El Juego Y El Niño

Datos para una historia de la expresion corporal

El niño debe estar con todo de sí –capacidad mental, corporal, emocional, comunicativa, vivencial,…-, para así lograr un movimiento fructífero, logrado y completo. Por esta razón, Penchansky habla sobre la influencia que puede tener el lenguaje corporal en los chicos, pues de acuerdo a la autora ésta puede ser negativa o positiva. Positiva al referirse que este lenguaje ayuda a que el niño encuentre su propia expresividad, y negativa, cuando el niño lo recibe como un modelo, una orden a seguir sin poder expresar lo que vive y ampliar su expresividad.

Lo más importante es que cada miembro del grupo que participa en clase de expresión corporal no sea un ente que obedece órdenes, sino que disfrute y se sienta libre de actuar. Asimismo, el docente debe saber escuchar y sentir lo que los niños desean expresar, pues es importante respetar el ser de cada niño y respetar su forma de aprendizaje, brindando espacios y estímulos acordes para desarrollar en ellos su capacidad imaginativa y creativa.

* Ubicación y encuadre elegidos.

Penchansky indica que todo niño puede hacer expresión corporal, sin importar condiciones económicas, sociales, culturales, especiales y otras.

Desde temprana edad, un niño siente la necesidad de realizar movimientos fundamentales de locomoción –correr, saltar, caminar, reptar,…- y la mejor manera de descubrir estos movimientos y su cuerpo es jugando, disfrutando de lo que hace, ya que esto ayuda a que el aprendizaje sea significativo, relevante y que creen la necesidad de partir de su cuerpo para reconocerse,comunicarse y sentirse libres.

* La actitud y rol docente.

El interaprendizaje, es decir, tanto alumno como docente aprenden en una relación de mutuo apoyo y comunicación, es de gran valor en expresión corporal ya que aporta a un desarrollo conjunto de su expresividad que se logra al tomar las ideas que surgen del grupo e imitarlas porque cada uno aporta algo suyo y propio divertido.

La autora dice que el docente debe tener un autoconocimiento propio tanto de su cuerpo, como de toda su integralidad para enseñar y proporcionar seguridad y confianza al alumno, así se abrirá y será más fácil conocer lo que piensa y lo que siente.

Una clase de expresión tiene tres momentos: de apertura –calentamiento: inicia con lo que uno quiere hacer-, un desarrollo y un cierre. Estos momentos se los lleva a cabo pero es importante aclarar que los alumnos hacen aportes significativos que ayudan al docente a llevar la clase sin dejar a un lado los objetivos propuestos para ese día.

* Las técnicas corporales a lo largo del tiempo.

Según Penchansky existen diferentes técnicas de desarrollo corporal (tipos de danzas o gimnasia), pero éstas solo buscan la belleza, el perfeccionamiento humano y el dominio de convencionalismos de cada técnica.

...