento de las intervenciones intermunicipales, supralocales, regionales y, ocasionalmente, supranacionales . ambientales, productivas, etc.) que se han de valorar?
El concepto de ordenamiento territorial sistémico no puede dejar de lado la necesidad de presentar una utilidad práctica para los países miembros de la FAO. Operativamente, el (3) ordenamiento territorial es un instrumento que requiere un diagnóstico, una planificación (u ordenación), y una propuesta y formulación de pautas para una actuación política que se ha de inscribir en un marco regulador adecuado, en función de ciertos objetivos colectivos, consensualmente identificados, de transformación del territorio.
Para la elaboración de un (4) ordenamiento territorial socialmente consensuado - desde el diagnóstico hasta la mesa de negociación - el punto de entrada serán los actores sociales e institucionales - históricos o emergentes - que viven o interactúan en un determinado territorio; y aceleran, frenan, consolidan o modifican unas dinámicas territoriales ya definidas, o ponen en marcha nuevas dinámicas: «El objetivo no debería ser el espacio, sino la relación sostenible entre el territorio y sus habitantes» . En este proceso, «la percepción, las ideologías, los proyectos políticos, la dinámica económica y los niveles de articulación y coherencia entre los diversos sectores sociales juegan un rol fundamental» .
DEFINICIONES CONCEPTUALES
En ámbito científico y técnico, conceptos como «planificación» y «gestión» se suelen emplear de forma indistinta. Sin embargo, cabe distinguir entre «ordenamiento», «planificación» y «gestión».
«Planificar, tal como indica su nombre, significa en sentido estricto trazar, elaborar un plan, basándose en un diagnóstico determinado y con objetivos previamente definidos. La planificación mira al futuro. El concepto de gestión proviene del inglés management, así pues se traduce al español indistintamente con los términos gestión o manejo, administración o dirección. La gestión es por lo tanto el manejo o administración de un objeto determinado. Se refiere al presente, y para su aplicación requiere planificar, es decir, mirar al futuro. Desde esta óptica, gestión ambiental es el manejo o administración de un espacio determinado, con especial atención a la dimensión ambiental.
LA FUNCIÓN DEL ESTADO Y LA PARTICIPACIÓN
El ordenamiento territorial involucra a toda la sociedad, y el Estado debe liderar la programación general de dicho ordenamiento. Es necesario definir un marco normativo coherente de referencia, y brindar un apoyo efectivo a los procesos de descentralización del aparato administrativo y sus competencias. Los gobiernos locales (municipios, distritos, etc.) deben asumir la responsabilidad de manejar la confrontación entre las distintas aspiraciones e intereses –competitivos y eventualmente contradictorios– de las organizaciones de la sociedad civil y de los actores públicos y privados. Los representantes de los poderes públicos deben articular, en función de objetivos regionales y nacionales, las diferentes «visiones sectoriales» de los distintos actores, con el fin de promover un desarrollo económico, social y ambientalmente sostenible.
Refuerzo del capital social. Es necesario facilitar la comunicación y la instalación de un polo local de negociación con objeto de reanudar el diálogo y los vínculos entre la sociedad civil y las instituciones locales, con el reconocimiento, por parte de los actores institucionales, de las nuevas responsabilidades de las colectividades locales y del partenariado entre los distintos actores.
Etapas del diseño del proceso metodológico
El proceso metodológico se compone de tres etapas principales: (9)
• La observación inicial, que permite la identificación de la situación mediante una primera aproximación al territorio en su conjunto. Esta etapa corresponde a una toma de contacto inicial con la situación problemática, y en ella se persigue «desbrozar» las vías por las cuales ha de proseguir el proceso de diagnóstico territorial.
• La comprensión, o valoración del territorio. En esta etapa se lleva a cabo una calificación del territorio y un estudio de los protagonistas; se analizan los problemas y sus causas, se hacen surgir las condiciones que favorecen la confrontación con los márgenes de flexibilidad de los actores, y se propicia la apertura del diálogo.
• El horizonte de negociación, o expresión de las condiciones favorables al debate sobre la problemática del territorio. En virtud de estas condiciones se diseñarán los principios de búsqueda de un consenso, y se establecerán normas y mecanismos para la mesa de negociación.
La enumeración de estas actividades no pretende ser exhaustiva, y su mención no obedece a un orden rígido y lineal. Puesto que el proceso pretende ser iterativo, probablemente se tratarán al mismo tiempo varias cuestiones que podrán ser retomadas posteriormente en función de nuevos análisis.
Los objetivos
...