Mi Escuela Ideal

Mi Escuela Ideal

Con el informe de la UNESCO, elaborado en 1996, sobre la Educación en el Siglo XXI se dio un gran paso al dejar explicitado que la educación constituye un instrumento indispensable para que la humanidad pueda dirigirse a lograr la paz, la libertad y la justicia social, a través de desarrollar individuos más genuinos y armoniosos, para con esto hacer retroceder la pobreza, la desigualdad, la violencia, la exclusión, etc.

Pero al tratar de globalizar la educación e implementar un nuevo plan y programa de estudio en nuestro país se perdió de vista las características del medio socioeconómico y cultural del mismo, puesto que varias comunidades y docentes no tienen la infraestructura necesaria y el conocimiento requerido para implementar en su totalidad dicho plan y programa.

Por esto, hablar de una escuela ideal sería hablar de una institución que proporcione al ser humano los elementos necesarios para desarrollarse en la vida social, como esta esté constituida y bajo el modelo económico en que la misma se desarrolle, y que además provea recursos adecuados para que todo individuo pueda desplegar su humanidad en relación con el resto, a través de un Modelo Educativo, que desarrolle en cada individuo la capacidad de desempeñarse satisfactoriamente en cada situación que la vida le proponga (laboral, personal y social), haciendo uso de sus habilidades, destrezas, conocimientos, actitudes y valores, buscando siempre el bien común y atreviéndose a defenderlo.

Mi escuela ideal sería aquella independiente del Estado y de los gobiernos de turno que cambian las leyes según su parecer, desde un punto de vista político y alejado de la ciencia pedagógica, que impone como han de ser las nuevas instituciones y sus docentes pero que no aportan las ayudas y recursos necesarios para llevar a cabo las reformas, no mejoran la formación inicial del docente para que este adquiera su identidad como tal, y no regulan adecuadamente la formación continua, siendo un sistema de cursos el que esta instaurado, quedando este sistema incompleto y de corto alcance, no mejorando sustancialmente las capacidades y nuevas competencias que han de adquirir los docentes. Y por supuesto mi escuela ideal al estar fuera de gobiernos, adquiere mayor autonomía tanto para la organización en sí, como para los docentes, pues estos al fin adquieren mayores responsabilidades y derechos sobre la educación, recuperando el valor y el status que el docente o profesor tenía hace tiempo y que se ha venido devaluando.

Además, que todos los docentes reflexionaran conjuntamente sobre cómo están aprendiendo los alumnos y evalúen los procesos tanto del aprendizaje de los mismos, como de la enseñanza de los docentes. Con esto conseguir que los docentes se preocupen por cuidar en conjunto todos los detalles de la educación, se conviertan en seres creativos, innovadores y asuman una identidad

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